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Haeun se apresuró a sostener a su hijo, le dio una mirada rápida a Hoseok después de oírlo. Pensó rápido, pese al temblor en sus propias piernas.

—Necesito que me digas la razón por la que mi hijo está así —pidió con toda la calma que pudo reunir. Los ojos de Taehyung se encontraron con los suyos y suspiró—: ¿A dónde debemos ir?

—Señora...

—¿A dónde debemos ir? —ella volvió a preguntar, sostuvo al castaño para ayudarlo a sentarse en la silla correctamente y rápidamente tomó sus cosas—. ¿Entonces?

—Jungkook está corriendo en una competición clandestina, mamá —Taehyung habló, fuera de sí, observó a Haeun, a su rostro en pánico como él mismo debía estar porque sabía que había una historia detrás, la del hyung de Jeon—. Él está pagando el tratamiento.

Ella retuvo el aire, eso explicaba muchas cosas. Recordó a Minjae actuando extraño y el pecho le dolió, instintivamente vio a su hijo y no pudo imaginar lo que él estaría sintiendo.

Se obligó a mantenerse con la cabeza fría.

—¿Crees que debamos llevar a la policía para que vayan también? —Haeun preguntó buscando su teléfono, recuperándose con dificultad para ayudar—, esa gente puede ser peligrosa, deberíamos...

—¿Se llevarán a Jungkook? —Taehyung cuestionó enseguida. Ignoró el nudo en su garganta, las miles de imágenes que ya se formaban en su cabeza si algo llegaba a salir mal. Se volteó a Hoseok y siguió con su voz cargada de ansiedad—: Es decir, él es un competidor, obviamente es ilegal y... —Eso no tenía que ser prioridad ahora—. Bien, sí. Eso está bien.

El capitán se pasó las manos por el cabello y le dio los datos a la mamá de Taehyung para que realice la llamada. Se dio vuelta al castaño de nuevo al verlo dirigiéndose a la puerta.

—¿Taehyung?

—Vamos por él también —murmuró con la voz entrecortada, miró de reojo a Hoseok y lo apuró—: necesitará alguien que pague la fianza, ya sabes por ser idiota y querer ser un héroe.

Pese al enojo palpable en el tono de voz del castaño, Hoseok pudo percibir la clara preocupación, la tristeza quizás. Y cuando Taehyung levantó la cabeza y mostró sus ojos llenos de lágrimas, lo confirmó.

—Sí —respondió apresurándose a la salida—. bien.

—Hijo...

—No te preocupes, mamá. —Taehyung medio sonrió, sintió a Jung detrás para ayudarlo a mover su silla—. Estaré bien, apenas sepa algo te avisaré.

Haeun ahogó un suspiro. Sabía que nada de lo que dijera iba a hacer que su hijo desistiera, entonces asintió tirando una mirada aguda a Hoseok, a quien se limitó a inclinarse a modo de despedida evitando el contacto visual. Y es que, se sentía algo culpable por no haber detenido a Jeon antes, o al menos poder ser más inteligente y hacer algo más.

Maldita sea. ¿En qué se había metido?

—Ahora... —Taehyung se abrochó el cinturón de seguridad, tragó saliva y murmuró—: Por favor, llévame ahí.

—De verdad, siento esto.

—¿Sí? —asintió, sus ojos todavía estaban nublados por el miedo de lo que podría suceder con Jeon—. No importa ahora, solo llévame ahí. ¿Sí? Necesito asegurarme de que Jungkook esté bien.

Taehyung miró a la ventana, un hueco en el estómago que cada vez se hacía más grande. Pensó en Minjae, pensó en Jungkook y luego pensó en sí mismo.

More than friends. [Kookv]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora