15 de Febrero, 2017. 1:45am.
La fria nieve cae sobre mi cabeza, dejando probablemente todo mi cabello de blanco. Admiro la ciudad pintarse del mismo color, tan solitaria y vacía, pero en el interior de esta, puedes escuchar el ruído de los autos.
Se que no tengo ningún derecho a quejarme por esto. Se que no he sido la persona más santa del mundo. Se que probablemente me merezco esto, y eso lo que me enferma.
Por un segundo enserio imagine que Norman y yo estariamos juntos. De verdad me imagine que estaría conmigo en la sala de partos, que dormiria a nuestro bebe en sus brazos, que lo vería caminar y hablar por primera vez, y todas esas cosas que hace un padre.
Y sin embargo, él va a casarse con mi hermana, y es que ni siquiera entiendo cual era su plan ¿decirmelo un día antes de la boda?
Mi celular suena por milesima vez en la noche, al desbloquear veo que otros dos mensajes se han agregado a los otros 48.
-Izzy, mi amor por favor escuchame.
-Isabelle, tendremos un bebe, mi amor, te amo , por favor.
-Dime donde estas, necesitamos aclarar esto.
-Izzy, por Dios. Estas embarazada y ya es de madrugada, por favor vuelve a casa.
-Te amo Isabelle, los amo a los dos. Mi amor, vuelve por favor.
Y otros más que dicen básicamente lo mismo.
Lo guardo de nuevo, para luego ponerme de pie y tomar la pequeña maleta que hice en su casa. Comienzo a andar hacia mi departamento, el cual no he pisado desde hace dos semanas. Pero me aterra que de aparezca por ahí, dado que tiene la llave.
Pero no puedo quedarme bajo la nieve toda la noche.
(***)
Al abrila, el sentimiento de abandono inunda todo el espacio. Mi departamento se encuentra frio, haciendo relucir que nadie ha estado aquí en días. Un pitido bastante peculiar llama mi atención, y me aproximo a la mesa donde yace la lámpara que Diane rompió hace un mes. El pequeño apararo brilla, y junto a este el número 34 yace en la pantalla.
34 mensajes de voz.
Con algo de duda, presiono el botón para que estos comiencen a reproducirse.
Mensaje número 1, grabado a las 11:45 p.m.
— Mierda, Isabelle. Te he estado llamando desde hace tiempo. Por favor, responde mis llamadas. Perdoname, soy un imbécil.
Preciono otro botón para adelantar el proceso
Mensaje número 5, grabado a las 12:56 a.m.
— Izzy, te amo. Te amo, te amo, maldición — su voz suena rota. Y se nota que ha llorado — No quiero perderte, no después de todo lo que pasamos mi amor.
Decido dejar de escuchar, pues nisiquiera se en que momento he comenzado a llorar. Me quito el saco, dejandolo en el sofa. Camino a pasos lentos a mi habitación, observando lo vacía y lugubre que se ve, tan vacía sin su calor.
Me despojo poco a poco de mis prendas, quedando en ropa interior. Voy hacia la cajonera, sacando la primer camisa que encuentro, llevamdome la no muy grata sorpresa de que le pertence a él.
Mierda.
Aspiro su aroma tan varonil impregnado en ella. Sin pensarmelo dos veces, la coloco con rapidez dandome algo de calor. Su olor llega aun más a mis fosas nasales, logrando que suelte otro par de lágrimas.
Carajo, que masoquista soy.
(***)
Algo desorientada, camino a pasos lentos hacia la puerta en donde una persona no para de tocar. Con algo de temor, me acerco a el pequelo agujero en la puerta, viendo quien esta detrás de esta.
¿Que hace aquí?
Abro la puerta con total desconfiaza pero a la vez curiosidad. El apaga el aparato, guardandolo en su saco.
— ¿Puedo ayudarlo? — le digo recargada en la puerta.
— Debe recordarme, señorita Fortier. Soy Todd Peterson, representante de Norman.
— Lo recuerdo, si — me hago a un lado, abriendo la puerta para dejarlo pasar. El ingresa a mi casa, analizando todo con una mirada rápida — ¿Que puedo hacer por ti?
— Antes que nada, lamento la penosa forma en que se ha enterado de la situación. Se que debió ser dificil dado su estado — dice el, dejando su maletin en la mesa de la cocina.
— Gracias, creo — digo confundida — ¿Gustas un café? — Todd asiente con la cabeza.
Me encamino a la cocina, encendiendo la cafetera con un poco ya que yo no puedo tomar eso. Una vez que esta listo, lo sirvo en una taza, tendiendosela al honbre. Me siento en la mesa. Él, imita mi accion, y ambos quedamos frente a frente.
— Mire, señorita Fortier, yo..
— Llamame, Isabelle.
— Isabelle — Todd bebe un pequeño sorbo, para luego dejar la taza en la mesa — Yo se que ustedes tenian una relación seria, y se que debe ser dificil que pase esto en pleno embarazo, pero por favor, te pido que entiendas a Norman.
— ¿Entender que? ¿Que va a casarse con mi hermana? ¿Que va a besarse y actuar románticos frente a las cámaras mientras yo quedo a un lado con su hijo? — digo un tanto alterada.
— ¿No piensas tolerar eso, nisiquiera por él? No sera mucho tiempo, un año mas tardar.
— Lo haría, pero tengo algo que se llama cariño propio. No soy un plato de segunda mesa.
Todd suspira con pesadez.
— Bien, si es lo que quieres, esta bien — dice él, sacando otros pocos papeles junto a una pluma — ¿Cuánto?
— ¿Cuánto que? — cuestiono confundida.
— ¿Cuánto quieres por desaparecer y no hablar nunca con nadie de que eso que llevas en el vientre es de Norman?
¿Acaba de llamar eso a mi hijo?
Hecha una furia, me pongo de pie, tomo la taza de cafe, arrojando el ardiente liquido en su cara. Todd se pone de pie, tallando sus ojos mientras se queja.
— Largate de mi puta casa, imbécil de mierda.
Todd se pone de pie, limpiando su rostro el cual se encuentra rojo. Toma su maletín con molestía pero a este punto me importa una puta mierda.
— De acuerdo, le diré a Norman tu desicion Isabelle — dice antes de diriguirse a la puerta y cerrar esta con furia.
¿Que?
¿Norman lo mandó a ofrecerme dinero?
✒No quiero que se acabe wee😂💔💔
Gracias por leer niñas💓
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París «Norman Reedus» ©
RomanceLo que pasa en París... ✒Primera novela de papi Norman😍❤ Espero que sea de su agrado. Gracias por leer, las amo bellas💕 Inició: 25 de Junio, 2017. Final: 24 de Marzo, 2018. -asskicker