Capítulo2: La Cita (Parte2)

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Matteo? Qué haces aquí?

Quería darte una sorpresa, y veo que si te la di!.

Sí, una grata sorpresa. Pero espera, ¿Qué era lo que me tenías que decir?.

Ah si, lo había olvidado. Antes que nada, pídete algo, ya sea un café, un helado o algo por el estilo, yo pago.

De verdad? No, no te preocupes, yo invito si?.

No, ya te dije que yo te invito.

Seguimos con esa discusión durante mucho tiempo, lo bueno es que el recreo duraba una hora, así que hay tiempo de sobra.

Bueno Matteo, ¿Qué es lo que tenías que decirme?.

Ema, me gustaste desde el primer momento en que te vi, sabía que eras una chica encantadora. Ema, ¿Quieres ser mi novia?.

En ese momento mi corazón latía más rápido que ayer en el recreo, pero no lo pensé 2 veces y acepté. Sé que era demasiado rápido, pero llevo mucho tiempo sintiendo esto por Matteo.

Me haces el chico más feliz de la historia. ¿Puedo darte un beso?.
Wow!  Que chico tan lanzado eres Matteo. Pero si, puedes.
Está bien.

Su boca se acercaba a mi lentamente, cada vez sentía más mariposas en el estómago, hasta que me besó. No lo podía creer, era el mejor momento que había vivido en el amor, ya que era mi primer beso.

Ema, ¿Te gustó?.
Claro que si Matteo.

Quiero gritar a los 4 vientos que ya somos novios, te amo demasiado Ema.

Yo te amo más. Matteo me volvió a besar, era el segundo beso del día, de verdad no lo podía creer.

¿Te parece si nos vamos ya?.

Claro que si, lo que tu digas. Estábamos tomados de la mano, pero ésto se iba a acabar muy pronto, porque ya teníamos que irnos a nuestros respectivos lugares,  y la verdad estábamos muy lejanos, ya que su puesto quedaba a 7 lugares de el mío. A la salida no podíamos vernos ya que a él lo recogía muy rápido su chofer...

Estaba hundida en mis pensamientos, cuando de repente siento la voz de Matteo y me dice:
Ema, ahora tenemos un problema: ¿Cómo se lo vamos a decir a nuestros padres?

Me sobresalté un poco al escuchar esa pregunta, y contesté intentando sonar normal, aunque en realidad estaba muy nerviosa:
No te preocupes, ya encontraremos la forma. Nos quedamos en silencio un momento, y paramos porque ya teníamos que entrar, hasta que se me ocurrió una idea que no sé si era buena, pero lo iba a arriesgar todo, aunque por otro lado sentía que iba muy rápido: Te parece si mañana te invito a cenar a mi casa y se lo decimos?.

Claro que sí.

Bueno, te amo, nos vemos mañana en la escuela.

Está bien, yo te amo más.

Era muy raro decir eso, no estaba acostumbrada a mencionar esas 2 palabras, solo las leía y las escuchaba en las novelas románticas, pero nunca en mí.

Amor Sin Fronteras©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora