Capítulo 17

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Poché

Sentí desvanecer, no creí que alguien nos hubiera visto.

-Ahora dime como se sentiría tu papá si viera esto –Dijo –Creo que lo que paso el sábado queda olvidado cierto amor, de ahora en adelante las cosas van a cambiar nos vamos a ver y vamos a salir cuando yo diga.

-No me puedes hacer esto Mario –Dije.

-Así serán las cosas –Dijo –Ahora ya vámonos.

Sentía la sangre hervir, no podía creer que Mario me estuviera chantajeando de esta manera y menos que se estuviera comportando así, pero no puedo hacer nada por el momento, mi papá no puede enterarse de lo mío con Calle.

Mario me llevo a la escuela y me acompaño a la primera clase.

-Te veo en la tarde amor –Dijo y me beso.

Vi que Sofía nos estaba viendo y abrace a Mario y le correspondí el beso.

-María José –Gritaron e inmediatamente reconocí la voz.

-Adiós amor –Le dije en voz suficientemente alta para que escuchara Sofía.

Mario se fue y se acercó Camila.

-Me puedes explicar que está pasando –Me pregunto Camila.

-¿De qué? –Pregunte sabiendo a que se refería.

Confiaba en Camila más que en nadie, pero no sabía cómo iba a reaccionar con lo que le iba a contar.

-Tuve que volver con él –Dije.

-¿Tuviste? –Pregunto.

-Tengo que contarte algo –Dije –Pero no puedes decirle a nadie.

-Jamás diría algo que me dijera Poché sabes que puedes confiar en mi – Dijo Camila.

-Lo sé, pero esto es algo complicado –Comencé a decir –Desde que Calle llegó a la escuela sabes que me comporte muy mal con ella, después fue mejorando nuestra amistad.

-No estoy entendiendo que tiene que ver esto con Mario –Dijo confundida Camila.

-Solo espera, tiene que ver, pero tengo que contarte desde el inicio para que entiendas todo –Dije –El sábado que fuimos al concierto y paso lo de Mario y Sofía yo estaba confundida con lo que estaba sintiendo con todo eso, llegamos a casa de Calle y ella quería que hablara que le dijera que pensaba, después me dio un regalo –Le mostré la cadena con el dije que desde ese día no me la había quitado.

No puedo explicar la Cara que tenía Sofía, estaba confundida, no comprendía nada y solo estaba ahí sin decir nada.

-No puedo explicarte lo que siento por ella solo sé que cuando estoy con ella son los momentos más felices –Dije – Camila eres mi mejor amiga y eres la única que lo sabe, bueno, eso es lo otro pero necesito que me digas algo.

-¿Por qué volviste con Mario? –Pregunto.

-¿Enserio? Te acabo de decir algo importante y eso es lo único que preguntas –Respondí.

-Poché, eres mi mejor amiga y te quiero y te respeto aun si me dices que te gusta un marciano, eso nunca va a cambiar el cariño que te tengo, aquí lo que me preocupa y sigo sin entender es porque si eres tan feliz con ella estés con Mario nuevamente y más después de lo que te hizo.

-Eso es lo otro, ayer que fui a dejar a Calle al aeropuerto porque se fue unos días con su mamá –empecé a explicar –Mientras estábamos esperando estuvimos platicando y yo estaba acostada en las piernas de Calle y ella me daba un beso cuando "nadie nos veía" y es ahí el problema, ayer Mario también fue al aeropuerto a dejar a sus papás y nos vio y nos tomó una foto y me chantajeo con que si no regresaba con él se la iba a mostrar a mi papá y tú sabes cómo es él con ese tipo de cosas.

-¡Es un Idiota! –Grito.

-Lo sé, pero por el momento no puedo hacer nada y tendré que hacer lo que él diga hasta que encuentre la manera de decirle a mi papá la verdad –Dije.

-¿Y Calle? –Pregunto Camila.

-Calle, ella no puede enterarse, estará fuera un par de semas y tengo que arreglar esto antes de que vuelva –Dije.

Sonó el timbre para el inicio de clases.

-Vamos s clases, al menos aquí estoy libre de él –Dije.

No sé cómo pudiste aguantarlo tanto tiempo –Dijo Camila.

Calle.

Por la mañana pensé en escribirle un mensaje a Poché pero mi teléfono estaba sin batería, lo conecte para que cargara algo, baje y mi mamá estaba en la computadora trabajando.

-Hola hija –Dijo mi mamá.

-Buenos días má –Respondí un poco cortante la verdad.

Aún sigo molesta por hacerme venir hasta acá, no era necesario, al igual mi mamá nunca me presta atención

-Má por la tarde voy a salir a comprar unas cosas que me hacen falta –Dije.

-Si está bien, por la tarde también saldré –Dijo.

Por la tarde Salí a comprar una cámara para grabarle cositas a Poché para el canal.

De regreso me tome con Mariand mi primera novia, ella era una chica de cabello castaño claro, ojos cafés y estatura muy bajita, estaba iniciando su carrera de actriz y bailarina. A ella la conocí hace algunos años en un concurso de baile e iniciamos una amistad que se volvió con el tiempo en mi primer relación con una mujer, por distintas cosas terminamos pero ahora somos muy buenas amigas.

-¡Hola! ¿Cuándo volviste? – Dijo Mariand.

-Hola –La salude –Volví ayer, pero es solo por poco tiempo-

-¿Cómo te ha ido, que has hecho? –Pregunto.

-La verdad es que no mucho, entre la escuela y que me encontré con la mujer de mi vida –Dije con una sonrisa.

-¿Tanto así? –Pregunto –Tienes que contarme todo, que te parece si vamos a comer algo para platicar agusto.

-Si estaría perfecto –Dije.

Fuimos a comer a un restaurant muy conocido en la cuidad y ahí estuvimos platicando hasta tarde. 

2 corazones y una pistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora