DÉJAME QUERERTE

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DÉJAME QUERERTE

Los días pasaron tan largos y tensos, las frágiles vidas de las enamoradas pendían de una intervención divina, la fiel autora buscaba una forma de unir lo que se aleja, eso era el tiempo.

Pasaron unas semanas más, Agosto casi estaba en su último suspiro dejando cuotas y estragos de la lluvia en National City.

Ese día las sirenas de National City sonaron a causa de una depresión tropical. La DEO, los bomberos, la estación de policía ayudaron a la ciudad mantenerse en orden entre tanto caos provocado por el enorme diluvio. El día de la tormenta todo mundo le pidió a la joven agente Danvers que se mantuviera en casa pero ella se negó alegando que tenía que hacer su trabajo, todo iba bien pero algunos jóvenes cercanos a la bahía jugaban con su propia seguridad. Tomo rumbo al grupo de insolentes jóvenes y los hizo entrar en razón, no dudaba que la juventud solía ser un puñado de malas decisiones.

El viento hacia chocar el cableado y algunas cosas comenzaron a volar sin ningún rumbo, Alex busco un refugio pero no eran los mejores lugares para semejante tormenta, trato de correr pero algo hacia pesar sus piernas, estaba en problemas y en unos muy graves.

No muy lejos de ahí, Sam hablaba por teléfono con Lena que acompañaba a una mortificada Kara, lo poco que sabía era que Alex no había vuelto con su escuadrón, todo pintaba muy mal, Sam aunque le doliera el saber de Alex, no podía negar el amor que sentía por Alex y la preocupación que tenia. 

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(6:10 p.m)

Lena: Quiere ir por su hermana... Pero Alex es una insensata

Sam: ¿Aun no llega? –Pregunto un poco mortificada- creo ya debió haberlo hecho.

(Un te quiero sin voz)

Lena: No, no te preocupes Alex siempre encuentra el camino, dile a mi sobrina bella que le mando besos y abrazos.

Sam: Adios

Lena: Cuídate S.

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-Rubs –su hija dentro de sus sabanas- tengo que salir, iré por Alex.

-Mamá...Cuídala que es algo tonta y terca, puede ser algo temeraria pero la quiero mucho Má.

-Yo también cariño –beso la frente de su pequeña con mucho amor- no salgas, se valiente hija mía.

-Lo prometo mamá.

-Volveré cariño.

"Es una inconsciente, no sabe que tiene una familia a la que debe volver, ¿Por qué se condena? RAO ¿Por qué quiero a una persona tan irresponsable?"-el viento golpeo los fríos pensamientos-"ahí esta"

-ALEX –grito por encima del sonido del viento que chiflaba como un demonio agonizante.

-¿SAM? –Pregunto- ¿Qué haces aquí?

La tomo por los brazos con todo y protestas, el frágil cuerpo de Alex temblaba pegado a su cuerpo mientras volaban a su departamento, podía escuchar el ligero temblor de la quijada de Alex, llegaron en minutos.

(Bésame otra vez, te quiero consentir)

-Mamá, Alex –dijo Ruby al ver lo empapadas que estaban pero se centró en Alex- mamá necesita atención médica.

CRÓNICAS DEL AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora