Unknown number《H.S》[Daddy]

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No puedo creer lo que acabo de hacer... ¡Soy la puta ama!

Nunca en mi vida le pegué a un hombre. Nunca en mi vida pensé en decir tales cosas, pero siempre hay una primera vez para todo, ¿No?.

Mi corazón late a mil por hora, soy como un puto conejo con el pulso acelerado. No dejo de sonreír como estúpida y reír.

Cuando llegué a mi habitación agarré las primeras cosas que se pasaban por la mente. Las cosas que me regaló Ashley, algo de ropa, el libro de fotos que tomé y corrí a la cocina.

Entro con la intensión de encontrarme con Ash y saludarla para irme de este maldito infierno de una vez por todas, pero no estaba. No había nadie y no me iría sin saludar a la persona que hizo que no perdiera la cordura estos días, pero no quiero adentrarme mas a la boca del lobo y arriesgarme a que Harry me ahorque.

La puerta se abre de pronto y la sangre abandona mi cuerpo.

Estoy frita...

-¿Qué haz hecho, Maxine? -Ashley me agarra de los hombros y me abraza fuerte.- ¿Eres consciente que Harry te matará con sus propias manos, te descuartizará y le dará tus extremidades a perros mientras que entierra tu torso en el jardín? -No entiendo casi nada de lo que dice gracias al llanto y porque habla demasiado rápido.-

-No me sucederá nada, tranquila. -Digo para tranquilizarla pero lo digo mas para convencerme a mi misma que estaré bien.- Tengo que irme antes de que me encuentre. -Al decir eso Ashley me abraza mas fuerte y llora un poco más.-

-Te extrañaré tanto, pequeña. Eres lo mejor que le pasó a esta casa...

-Esto no es una despedida. -Digo riendo.- Nos volveremos a ver, eso te lo aseguro. -Acaricio su mejilla.- Tengo que irme. -Sonrió y beso su frente.- Te veré... Lo prometo.

Me separo y camino hacia la puerta. Agarro el picaporte de la puerta principal.

Por fin...

Respiro hondo y abro la puerta...

Nada de guardias como las veces que intenté escapar. Nadie me impedía salir y ser libre, las rejas que separaban la entrada de la calle estaba abierta de par en par invitándome a salir.

-Eres bienvenida cuando quieras. -Su voz ronca suena detrás de mí y hace que mi corazón deje de bombear sangre, mi cabeza no piense y que mi boca de seque.-

-No pienso volver. -Digo todavía sin darme vuelta para enfrentarlo.-

-Me encantaría que leyeras ésto. -Un sobre blanco aparece en mi campo de visión acompañada con una mano... Su mano.- Si no la quieres leer no lo hagas, pero me encantaría que lo hicieras. -Agarro la carta entre mis manos y respiro profundo. -

-Sabes que no la leeré. -Digo guardado la carta en mi mochila.-

-Tal vez cambies de opinión. No sólo escribir algo yo, también Ashley. -Nos quedamos unos minutos es silencio.- Espero verte algún día de vuelta, Max.

-Yo no, la verdad. Si algún día me encuentro contigo correré lejos. -Sonrío aunque sé que no puede verme ya que todavía le estoy dando la espalda. Me volteo para verlo por ultima vez.-

Su cabello corto que siempre está alborotado, sus labios rosaditos y finitos, su nariz tan envidiable porque es perfecta, su mandíbula marcada que me vuelve loca, y sus hermosos ojos que te hipnotizan.

-¿Qué observas tanto? -Sonríe y sus hoyuelos se marcan.-

-Sólo estoy memorizando los detalles de tu rostro para cuando me pidan una imagen tuya poder dársela a la perfección. -Sonrío inocente y me volteo.- Gracias por todo, Styles... No, es broma, puedes irte bien a la mierda. -Me despido con la mano mientras camino hacia afuera.-

-Nos vemos. -Siento que dice cuando se cierra la puerta.-

Y ahí estoy... pisando la calle, viendo gente que no sea el personal de Harry... Soy libre.