Amarte esta prohibido©

Capítulo 09

Benjamín

Cuando Milene me confesó que me tenía que hablar acerca de su antigua relación no estaba del todo seguro no quería ser consiente de ese idiota pero debo admitir que tenía un poco de curiosidad pero al mismo tiempo me sentía preocupado por ella podía notar que era difícil para ella, tomé su mano como signo de apoyo y ella me sonrió.

—Conocí a Frack durante el entrenamiento de una competencia, era el sobrino de mi antiguo entrenador así que nos frecuentabamos mucho, teníamos muchas cosas en común así que empezamos a salir. Al principio era alguien muy lindo y atento pero también era alguien muy celoso, empezó con pequeños comentarios sobre mi vestimenta, mis amigos se estaba volviendo alguien autoritario así que pensé que lo mejor sería terminar pero él se negó, durante mi competencia en Europa nosotros nos distanciamos así que di por hecho que había terminado, la verdad es que me equivoque. Cuando volví al país asistí a una fiesta con mis padres pues les había comentado que pensaba retirarme para hacerme cargo de la empresa familiar, ahí fue cuando lo volví a ver resultó ser primo de Charlie, en ese entonces su familia se volvió muy cercana a la nuestra debido a los negocios así que nuevamente se volvió inevitable el verlo, yo había terminado nuestra relación él no así que anunció públicamente que estábamos comprometidos era algo de lo cual no podía escapar así que discutimos—hubo un silencio de su parte como si no quisiera continuar —ese día yo, bueno después de discutir me fui molesta y bebí muchas copas de mas ni siquiera se como pasó pero Frack y yo tuvimos sexo esa noche y yo salí embarazada.

Sentí que un balde de agua fría cayó sobre mi cabeza, entonces ella y Frack habían tenido algo más intimo espera un momento, ¿tiene una hija o hijo con él?

—El caso es que con lo sucedido yo me sentí más comprometida nuestra relación fue peor, él se volvió cada vez más cínico, estaba en un punto donde ya no podía ni verlo así que mantenía una distancia de él en espera a que cambiara. Hubo un evento importante en su familia pero me negué a ir y él se marchó solo mencionando que me arrepentiría de dejarlo ir sola, durante la noche recibí un mensaje de que fuese por el ya que se encontraba muy ebrio y que no podía volver solo a casa sin importar cuanto lo detestara en ese entonces seguía siendo el padre del bebé así que fui por él, llegué a un hotel donde lo encontré con alguien más cuando mi mirada se cruzó con la de él solo me enoje y le grite, sabía que no tenía por qué tolerar estas cosas pues podía criar al bebé por mi misma pero ese día durante nuestra discusión algo fue diferente, Frack realmente estaba muy ebrio así que estaba algo violento me empujó por las escaleras y yo perdí al bebé, fue un golpe realmente critico para mi así que ya no hay posibilidad de que yo quede embarazada, perdí muchas cosas ese día y bueno, cuando Frack recobro el conocimiento trato de recompensarlo pero... ¿Como se supone que personas algo como eso?

Entonces otra vez el silencio reino entre ambos no sabía que decir, no tenía palabras de consuelo sólo sabía que quería maldecir sin parar a Frack por todo lo que hizo pasar a Milene. Sentí como ella soltó mi mano para alejarse un poco se veía tan triste, ella se veía avergonzada por lo sucedido.

—Creo que lo mejor será que yo... —tome su mano para impedir que se marchará, ella giro a verme pero yo negué.

—Es algo difícil de procesar si te soy sincero pero aún asi no quiero que te vayas.

—No es justo para ti.

—La verdad no es algo que tú tienes que decidir.

—Benjamín.

—Milene, aun asi te quiero a mi lado.

—No está bien. Se lo importante que es para ustedes ser la primera vez de una mujer.

—Eso no me importa.

—No tienes por qué mentir. Yo solo...

—No es importante para mí, ¿que si fue el primero? No está aquí y yo si eso es lo que realmente importa.

—Ben...

—No me importa...

—Si estas conmigo jamas podrás formar una familia.

—Tu eres más que suficiente para mi, además no tendré que compartir tu atención con nadie.

—No Ben. Eres alguien tan lindo y tierno que no mereces algo así.

—¿Pero que se supone que no merezco? Lo que pasó en tu paso no te hace menos, fue doloroso para ti y puedo ver que aun lo es, quiero sanar esa herida en tu corazón.

—No quiero lastimarte.

—Me lastima mas el hecho de que no estés.

Ella me miró podía notar como las lágrimas caían sin parar me acerque para limpiar sus lágrimas con mis pulgares me acerque a ella para besarla.

—Vamos a casa.

—Pero...

—Se que eres terca pero yo lo soy mas, no importa cuanto patalees, digas que no o trates de negarte yo siempre voy a amarte y te voy a conquistar, esta vez no te dejaré ir.

Aquello la hizo sonreír levemente y yo tome su mano para besarla, durante todo el trayecto no solté su mano y ella no hizo el esfuerzo por soltarla. Ahora entendía que el camino sería difícil ella estaba herida así que no sería sencillo volver a abrir su corazón pero aún con ello no pensaba rendirme pues podía notar en su mirada que también albergaba en ella aquel sentimiento que yo tenía por ella.
Al llegar a casa salí del auto para ir hasta su asiento para cargarla entre mis brazos pues se había quedado dormida, la lleve hasta mi departamento para acostarla en mi cama con cuidado, me acerque a sus pies para quitar sus zapatos y dejarlos en el suelo, me levante para ir al otro lado de la cama para quitarme el traje, tenía mucho en que pensar, solté un largo suspiro para tumbarme en la cama gire para encontrarme con Milene le sonrei y me acerque más a ella para abrazarla.
Cerré los ojos por un momento pero los abrí al sentir sus manos sobre mi pecho.

—¿Me estas provocando? Porque de ser así solo te puedo decir que no hay marcha atrás —la escuche reír mientras sentía como se acercaba más a mi—. Lo voy a tomar como una gran provocación.

—¿Quien dice que no lo es?

Reí para tomarla de los brazos los cuales levante sobre su cabeza me coloque con ella con cuidado de no lastimarla para besarla.

—Sabes puede que ese idiota haya sido el primero pero soy yo quien te hace disfrutarlo y gemir con locura—aquello la hizo reír.

—Eres un imbecil.

—Y con mucha suerte—mencioné para volver a besarla.