El sistema nervioso es un conjunto organizado de células especializadas en la conducción de señales eléctricas. La célula básica del sistema nervioso de todos... ¿Y a quien diablos le interesa?.
Era increíble como el amor te hacia perder la cabeza. Cómo lograba llevarse parte de si mismo. Cómo lograba hacerte soñar con los ojos abiertos para terminar en insomnio. Cómo lograba detener el tiempo cuando este iba increíblemente rápido. Cómo lograba hacerte aferrar a lo imposible. Lograba millones de cosas. Lograba elevarte en las nubes de una forma increíble. Pero luego te desplomaba porque se le daba la gana. Te dejaba con un corazón roto a tu suerte. Y el lo sabía muy bien.
Jane Hopper, o "El" para los amigos, había sido su primer amor. Jamás imaginó que podría enamorarse de alguien en lo que constaba de una semana y un poco más. Pero lo había hecho, se había enamorado a primera vista. Se había enamorado como un tonto. Un ingenuo. El más grande de todos.
Todos sus amigos le dijeron que solamente tenía cierto cariño hacia ella. Después de todo, ninguna chica se le acercaba. Por esa razón, y muchas otras, había tenido varias discusiones con Lucas, e incluso Dustin. Pero él estaba tan cegado por el amor que no se daba cuenta de que no la amaba. Tal vez la quería como amiga, pero no como algo más. Ella solo lo había salvado y allí quedaba todo. Y tal vez debió darse cuenta de que el sentimiento era mutuo.
"El" aún no descubría del todo lo que era el amor. Pero lo comprendía lo suficiente para saber que no estaba enamorada de Mike. Lo quería, era su mejor amigo pero no llegaba más allá de eso. Y con su nula experiencia en esas cosas, tal vez no había usado las palabras correctas para decirle de su situación a Mike. Solo diremos que Mike se la paso llorando como un bebé y que Jane no sabía si reír o culparse por la situación actual de Mike.
Mike estaba devastado. Su primer y según el único amor, lo había abandonado. Y para tartar de sacar a su cerebro de su desdicha, se había convencido de que realmente nunca amo a Jane, y solo sentía cariño por ella por haberlo salvado. Claro que, aún no se convencía del todo con esa teoría, pero seguía intentándolo. Al menos ya no se quedaba sumido en sus pensamientos en las clases del señor Clarke. Casi.
—Muy bien niños, tendrán que hacer un trabajo sobre el tema de hoy en parejas - mencionó el profesor provocando sonidos de frustración y molestia del resto de la clase. Salvó el grupo de seis. - Las parejas serán, Jane y Max, Dustin y Lucas, Mike y Will... - y así siguió diciendo.
Sin poder evitarlo una leve sonrisa se extendió por su rostro al escuchar el nombre de su amigo. No sabía porque, pero la presencia o simplemente la mención de Will en alguna cosa hacía que el mayor centrará su completa atención en el tema y que una sonrisa se extendiera en su rostro. Tal vez nunca lo comprendería, jamás comprendería porque el castaño podía alegrarlo de sobre manera, incluso hasta olvidar a Jane. Quería pensar que era porque eran mejores amigos desde kinder, pero era más que eso. Y lo sabía.
—Mike, reacciona. - mencionó la voz grave de Lucas sacandolo de sus pensamientos.
—¿Qué? ¿Qué pasó? - exclamó entre sobresaltado y sorprendido.
—La clase ya terminó, nos vamos - mencionó Dustin con su mochila en mano. A lo que Mike solo asintió.
El grupo de seis se dirigió hacia la salida, todos con sus bicicleta, salvó Max que tenía su patineta y que a Jane la recogía su padre. Era raro que aún no la dejara salir mucho considerando que Will ya podía salir por su cuenta. Consecuencias de tener un padre sobreprotector.
Pero de un momento a otro, su mirada quedó en el pequeño castaño que estaba ante sus ojos. Literalmente era adorable. En todo ese año, no había crecido más de uno o dos centímetros, quedando con la altura de 1;57 o incluso menos, mientras que Mike era similar a una jirafa a comparación de el. La pubertad sí que había hecho su trabajo, dandole varios centímetros de más llegando a medir 1:75 o tal vez más. Lo cual, hacia al castaño verse como un adorable bebé. Un bebé con hermoso cabello y hermosos ojos y demás. Y podía haberlo seguido apreciando lo todo el día, sino hubiera recordado el trabajo. Y que eso estaba mal.
ESTÁS LEYENDO
Hugging and Kissing {Byler & Foah}
Romansa"Empujando y empujando... abrazando y besando. Todo el tiempo; Todo de nuevo" Historias cortas, sin un orden cronológico de este ship. Si este no es de tu agrado, mejor no lo leas y trata de evitar los malos comentarios. •Prohibidas adaptaciones o...