Capítulo 9

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Bajamos de la Van, ya eran casi las seis, mi padre me regañaria si no llego a la cena.

-Gracias mi amor-le di un beso a fiorella en la mejilla.

-De nada novia mia!,nos vemos mañana en la universidad-asenti diciendo adiós con la mano.

-¿te quedas a cenar franco?-.

-Si no hay problema, si-.

-Iré a dentro...mi padre me acaba de llamar-nos dijo sin mirarnos y entro, creo que sigue molesto por lo de la tienda, pero es peor lo que hizo el.

-Se porque me besaste-miro al suelo-No tienes porque disculparte-volvió los ojos en mí, sonrió triste.

-No te preocupes, tarde o temprano lo haría-mire sus labios, quería sentirlos de nuevo en los míos-Aunque si no hubiera sido por..-no termine de hablar, sus labios ya estaban en los míos, se sentía tan bien, eran un dulcería, se que se oye muy extraño, así los sentía yo. Nos separamos, sus ojos tenían un brillo muy singular,¿felicidad?, ¿Locura?, ¿Lujuria?, no se lo que era pero me gustaba.

-Entremos, porque mi padre se preocupara-tome su mano para ir hacia la puerta.

Voltee hacia la sala y al comedor, no había rastro de mi padre y gil, oí unas voces que provenían de el minibar, ahí se encontraban.

Mi padre se veía cansado, frustrado, como cuando mamá empezaba con una crisis, regresé donde estaba franco.

-Ve a mi cuarto- el me miro confuso-Necesito platicar con mi padre- él asintió poco convencido-¿Sabes donde esta mi cuarto?-asintió nuevamente y subió las escaleras.

Me acerque con cuidado para que no me escucharan ni descubrieran.

NARRADOR

Sarah llegó a un lugar donde no la podían descubrir y donde podía escuchar claramente lo que hablaban.

Al primero que escucho hablar fue a su padre Zeus, que tenía una voz cansada.

-No se como se lo contaré, no quiero que se angustie-tomo un vaso con agua que estaba cerca de èl y sorbió un poco-Sabía que en algún momento mi enfermedad se haría más fuerte,pero ¿porque ahora?-la voz de aquel hombre era cada vez más débil, sus ojos verdiazules se llenaban de lágrimas, recordando a su hija, y cuanto le afectaría la noticia.

-Hermano ella lo sabrá en algún momento por alguien, es mejor que se entere por ti, que por alguien más-le aconsejo el hombre que por tantos años lo a ayudado, lo consideraba un hermano para èl.

-Se que no será fácil para Sarah, sin embargo es cierto lo que dices, puede que esta misma noche le diga-con todo el dolor de su alma, tendría que darle la noticia a su hija, que dentro de poco ya no estaría más a su lado.

Sarah escondida lloraba desconsolada, cada lágrima que derramaba tenían dolor, tristeza y angustia. Sarah no quería que el único ser que más amaba en esta tierra, se fuera como su madre para nunca más volver.

Corrió a su cuarto sin importar que alguno de los dos hombres la viera, simplemente quería llorar y golpear cosas, no recordaba que en aquel cuarto se encontraba franco, el chico que beso en la tienda y hace unos minutos en su jardín.

Franco al verla se quedo estático sus únicas palabras fueron...

-¿Que...qué ocurre?-le pregunto con evidente miedo y preocupación, para él era desconocido verla en ese estado, antes de que pudiera tomarla en sus brazos, Sarah se desvaneció, los nervios de Franco aumentaron más, salió dirigiéndose al cuarto de huéspedes, donde en ese mismo momento se encontraba su mejor amigo Lester hablando por teléfono, el cual verlo entrar alterado colgó, se levantó de su cama y preguntó.

Me Casare Con El Nerd [Actualizaciones Lentas]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora