París «Norman Reedus» ©

• Vingt - quatre

Maratón 3-5🗼

23 de Diciembre, 2016.

Quiero alcohol.

Quiero embriagarme, maldita sea.

Pero no, me voy a contener ya que este pequeño o pequeña no tiene la culpa de nada, y no pienso desquitarme con él por mis malas desiciones, como no usar protección. Pienso demandar a los creadores de las pastillas anticonceptivas, ya que yo las he tomado al pie de la letra y no vi que funcionaran muy bien.

Conduzco con nervios y rápides por tercera vez desde que me entere hacia los estudios de The Walking Dead. Si, he conducido otras dos veces aunque solo me quedo fuera del edificio, sintiendo mi pecho arder al imaginar que Norman esta adentro, sin idea de que tendremos un bebe. Posiblemente.

Hoy es su último dia de grabación o lo que sea que esten haciendo, según tengo entendido las últimas escenas de la septima temporada, que se estrenara en Febrero del siguiente año.

Estoy nerviosa, y cuando estoy nerviosa tiendo a beber un whiskey en las rocas. Carajo ¿las embarazadas tienen antojo de licor? Pero no, mierda Isabelle, controlate.

Estaciono el auto fuera de las instalaciones de amc, sintiendo mi estomago contraerse, o tal vez el por que el frijol esta pateando mis tripas, no lo se.

Aún nisiquiera asimilo la noticia. Jamás quise hijos, nunca me han llamado la atención excepto el hecho de que sus zapatos son tan pequeños y tiernos, fuera de eso jamás quise tenerlos, no hasta ahora. Y la situaciòn es peor, ya que he querido hablar con Mike, pero él parece haber desaparecido ya que no esta en su casa y no responde mis mensajes.

Al bajar del auto, camino unos pocos metros hasta la puerta de seguridad, donde un guarda con cara de perro cuida la entrada. Y luego caígo en que no tengo pase de acceso, lo que logra deprimirme. Antes de que el guardia diga algo, me adelanto.

— Se que sonara como una locura, pero vengo a ver a Norman, debe conocerlo — digo firme, tratando de morirme de la verguenza — ¿Me deja pasar?

— Buen intento. Te doy eso — dice él — Fuera de aqui.

— Hablo en serio, soy su cuñada.

— ¿Si? Felicidades. Largo.

— ¿Que tal...— digo rebuscando en mi bolso algo — si mi amigo Abraham Lincoln logra convenserlo? — digo alzando una ceja.

El guardia lo toma verificando a ambos lados de su puesto. Toma el billete, y lo guarda en su chaqueta y cuando creo que va a dejarme pasar vuelve a su posición inicial.

— ¿Entonces?

— Vayase, por favor señorita.

— ¿Me devuelve mi billete, al menos? — cuestiono con la poca dignidsd que me queda, sin embargo el tipo ni se mueve — Odio Estados Unidos — chillo cual niña pequeña.

— Más respeto a la madre patria, por favor — la voz de Jeffrey llega a mis oídos, por lo que giro con una gran sonrisa en mis labios — ¿Que haces aquí, Izzy?

— Vine a ver a Norman, pero esta señor — señalo al guardia — No me deja pasar.

— Amigo — dice directamente al tipo — Aprendete ese lindo rostro y dejala pasar cuando venga, es cuñada de Norman.

El tipo asiente sin más, y Jeffrey me extiende su brazo hacia la puerta. Le saco la lengua al guardia antes de entrar detrás de Jeffrey.

— No puedes culparlo, necesitas un pase nena — dice abrazandome por los hombros mientras caminamos al set.