por dinero 《JOERICK》 Terminada

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N/O:

Erick llego a su casa con una sonrisa idiota en su rostro. Todavía no podia creer lo que hacía pasado.

El ojiverde no ha dejado de pensar en lo sucedido hoy en la mañana.

(...)

-¡Mierda! ¿entonces te beso? -dice el rizado del otro lado de la linea.

-¡Si!, aun me cuesta asimilarlo -dije igual de emocionado que el.

-Erick -su tono era mas tranquilo pero no sacaba la emoción- no confíes mucho en el -y ahí salio el zabdiel sobreprotector.

-tranquilo Zabdi -soltó un leve suspiro -no se la voy a dejar facil...

(...)

Joel:

No pense que besar a Erick estuviera tan bien. Desde que acepte esta apuesta crei que me costaria estar con el, besarlo. Pero siendo sincero, me gusto. Y mucho

Erick

Es jueves.
llegue al instituto. Entre y fui directamente a los casilleros. Saque los libros que necesitaba. Sacando y poniendo libros vi el de Física.

Mierda, mierda, mierda, hoy era jueves, tengo que ir a la casa de joel.

Luego de ese pensamiento sonó el timbre del colegio. Le mande un mensaje a mi mama diciendole que iria a lo de Joel y me puso un "ok, no llegues tarde".

Entre al salón de literatura y ahi estaba Zabdi esperándome con una sonrisa muy enorme en su rostro.

Me iba a ir a sentar pero un chico se me adelantó. Cuando logre reconocerlo me di cuenta que era Christopher Velez. esperen...¿que?

El castaño le dice unas palabras a Zabdiel y este asiente.
Christopher Velez se habia sentado al lado suyo.

Pude ver que en los labios de Zabdiel salian unas palabras que decían "lo siento".
Con unos gestos le hice entender que no habia problema.

Las clases pasaron normales, no vi a Joel en toda la mañana, perfecto, seguramente me dejaría plantado.

El timbre habia sonado indicando que las clases habían finalizado.

Di un gran suspiro y comencé a guardar las cosas en mi mochila.
Una vez listo salí del salón y empecé a caminar decepcionado hacia la salida.

Estaba apunto de cruzar la puerta cuando alguien me agarra del brazo.

-¿Olvidaste que hoy vienes conmigo? -dijo esa voz que me encantaba.

Voltie a ver y efectivamente era el. Sonreí.

-No, solo que como no te en en la mañana pense que te habías olvidado- dije empezando a caminar junto a el hasta la salida.

Nos dirigimos al estacionamiento.

-¿bien, tienes auto? -dije tratando de no sonar interesado.

Solto una risa a lo que yo fruncí el ceño.

-No me gustan los autos.

Voltie a ver y.... mierda