—...¡Fue increíble! Me siento tan afortunada de haber sido parte de ese momento —dije emocionada
Antoine me miraba sonriente —Eres increíble, Bea...me sorprendes cada día más —dijo mientras tomaba mi mano y entrelazaba nuestros dedos
El plan que Antoine tenía para nosotros era un picnic en la playa. Tuvimos que viajar algunas horas, el camino fue largo, pero no lo sentí porque dormí todo el trayecto.
Antoine se había tomado la molestia de traerme un traje y un bikini, para ahorrar tiempo. Así que del hospital, nos fuimos directo a la playa.
En estos momentos, nos encontrábamos en la playa y aproveche para contarle cómo había sido el turno. Sobre todo, el hecho de que estuve con Tefi en su parto.
Ya nos habíamos terminado todo lo que había traído Antoine, ya que no habíamos comido nada y estábamos muriendo de hambre.
—Bea... —me llamo el ojiazul, luego de un rato en el que solo estábamos mirando hacia las olas, uno al lado del otro
Lo miré, atenta —¿si?
El sonrió y regresó su mirada al mar —¿Tienes un número favorito? —preguntó
Yo lo pensé —uhm...el siete, dicen que es el número de la suerte —respondí
El asintió y se quedó callado por un rato —Bea —volvió a llamarme
—¿Si?
—Te amo
Sonreí —Te amo más, cariño
—Sonará cursi y todo lo demás, pero, tienes todo lo que una vez soñe... —murmuró —En ti encontré lo que siempre busqué, sin necesidad de buscarlo. Debo confesar que me llamaste la atención desde la primera vez que te vi en el hospital...en ese momento me sentí mal, porque estaba con Allison...pero en lo único que pensaba era en qué excusa poner para ir a verte de nuevo.
Lo miré sorprendida —no tenía idea...
El río —Lo sé, soy bueno disimulando
Ahora fui yo quien rio —ni tanto, Amy me dijo que se dió cuenta que nos gustamos el día del asado —dije, recordando lo que me comentó mi amiga en el partido
Él negó —entonces todos se dieron cuenta, menos tú
Me encogí de hombros —Estabas con mi amiga, no podía pensar en eso. Sin embargo, déjame decirte que siempre me has parecido muy guapo y no solo me gustabas por ser mi jugador favorito —sentí mis mejillas arder
—Pensé que te agradaba solo por estar con Allison —dijo entre risas
—Al parecer yo si soy buena disimulando —dije riendo también
Nos quedamos en silencio un rato, hasta que él me miró, sentándose de manera que quedó frente a mí, provocando que lo mirara también. El azul del mar frente a nosotros no se compara con el azul de sus ojos.
—Bea —tomó mis manos entre las suyas —Llevo queriendo hacer esto desde hace días, pero no había encontrado el momento para hacerlo. No miento cuando te digo que eres todo lo que necesito en mi vida, y sonará egoísta, pero te quiero solo para mi. No quiero apresurarnos ni arruinar las cosas, pero hay una pregunta que he querido hacerte...
Lo miré atenta, sintiendo como el corazón se me quería salir del pecho
—Bea...¿quieres ser mi novia? —preguntó, pero antes de dejarme responder, habló de nuevo —No me malinterpretes, quiero que seas mi esposa...quiero que seas mi todo...sin embargo, como dije, no quiero arruinar las cosas...
—Si quiero... —dije interrumpiendolo —Si quiero casarme contigo, Antoine. Tampoco quiero arruinar las cosas, pero siento que no hay nada que arruine lo que tenemos...ya hemos pasado lo peor y si aún seguimos aquí, es porque ambos queremos esto —noté como sus ojos tenían un brillo que juro no haber visto antes
—Casemonos entonces —dijo sonriente
Unimos nuestros labios en un beso que hablaba por sí solo. Ponía en evidencia todo lo que dijimos y todo lo que quedaba por decir. Haciéndome sentir no solo mariposas, si no, un zoológico.
Me separé del beso y pegue nuestras frentes delicadamente —¿Por qué me preguntaste cual era mi número favorito? —pregunté confundida, recordando su pregunta
—Es la cantidad de hijos que tendremos —dijo serio, a lo que lo miré asustada, provocando que él soltara una carcajada, separándose —solo bromeó, preciosa. No lo sé, solo lo pregunté. Me puse nervioso —confesó
—Así que...¿te pongo nervioso? —dije, acercando mi rostro al suyo
Sus ojos se desviaron a mis labios y noté como tragó saliva —Para nada
Yo rodé los ojos divertida y me aleje —está bien
Él frunció el ceño —¿no ibas a besarme? —preguntó
Yo negué —Nop, ya no quiero —dije y me senté mirando a las olas
Lo miré de reojo y noté como me miraba ofendido —Hay una de dos...o me besas, o te beso —dijo encogiéndose de hombros —tú decides
—Si quieres besarme, vas a tener que atraparme primero —dije, levantándome de la arena y corriendo al mar, escuchando los pasos de Antoine detrás de mí.
Y eso era lo que me encantaba de estar con Antoine. Éramos simplemente él y yo. Dos adultos que se sentían como niños cuando estaban juntos. Que se traían paz el uno al otro y se amaban tanto, que a pesar de todos los obstáculos que hubieron, ahí estaban: corriendo como dos niños felices por la arena. Eso éramos él y yo, y nadie podría arrebatarnos este momento.
FIN
Ahora sí, me siento mucho mas contenta con el final que le di a la historia <3
Antes me gustaba, ahora me gusta más! Espero a ustedes tambien les haya gustado! <3
Me gustaría leer lo que opinan de la nueva edición de la historia <3
Muchas gracias a todxs los que se tomaron el tiempo de re-leer la historia y acompañarme durante el proceso de edicion <3
Y a los que leen por primera vez, espero les haya gustado tanto como a mí <3
Gracias por leer <3
xoxo, itzjustmebae
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TAKEN → Antoine Griezmann ✓
FanfictieDONDE Bea conoce a los jugadores de su equipo favorito porque su mejor amiga sale con su jugador favorito O DONDE Bea se enamora de su jugador favorito y novio de su mejor amiga, pero hace hasta lo imposible para no entrometerse. [Editada exitosamen...