POV Isaac
Quité poco a poco su camisa, besando su piel desnuda y recorriendo su espalda con mis manos.
Yo estaba sentado en la cama, y Jeremías se sentó encima mía rodeando mi cadera con sus piernas. Tenía su torso a mi disposición, y todo el dolor que tenía de las heridas, fue desapareciendo poco a poco conforme avanzaba la noche.
Cuando le conocí, no me hubiera imaginado que llegaría hasta este punto con él, enamorándome desesperadamente y a punto de hacerle mío.
Miré a Jeremías esperando su aprobación, y este asintió mirándome a los ojos. Una felicidad impresionante invadió mi pecho, y quise estrujarle entre mis brazos hasta morirme. Un leve sonrojo tintó sus mejillas cuando me quité la camisa yo, y ladeé el cuello indicándole que lo besara. Necesitaba de sus labios en mi piel, de cualquier roce que me pudiera proporcionar o yo a él.
Comenzó a dejar leves besos por todo mi cuello, lamidas y varias mordidas, haciéndome jadear. Sentir su aliento en mi piel hacía que me estremeciera, y yo solo quería más y más.
Empujé a Jeremías haciendo que cayera de espaldas en la cama, y me dedicó una sonrisa que hizo que mis latidos se pararán por un segundo.
Fui quitándome el pantalón delante suya, ante su atenta mirada. Recorrió mi cuerpo entero con sus ojos, y cuando me deshice de todas mis prendas, Jeremías lucia como un completo semáforo. Comencé a quitar sus prendas también, dejándole totalmente desnudo, y está vez fui yo quien recorrió su cuerpo con la mirada. Quisiera grabar cada tramo de su cuerpo en mi memoria, cada roce, cada cicatriz. Todo en él es hermoso, y me siento la persona más afortunada de la tierra. Ya no puedo controlarme.
Me acerqué a él y junté nuestros torsos, sintiendo sus acelerados latidos de su corazón y su respiración entrecortada.
- Dime si quieres que pare, no voy a hacer nada en contra tuya -susurré-
- No pares ni aun que te lo pida, Isaac.
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POV Jeremías
Pareció sorprenderle mi comentario, ya que me miró bastante sorprendido y sonrojado. Pero más me sorprendí yo después.
- Mi madre duerme en la habitación de al lado, no podemos hacer ruido -seguíamos con los susurros-
Mierda, no me acordaba de su madre, pero no quiero parar ahora. A demás, tratar de hacerlo sin hacer ruido hacía el momento aún más excitante.
Me acerqué a sus labios y hundí los míos en ellos, besándole con todo el cariño que pude. Acaricié su cabello, entrelazando sus mechones con mis dedos, y creo que nunca en mi vida había sentido tanto amor como el que me transmitió su mirada.
Recorrió mi cuerpo lentamente con sus manos, apretando levemente mis muslos y yo jadeé. Isaac se acercó a mi oído y mordió mi lóbulo.
-Llevo esperando demasiado tiempo, Jeremías, y quiero hacer las cosas bien. Quiero tener citas, conocerte mejor, besarte todos los días de mi vida. Me he enamorado de ti como un idiota, más de lo que nunca hubiera imaginado y eso me aterra.
-I-Isaac...
No me salían las palabras. Quería decirle que yo también estaba enamorado de él, que no era el único al que le aterraba, pero no podía hablar.
-Quiero hacerte el amor, Jeremías.
¿Lo oyen? ¿No? Es mi corazón que se ha parado. El nudo en mi garganta desapareció, y sentía que quería gritarle que le amaba a los cuatro vientos.
- Joder, te amo -susurré- yo también quiero hacer las cosas bien y te quiero como nunca he querido a nadie.
No hicieron falta más palabras para que sus labios estuvieran de nuevo junto a los míos, con nuestras lenguas entrelazadas y una sonrisa estúpida por mi parte.
Isaac llevó uno de sus dedos a mi entrada, entrando en mi poco a poco. Intenté no quejarme de dolor, a si que me agarré a las sabanas con fuerza e Isaac intensificó el beso para evitar que pensara en eso. Cuando tuve 3 de sus dedos en mí, ya estaba completamente acostumbrado.
-¿Vas bien? -preguntó, con la voz ronca y susurrando de nuevo-
Asentí.
-P-pero te quiero a ti -gemí
Sus ojos se oscurecieron ante el comentario, pero era cierto. Le necesitaba a él, unir nuestros cuerpos de una vez por todas.
Sacó sus dedos de mi interior y acercó su miembro a mi entrada. Llevó una de sus manos a mi boca, para evitar que soltara gemidos o me quejara, y juntó su frente con la mía. Fue entrando en mi interior, sin dejar de mirarme a los ojos. Un dolor agudo recorrió toda mi espalda baja, pero gracias a la mano de Isaac no se escuchó nada.
Cuando le indiqué que ya podía moverse, comenzó con embestidas lentas y pausadas, y yo comencé a acariciar su espalda con mis manos. Cada milímetro de su piel era una obra de arte sola para mí, y quería recorrerla toda. El me había entregado su amor y su cuerpo, y tenerle entre mis brazos en esta situación parecía ajeno a la realidad.
Aceleró poco a poco sus movimientos, gimiendo levemente en mi odio y rozando su cuerpo contra el mío.
De un momento a otro, Isaac tocó un punto en mi interior que me hizo gemir tanto que ni la mano lo pudo acallar.-Jeremías, por favor... ngh-
Retiró su mano levemente babeada de mi boca y gruñó en mi cuello. Él y yo comenzamos a gemir un poco más fuerte, sin poder controlarnos.
Isaac seguía dando en ese punto en mi interior, y me puse a gemir su nombre inconscientemente, junto con la sinfonía perfecta que formaban nuestros cuerpos al chocarse.
Rodeé su cadera con mis piernas para juntar aún más nuestros cuerpos y hacer las penetraciones más profundas. Isaac acarició mi rostro mirándome con ternura, y fue en ese momento en el que me di cuenta de que estaba llorando de placer.
¿Eso es posible?
No aparté mi mirada de la suya, y seguimos en la misma posición durante un par de minutos más, hasta que me vine en mi pecho e Isaac se vino en mi interior. Puedo jurar que ha sido el mayor orgasmo que he tenido en mi vida, pero Isaac tuvo que acallar nuestros gemidos con un beso.
Limpió mis lágrimas con sus labios, salió de mi interior y se dejó caer a mi lado. Ambos teníamos los cuerpos sudados y la respiración entrecortada. Me limpié el pecho con una de las camisas del suelo y me giré hacia el peliblanco.
Nos metimos bajo las sabanas y rodeó mi cuerpo con sus brazos, acariciando mi espalda y dándome pequeños besos por toda la cara. Sonreí ampliamente y le besé, como nunca antes había besado a nadie.
- Te quiero, Isaac. Te quiero muchísimo.
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ALUUUU
ElDoritoIlluminaty no sé si es lo que esperabas pero yo lo he intentado xdxd te lo dedico a ti 😂❤
Bueeee 29 capítulos y por fin estos dos han tenido su primera vez xdxdxd
Ay como crecen mis bebos :v
Les ha gustado el capitulo?
Y les va gustando la historia?
Que sepan que los reamo a todos xd❤❤
-Poku
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FIGHTER (yaoi/gay/bl)
RomanceJeremías, me demostraste que te puedes enamorar de quien casi te rompe la nariz, así como de demostrar todo el cariño que tenías guardado. Marco, me demostraste que ser sincero contigo mismo y demostrar tus sentimientos es la mejor opción, uke rebe...