Las vueltas de la vida

La reunión

Cuando me separé de Ricky, me dirigí hacia mi habitación ya que Manu me había dicho que nos veríamos en la sede de la productora. De camino al ascensor me puse en las peores situaciones. Quizá Manu solo quería hablar conmigo para decirme que las cosas debían calmarse y que no saliese ni publicase nada, lo normal. Quizá me diría que no pasa nada, o quizá que todo pasaba.
Mis nervios iban en aumento y la llamada en mi móvil no lo suavizaba.

-Mimi, cariño. He visto las noticias, ¿Qué coño has hecho?
- Mamá no te preocupes, fue una tontería.- le mentí ya que no me acordaba de nada.
- Míriam, ¿Una tontería? Los de seguridad del sitio ese os tuvieron de separar.

Mierda, las imágenes poco a poco iban volviendo a mi mente. La chica pelirroja había venido ya que me había reconocido, me pidió una foto y como me negué me empezó a insultar. Luego todo fue demasiado rápido: yo encarándome a ella; ella por su parte gritando; Ricky viniendo corriendo y yo zafándome de sus brazos y dándole una bofetada a la chica. No sé en qué momento vino la seguridad y unos flashes saltaron; Ricky me metió en un taxi y nos fuimos, el último recuerdo es el de esta mañana.

- Míriam, ¿Sigues ahí?- dice mi madre con la voz ya más calmada.
- Mamá no puedo hablar ahora, tengo una reunión con Manu, luego te llamo.- no quería seguir dándole vergüenza.
- Cariño, estoy preocupada por ti, quizá te vendría bien venir una temporada a verme.
- No sé mamá, tengo muchos compromisos. Te quiero, luego te llamo.

Mi madre me contestó resignada y yo seguí empaquetando las cosas. Me tomé un momento para respirar e intentar aclarar mi mente. No podía seguir así, pero tampoco podía dejarlo. No sé si se puede decir que tengo una adicción pero fácil no lo tengo. Así que aquí estoy, jugándome mi futuro por un problemilla de nada.
Darle más vueltas al asunto era una pérdida de tiempo así que acabé de preparar todo y llamé a recepción para pedir un taxi. No me atrevía a meterme en Twitter, el teléfono echaba humo. Decidí meterme y dar un repaso rápido, primer error. Internet estaba lleno de titulares, fotos y hasta un vídeo circulaba; las expeculaciones sobre mi futuro se seguían y el pánico invadía mi cuerpo. Dejé el teléfono a un lado, cogí mis cosas y bajé a la recepción del hotel.

Encaminé mi paso hacia el bar del hotel, haría tiempo mientras me tomaba una copa, sería necesario para afrontar la reunión de esta tarde.

- Señorita, su taxi ha llegado- me dijo el recepcionista cortando mi paso.
- Gracias.- dudé un momento en si dejar pasar ese taxi e ir al bar, necesitaba una copia. Finalmente decidí que me tenía que subir a ese taxi y no hacer esperar a Manu, ya me tomaría la copa luego.

Después de meditar todo el trayecto sobre que me podía encontrar allí, llego al gran edificio y un hombre abre mi puerta. Yo se lo agradezco y éste no me dice nada, parece que las malas caras me dan la bienvenida.
Subiendo en ascensor, una presión en el pecho se instala y mi respiración se entrecorta, estoy realmente asustada.
Llego finalmente al piso y nada más cruzar las puertas ya escucho jaleo en el despacho de Manu.

- Hola Rosa, ¿Qué tal va todo?¿Está Manu?- le pregunto temerosa a la recepcionista.
- Todo bien, gracias. Te preguntaría lo mismo pero ya me lo puedo imaginar.- ante esa contestación quiero bajar la cabeza pero decido mantenerme fuerte, nadie tendrá el privilegio de verme flaquear.- Manu está dentro, le digo que estás aquí y ahora te aviso.

Asiento con la cabeza y me siento en el sillón que hay. Los nervios van in crescendo pero tengo que controlarlos. Abro WhatsApp y le envío un mensaje a Ricky.

Mimi:
Madre mía voy a explotar.
Ahora voy a ver a Manu, espero que no esté muy enfadado.
Por cierto, ¿hacemos un cubata en mi casa? La marca esa me llamó para que les hiciese promo y tengo un montón de botellas.

Guardo el teléfono en el bolso, me saco las gafas de la cabeza y plegandolas van junto al móvil. Mi móvil vibra y unos mensajes de Ricky emergen en la pantalla.

Ricky:
Yo he hablado antes con él y no estaba contento, Mimi.
Pero bueno, eres mayorcita para aceptar las consecuencias.
Y a lo del cubata, prefiero café pero como quieras.
¿Nos vemos a las 5 en tu piso?

Cuando voy a contestar, Rosa me llama y me dice que puedo pasar. Realmente estoy muy nerviosa.

- Pasa Mimi, siéntate- me dice Manu de manera autoritaria.- ¿Qué vamos a hacer contigo? De verdad que no lo entiendo.- cuando intento hablar para disculparme, él me corta.- no, déjame hablar por favor. Te voy a ser sincero, no están contentos. No es la primera vez que creas estos escándalos y le estás costando a la productora mucho dinero. No sé qué hacer contigo, de verdad. Y me duele mucho, pero no les dejas otra opción que suspender la gira y las promociones.

Mierda, eso sí que no me lo esperaba. Una suspensión temporal sí, pero ¿la cancelación total de la gira? Ni de coña. Instintivamente me llevo las manos a la cabeza, no me creo lo que está pasando. Quiero huir. Quiero meterme dentro de la cama y no salir nunca. Estoy en shock y Manu se ha dado cuenta.

- Mimi, te lo hemos dicho muchas veces, Ricky también ha hablado contigo y tú siempre vas a un plus. Te crees que como ganas dinero nunca te va a pasar nada o no va a haber consecuencia, pero sí, me sabe mal porque tienes mucho talento, pero los malos hábitos pasan factura.

Ese último comentario hace que algo se encienda dentro de mí: rabia.

- ¿Perdona? Sois unos exagerados, no sé cómo podéis hacerme esto ¡Con todo el dinero que os he dado! De verdad que no lo entiendo, es un fallo de nada, todo el mundo los comete.- cada vez estaba hablando más rápido y más alterada.
- ¿Una vez? ¿Te tengo que recordar la noche en Londres o en Madrid hace un mes? Esto no es cosa de una vez. Te aconsejamos y pasas de todo. Las cosas no van así y antes de que les cuestes más dinero, prefieren  desvincularse de ti por un tiempo.

Ahí está la verdad, no quieren trabajar conmigo porque disfruto de la vida. Es cierto que a veces me paso un poco pero vamos a ver, tengo 25 años, tengo toda la vida por delante.

- Mira, te voy a dar el último consejo y en calidad de amigo, no de manager. Retírate una temporada, la productora va a decir que la gira se cancela por problemas de salud, haz lo mismo, cuídate; apartate de las malas cosas, Mimi. No te merces todo esto con el talento que tienes pero tú eres la que tiene que cambiarlo.- tiene toda la razón del mundo y sabe que lo sé. Agacho mi cabeza por primera vez y me resigno. No hablo porque no quiero perder mi orgullo pero sí agacho la mirada.- Ve a ver a tu madre, Mimi, te echa de menos y sé que tú a ella también. Te hará bien. Yo me ocuparé del tema del papeleo y de las cuentas. Tú retírate un tiempo y disfruta, pero sanamente.

¿Qué estoy haciendo con mi vida? En un día he perdido el contrato de mi vida. Decido despedirme ya de Manu y volver hacia mi piso. Él se despide con un abrazo y yo me dejo abrazar, lo necesito.
Pido un taxi, me subo y cuando llego a mi piso, unas botellas de Ginebra me dan la bienvenida. Sé que tengo que dejarlo pero hoy no va a ser el día. Hoy necesito desaparecer.

Otro más, espero que os esté gustando. Si tenéis alguna sugerencia o algo podéis dejar algún comentario. Gracias por seguir leyéndolo 🤘