Yoongi's Senses 『🌸』 sin

０１： ａｎｇｌｅｓ ｔｏ ｂｅ ｄｅｆｉｎｅｄ

ーTus nuevos lentes se ven bien Yoongi, te hacen lucir más guapo pero no más que yo.

　A los 14 empiezas a querer experimentar con tu cuerpo; Seokjin con 16 seguía siendo un despistado.

ーMi papá dijo que debía usarlos para que el Sol no lastimara mis ojos. No me gustan, lastiman mi nariz.

ーEs solo porque no estás acostumbrado, cuando eso pase hasta habrán veces que te olvidarás de que los tienes puestos y dormirás con ellos.

ー ¿Lo dices por experiencia previa?

ーAyer rompí mis lentes por quinta vez, mi papá dijo que ya no compraría más lentes y que debo acostumbrarme a usar los de contacto, pero molestan demasiado.

　Y no es que Seokjin se estuviese quejando, pero esa misma mañana al intentar ponérselos por sí mismo casi se quita un ojo. Tuvo que ir como cachorrito lastimado a rogarle a su madre para que lo ayudase.

ーPuedo... ¿Puedo sentir tu rostro? ーpreguntó Yoongi con la cabeza gacha. Con sus cortos catorce años Seokjin lo seguía viendo como un bebé que necesitaba proteger y no por su discapacidad, porque tenía la actitud suficiente para herir el ego de más de uno, sino por su físico que no cambiaba en nada al de cuando lo había conocido; tan frágil.

　No podía negarle ninguna de sus peticiones y mucho menos esa que repetía cada mes sin falta, era común para Seokjin que Yoongi le pidiese tocar su rostro pues creía que era para grabarlo mentalmente al menos por el tacto.

ーEstá bien, sin los lentes será mucho más sencillo ーy es que el niño siempre pedía que no cambiara su aspecto antes de realizar el acto, le gustaba que fuese más natural, como la vez en que le salió un grano a Seokjin en medio de la frente y Yoongi no paró de quejarse hasta que lo tocó. Algo raro, pero para Jin era la cosa más tierna del mundo.

　Entonces, Seokjin se dio el lujo de cerrar sus ojos al sentir las frías manos de Yoongi recorrer su cara sin prisas, memorizando cada poro de su piel, cada curva y los ángulos de su mentón. El puente de su nariz, entre sus cejas, las largas pestañas que enmarcaban sus ojos, el contorno de sus orejas. Yoongi no se perdía centímetro sin tocar, pero nunca más allá del mentón. Sintió que el niño estaba satisfecho con su escrutinio cuando los delgados dedos de Yoongi se movieron hasta sus labios y delinearon el contorno con parsimonia, era la segunda vez que Yoongi palpaba allí desde la primera vez que se lo pidió.

　Al finalizar, Yoongi asintió satisfecho con una pequeña sonrisa.

ー ¿Sigo siendo guapo como el mes anterior? ーpreguntó Seokjin con burla, él ya sabía que seguía guapo pero le encantaba oír a Yoongi reafirmarlo.

ーTe salió un grano al lado del labio, del lado derecho.

　Seokjin iba a matar a un chico apellidado Min y de nombre Yoongi.

ー ¡Más te vale que sea una broma! ーgritó corriendo hasta el baño de su casa dejando a Yoongi solo en la sala.

　Solo y sonrojado.

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