Camila y Andrea no se habían movido ningún centímetro desde la sala de espera y permanecían sentadas en aquellos sillones con ambas niñas dormidas entre sus brazos. Lauren detalló a la distancia el cansado rostro de su novia justo antes de volver la mirada hasta Fernando quien yacía dormido sobre su cama de hospital. Aunque si bien Bradley le había advertido que debía mantenerse al margen por el lazo que ellos habían formado, la morena le había suplicado que permaneciera lo más cerca posible de su abuelo y así le mantuviese informada acerca de todo lo que pasara con el ex sargento de la U.S Army. Había estado a punto de confesar la verdad a la castaña pero no la oportunidad de había esfumado en un abrir y cerrar de ojos gracias al mal estado de salud de Fernando.
-¿Cómo sigue?.- Matt llegó junto a ella y echó un vistazo al hombre al interior de la habitación.
-Le han dormido para calmar los dolores pero Smith asegura que está en su etapa final.- Lauren hizo una mueca.
-¿Se lo dirás?.- Ésta vez el pelinegro dirigió su mirada a Camila quien se mantenía junto a su abuela abrazándola por los hombros.
-¿Cómo lo hago sin que le duela mi mentira?
-Fernando te lo pidió. No es sólo tu culpa habérselo ocultado.
Aunque Matthew tenía razón, la sargento no podía evitar sentirse culpable al ver a su novia en aquel estado y también temía de lo que pudiese ocurrir en cuanto se enterase.
-Dinah y yo cuidaremos de las niñas esta noche, vine para llevármelas a casa.- Comentó el cirujano- Habla con ella.- La ojiverde asintió.
Dando una última mirada a su amigo quien se acercaba a Camila para hablar con ella, tomó el expediente del abuelo de la morena y se adentró en la habitación para monitorearlo y asegúrese de que todo estuviese en el mejor estado posible.
-¿Ellas están sufriendo?.- Escuchó la débil voz de Fernando dirigirse hacia ella luego de algunos minutos.
-Sólo no quieren perderlo.- Lo tranquilizó la cirujana.
-Estoy dudando si ocultarlo ha sido la mejor decisión.- Una tos convulsiva interrumpió el hablar del hombre y Lauren se acercó para ayudarlo a incorporarse un poco- Mis ojos están pesados. Estoy cansado pero no hay dolor.
-Y no lo habrá. Lo prometo.
-No tienes que decírselo.- Ambos se miraron fijamente porque sabía a que se refería él con esas palabras.
-Siento que debo hacerlo.- Dijo Lauren pasando una mano por su rostro.
-Lamentó haberte metido en éste lío.- Los ojos de Fernando apenas se mantenían abiertos.
-Tranquiló. Será mejor que continúe descansando.
Todo eso estaba fuera de su control y eso no le agradaba.
...
-¿Mala noche?.- Natasha se acercaba por el pasillo en donde la ojiverde bebía un café recargada contra la pared para mantenerse despierta.
-Necesito dejar de pensar en dormir.- Había enviado a Camila a casa junto a su abuela hace un par de horas para que pudiesen descansar, Ana dale había ayudado a convencerlas.
-Me enteré de que el abuelo de tu novia está aquí, ya sabes.- Lauren asintió mirando el oscuro líquido al interior de la taza.
-Se negó a tomar las quimioterapias y ahora creo que su cuerpo a dejado de luchar al no recibir ayuda.
-¿Por qué le permitieron negarse al tratamiento? Es prácticamente homicidio.- Murmuró la cirujana con confusión mientras observaba el rostro de la pelinegra contraerse en una mueca.
