Capítulo 3

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[¡Hola mis queridos lectores!, como sabrán estoy tratando de seguir publicando capítulos en las dos historias, pero por cuestiones de tiempo se me está complicando.]

[En "Llegaste tú" suelo publicar textos muy largos que debo releer varias veces antes de publicar. Así que he decido que en esta historia los capítulos serán un poco más cortos aprovechando que recién está comenzando.]

[Pero no se preocupen que a medida de que avance, los mismos serán más largos y complejos...]

[PD: Tengan compasión de mis errores ortográficos... jejeje]

[Bueno ahora sí, a leer...]



- Así... que tendré un nuevo compañero... "Que interesante"



***



[Las cosas parecían marchar bien pues la institución de la cual Wayo comenzaba a formar parte parecía muy diferente a la anterior.]

[Como su permanencia dependía de una beca, decidió poner todo de su parte para dejar una buena impresión. El personal del establecimiento le explicó a grandes rasgos como era el funcionamiento allí y las consecuencias que traería no acatar las reglas.]

[Después de aquello, se retiró del lugar no sin antes despedirse de las personas que tan amablemente lo atendieron. Acompañado de Ming se dirigieron a la zona céntrica de la ciudad pues debía comprar un uniforme nuevo. He aquí el gran dilema, Wayo no tenía dinero suficiente para hacer semejante compra y se negaba aceptar la ayuda de su amigo.]



- Ya te dije que no necesito tu dinero

- Acéptalo, no seas orgulloso

- No es orgullo, simplemente no me gusta deberle dinero a nadie, menos a un amigo

- ¿Y quién te dice que me lo tienes que devolver?


- Ahora menos lo voy aceptar, regalado ni muerto

- Entonces dime ¿Cómo piensas asistir?, date cuenta que es un instituto privado, no puedes presentarte con cualquier cosa.

- Pues les explicaré mi situación, al fin y al cabo soy becado... deberían ellos brindarme el uniforme.


- ¿Tu crees que a esa gente le importa si no tienes dinero? Por si no te diste cuenta, ellos no hacen beneficencia

- Ya sé, ni que fuera idiota para no darme cuenta... pero deberían ser más considerados aunque sea conmigo.

- Bueno, perdón pero es que tú me sacas de mis casillas, es que todo sería más fácil si dijeras: ¡"SÍ, ACEPTO"!

- ¡Baja la voz!... cualquiera que te escuche pensara que me estás haciendo una propuesta de matrimonio


- ¿Propuesta de qué?... jajajaja... aunque podría ser, ¿No crees que haríamos una linda pareja?

- ¡Que tonto eres!

- Serias como mi esposa, no estaría nada mal

- ¡¿Por qué la esposa?!... En todo caso sería el esposo

"Mi Sol, Mi Perdición" (2 MOONS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora