Madawar

Capítulo 28: Primera Ronda 4/4

— ¡¡ME HE QUEDADO ATRÁS!!

Sam no se contiene su furia ni un solo momento, ni siquiera se percata de Onjou y Lily. Él se pone en posición de un correrdor y se prepapara.

— Técnica de Arte Marcial: Kuaísu Yibù!! — Dice Mientras sus músculos se ponen más definidos.

Sam sin pensarlo dos veces sale más rápido que una bala, dejando un sonido incesante detrás de él. Esta técnica proporciona al usuario una velocidad mayor de lo normal, casi pudiendo sobrepasar la velocidad de el sonido, por eso al usarla, el usuario deja detrás un agudo muy agudo.

Onjou queda unos momentos perplejo y lo mismo pasa con Lily al ver esa velocidad. Onjou parece volver en sí y coge su bastón otra vez.

— Olvidé por un momento que seguíamos en la carrera... Técnica de Maná: Levitación — dice Onjou levitando su bastón.

— T-Tiene habilidades muy difíciles de conseguir... ¿Quién demonios es ese chico? — Dice Lily aún asimilando la situación.

Onjou la sujeta de la cintura y suben los dos al bastón, que da un gran impulso por su velocidad. Lily sabe que ya muchos deben estar delante, mientras que ella y Onjou se quedaron muy atrás por la pelea con el Torifu.

Mientras, Arthur y el chico se encuentran peleando contra Torino, el cual parece tener mucha resistencia ya que aguantó todos los golpes de ellos dos. Arthur piensa en usar el corte marino pero eso sería un desperdicio de estamina, la cual necesita para seguir. El chico se pone delante de Arthur.

— Te mostraré... ¡Un verdadero guerrero! — Dice el chico mientras prepara sus guantes de metal.

Cuando lo logra poner bien sus guantes, estos empiezan a brillar en las palmas de acero. Torino queda algo confundido al ver que rayos estaba intentado. El chico apunta con sus puños hacía donde se encontraba Torino. Sus guantes comienzan a brillar con más intensidad.

Torino está a punto de atacar pero el chico aparece en un instante al costado de Torino. El chico le da de lleno con el ataque; un puñetazo muy fuerte que hace que lo eleve a una de las copas de los árboles. Arthur y el chico aprovechan la oportunidad y salen corriendo lo más rápido que puedan. Mientras van corriendo, el sonido de una bestia grande se escucha por todo el lugar, cuando sorpresivamente un moribundo Gorial Plateado sale de entre los árboles disparado hacía el cielo.

— ¿Qué fue eso? — preguntó el chico mientras corre.

— No lo sé, pero no creo que debamos quedarnos mucho tiempo — Contesta Arthur.

Arthur y el chico continúan corriendo. Aunque se habían ayudado anteriormente, ahora los dos intentan quedar de primeros. Arthur se esfuerza usando la velocidad extrema y salta unos dos metros delante de el chico. Cuando Sam aparece inesperadamente del bosque a toda velocidad, con un sudado y lastimado cuerpo y quedando a la par de Arthur y el chico de los guantes.

— ¡¡Oye, eres el chico de antes que había lanzado lanzado!! — Dice el chico que se está quedando atrás.

Mientras están Sam y Arthur codo a codo para superar al otro, ellos vieron la meta que estaba a unos cuantos metros de ellos pero... Entre los dos, vieron la silueta de una persona aparecer al lado de ellos dos. Era uno de los participantes y el cual su presencia ahí fue casimente instantánea. Cuando Arthur y Sam lo vieron que estaba al lado de ellos por menos de un segundo, ese chico sólo tocó el suelo con sus zapatos y se impulsó a una velocidad inconmensurable, atravesando la meta en un simple parpadeo.

Cuando Arthur y Sam estaban apenas reaccionando a la velocidad que tenía ese misterioso sujeto, una fuerte ráfaga de aire aparece detrás de ellos, justo en el punto el cuál el zapato de ese sujeto había tocado el suelo. Arthur fue el primero en percatarse así que se lanzó hacía un lado, mientras que a Sam, no reaccionó a tiempo y no pudo esquivarla, haciendo que fuera embestido y lanzando por esa ráfaga de viento, hacía una zanja que estaba fuera del camino.

— "¿Qué clase de velocidad era esa? Incluso creó una ráfaga de aire detrás de él..." — Pensó Arthur mientras va corriendo nuevamente a la meta.

Arthur atravesó la línea de meta, seguido del chico con los guantes de hierro, que parece no haberse percatado de lo que había pasado ahí. Arthur ve como Sam aún no a salido del pasto alto de la zanja por dónde fue lanzado por esa ráfaga.

— ¿Quién eres? — Preguntó nervioso Arthur al sujeto.

El sujeto misterioso voltea a verlo y saca una sonrisa amigable mientras se pone un sombrero.

— Soy Raul R. Macross, mucho gusto — Dice él haciendo una reverencia.

— Pues yo soy Iván Guillo, y recuerda ese nombre porque yo te patearé el trasero — Interrumpe el chico de los guantes de hierro.

Raul se acerca a uno de los supervisores de la carrera. Ese supervisor quedó sorprendido por como llegó con tanta rapidez a la meta. Raul da un ligero golpe con sus palmas en frente de ese supervisor, sacándole del trance que estaba.

— ¡Ah! Mil disculpas, y-yo estaba... — Dice el supervisor avergonzado.

— No importa, ¿Hay algún puesto de comida cercano? Estoy hambriento — Dice Raul mientras pone sus manos en su estómago.

— T-tenemos comida en esas cajas, sírvase — Contesta el supervisor señalando unas cuantas cajas.

Arthur no suelta su mirada de encima de Raul, vio como lanzó a Sam, que de por sí, era muy fuerte. Arthur sabe que él no es normal, incluso su nombre lleva esa "R." que tiene Sam también en su propio nombre.

<<¡Continuará!>>