10* Maratón 5/6

110 8 3
                                    

Terminé de vestirme. Me puse colonia, y un poco de sera para el cabello, arreglandolo hacia un lado. Me acomodé el moño y el cuello de la camisa por millonésima vez, respiré hondo, y caminé hacia la salida de mi habitación.

Al abrir la puerta, _______ y Juli corrieron hacia mi.

-Wow -exclamó Juli -te ves muy bien hermanito, seguro que Alison cae rendida ante ti.

-Si la cita fuera conmigo -opinó _______- acabaría muy enamorada de ti.

Algo llameó dentro de mi, aunque no lo haya dicho en serio, algo dentro de mi se había encendido con sus palabras.

Ambas me abrazaron, y me guiaron hasta el coche de mi papá, él también estuvo de acuerdo en esto, por lo visto, todos planeaban algo especial para Alison y para mi.
Juli me dio una dirección, me dijo que subiera hasta la azotea por el elevador, y allí estaría la sorpresa.
Mi mamá no podía estar presente en este momento, ella trabajaba de enfermera en un hospital, y a veces tenía tanto trabajo, que sólo llegaba a dormir. Y mi papá también tenía trabajo hasta tarde en algunas ocasiones, razón por la que tampoco estuvo ese día.

Avancé en el coche, bastante nervioso por lo que pudiera suceder. Los tirantes me estaban cortando la circulación, o tal vez solo fuera idea mía.

Detuve el coche fuera de la casa de Alison, tomé algunas respiraciones, y me bajé. Me acerqué a la puerta, y llamé al timbre, rogando porque abriera ella. Pero en cambio, abrió una niña más pequeña, es la niña con la que estaba Alison en la pista de patinaje.

-Hola.

Dijo la niña con una sonrisa.

-Hola, ¿está Alison?

-Si, no tarda en bajar, ¿quieres pasar?

El corazón me comenzó a latir con fuerza. ¿Pasar? No esperaba que me lo propusieran, y menos una niña. Tal vez a los papás de Alison no les agradara la idea.

-Ammm... -Pensé durante algunos segundos -creo que es mejor esperar aquí.

Dije al fin, la niña sonrió de nuevo.

-Pasa, Ali me dijo que te hiciera pasar cuando llegaras.

Respiré hondo de nuevo. Tomando un poco de valentía para entrar a su casa.

La casa era muy linda y amplia por dentro.
Con muebles y cuadros modernos.
Me senté en la sala con la niña, ella me miraba con una sonrisa en su rostro, yo estaba bastante nervioso. Pensé que en cualquier momento iban a salir sus papás, y que tal vez el papá de Alison me amenazara o algo por el estilo, pero eso no sucedió. Alison bajó las escaleras, dejándome con la boca abierta.

Llevaba un vestido rojo, lo cual me hizo pensar que tal vez mi hermana y _______ habían tenido algo que ver para que combinara con mi moño. Era un vestido largo, ajustado de las caderas para arriba, y suelto de abajo. Tenía brillos dorados que adornaban de la cintura hasta los pechos, y tenía unos tirantes. Llevaba el cabello negro ondulado, le caía por los hombros, un maquillaje no muy llamativo pero perfecto para la ocasión. Se veía hermosa, era lo único que podía pensar en ese momento.

Me levanté del sofá, y caminé hasta el pie de la escalera, esperando a por ella. Parecía una princesa, bajando con una hermosa sonrisa y con tanta delicadeza, que te daban ganas de tomarla de la mano y ayudarla a bajar, para que no fuera a dañarse nada de su frágil cuerpo. Por un momento, logré olvidarme de ________, no pensaba en nada, ni en nadie más, que no fuera la chica que tenía en frente.

-Hola.

Dijo llegando abajo, parándose a mi lado.

-Ho...hola -dije tartamudeando -te ves hermosa.

Las Cosas Que Siempre Quise Decirte *Sebas Urdiales*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora