𝐇𝐞𝐫𝐦𝐨𝐬𝐨 𝐏𝐞𝐪𝐮𝐞𝐧̃𝐨 𝐌𝐨𝐧𝐬𝐭𝐫𝐮𝐨 [ᴋʏᴜɴɢsᴏᴏ-ʜᴀʀᴇᴍ | ᴏᴍᴇɢᴀᴠᴇʀsᴇ]

001. primer día

¿Cuántas veces había arreglado ya su cabello, acomodado su uniforme y revisado su mochila? No lo sabía, pero estaba seguro de que habían sido demasiadas. Ya había pasado muchas veces su mano por todo su uniforme, intentando eliminar arrugas inexistentes. Y por más que tratara y tratara, su cabello no le daba tregua.

Miró una vez más pero aún seguía insatisfecho, así que decidió dejarlo. Su flequillo cayó por su frente, desparramándose desvergonzadamente y cubriendo un poco sus ojos de lechuza.

Bajó al comedor y tomó un pan tostado con mermelada como desayuno. Minutos después escuchó unos pasos acercarse.

- Oh, Soo, te ves precioso -escuchó decir a su hermano y se giró para darle un beso de buenos días.

Reprimió una mueca, aún no estaba convencido totalmente de como lucía, pero creería en su hermano.

- Estoy seguro de que éste año todo irá mucho mejor.

Formó una gran sonrisa en su rostro y levantó la cabeza, miró a su hermano a los ojos.

- Tienes razón, supongo... -volvió a sonreír y se sintió bien después de ver la sonrisa satisfecha y llena de amor de RyeoWook.

RyeoWook era el segundo hijo mayor y era un Beta aunque solían confundirlo con un Omega la mayoría de las veces. KyungSoo lo entendía, desprendía un aura tan gentil y amorosa, además de un aroma tan suave que era poco probable darse cuenta de su estado Beta desde el principio.

Levantó su mochila de la silla en la que la había dejado momentos atrás y se la acomodó al hombro; después tomó el recipiente donde tenía su almuerzo, se había levantado temprano como siempre para prepararlo antes de irse a la escuela.

Caminó con RyeoWook a su lado hacia la puerta y antes de salir, esperaron a que JaeHwan bajara. Cuando el menor bajó corriendo con el uniforme a medio acomodar soltaron un risita baja, seguramente se había quedado dormido... otra vez.

KyuHyun los esperaba en el auto, por el movimiento de su cabeza deducían que estaba escuchando música. Se subieron él y JaeHwan atrás y RyeoWook en el asiento de copiloto.

JaeHwan como el hermanito menor y su consentido que era, posó su cabeza en las piernas de KyungSoo y éste gustoso lo acomodó, y acarició sus alborotados cabellos hasta llegar al colegio.

Despidiéndose con un beso del Alfa mayor los tres bajaron y se adentraron al recinto. RyeoWook los dirigió a la dirección para recibir sus horarios y tener sus clases. Cuando les dijeron a qué salones dirigirse, el grupo de hermanos se despidió agradeciendo por su atención y caminaron cada uno a sus clases. Primero se encargaron de dejar a KyungSoo, pues su salón era el más cercano.

Así que ahora el chico se encontraba fuera del salón de clases, intentando calmar su corazón y respirando profundamente. El momento llegó. Y dando el primer paso, se adentró.