Gracias al Hacedor

Capítulo 2: La Inquisición

POV Shana

Aún no me lo creo. La Inquisición...había oído hablar de ella aunque solo lo tenía como un cuento para asustar a los niños pequeños pero, según me han confirmado, existió de verdad. Si tan solo lo pudiera compartir con Rouse, a ella le encantan estas historias. Por lo visto, fui capaz de estabilizar la Brecha - por lo que mi marca también se mantiene estable - pero no la cerré por completo, asi que toca trabajar duro para conseguirlo. En fin...hora de conocer a mis nuevos compañeros.

-¿Shana? ¿Te duele? - preguntó Cassandra con la mirada preocupada al observar como me quedaba mirando a la marca en mi mano

-No, tranquila, solo resulta algo...irritante para mi por no saber su origen ni nada de eso, pero no duele en lo absoluto - mentí.

-Ven. Debo presentarte al resto - dijo abriendo la puerta para que pudiéramos entrar - Ya conoces al comandante Cullen, líder de las fuerzas de la Inquisición

-Solo durante un instante en el campo de batalla. Me alegro de que hayas sobrevivido

-Esta es Lady Josephine Montilyet, nuestra embajadora y diplomática jefe

-Andaran atish'an. Milady, me han hablado mucho de vos. Es un placer conoceros al fin - respondió con una reverencia.

-Hablas élfico - contesté sorprendida.

-Me temo que acabáis de oír todo mi repertorio

-Y, por supuesto - siguió Cassandra - ya conoces a la hermana Leliana

-Mi puesto aquí supone cierto grado de...

-Es nuestra maestra espía - soltó Cassandra

-Si. Tan delicada como siempre, Cassandra

-Es una buena colección de títulos - admití

-Mencioné que tu marca requiere más poder para cerrar la Brecha de una vez por todas

Y a partir de aquí unos discutieron con otros sobre si debíamos recurrir a los magos rebeldes o a los templarios. Leliana y Cassandra votaban por los magos mientras que Cullen - como extemplario que era - estaba a favor de los templarios. Por otro lado, Josephine dejaba de lado las discusiones hasta que tuviéramos suficiente influencia como para que los líderes de ambos bandos accedieran a tener un encuentro personal con nosotros...conmigo, para ser más exacta. Esto solo anunciaba problemas

Por si fuera poco, la Capilla nos había denunciado...a mí, para ser exacta de nuevo

-Que prisa se han dado, apenas han perdido el tiempo - comenté

-¿No deberían estar ocupados decidiendo quién será la próxima Divina? - preguntó Cullen

-Algunos dicen que vos, siendo maga, sois la "Heraldo de Andraste". Eso asusta a la Capilla. Las demás sacerdotisas lo tildaron de blasfemia, y a nosotros de herejes por acogeros. Además, el no saber de donde provenís empeora aún más la situación. Luego, si no os importa, tendremos una charla en mi habitación para aclarar ese asunto.

-Es obra del Canciller Roderick, sin duda

-Limita nuestras opciones. De momento, recurrir a los magos o a los templarios en busca de ayuda es inviable

Mi cara debía ser un poema, a juzgar por como el Comandante se estaba aguantando la risa

-¿Qué soy qué? ¿La qué de quién? ¿Perdón?

-La Heraldo de Andraste, milady. Vinisteis como nuestra única esperanza de cerrar la Brecha y los que vieron a la mujer en el templo pensaron que era la propia Andraste velando por vos. Aunque intentásemos detener las habladurías - lo cual no hemos hecho - seguiríais en boca de todos