Read My Lips ~ Yoonseok

Capitulo 2: Sentir (te)

-Esa parte me agrada.- interrumpió Namjoon, sentado a un lado de Yoongi. Ambos compartiendo un audífono en frente de la computadora.- Quizá debemos cambiar el final.

Yoongi asintió, pausando la canción, haciendo una marca en el minuto y segundo en que aún debían trabajar.

La habitación de Namjoon era todo lo contrario a lo esperado.

Siempre se mostraba como alguien despreocupado y tranquilo, pero justo ahí podía ver una pila de libros sobre su velador, su cama perfectamente hecha -con un par de peluches encima- y dos estantes llenos de más libros.

Los fines de semana, Yoongi llevaba su portátil a casa de Namjoon y pasaban el día arreglando canciones.

Para Yoongi esa era su versión de paz.

-Estás un poco ido.- mencionó el más alto, poniéndose de pie para sentarse en su cama. Yoongi quitó su audífono y tamborileó los dedos sobre el escritorio.

-Creo...- comenzó a decir en voz baja. Su mirada fija en un rayo de sol que se proyectaba en el suelo.- Creo que ofendí a alguien.

Namjoon alzó una ceja.

-¿Oh? ¿Yoongi-sii metido en líos?. Esto es nuevo.

El mencionado chasqueó la lengua ofendido y golpeó la punta de su zapato. Namjoon soltó una carcajada, alzando sus piernas para sentarse como un indio en la cama.

-¿Quién es el afortunado?.- bromeó, a lo que Yoongi se relamió los labios algo nervioso.

-Jung Hoseok.

Esta vez, ambas cejas se alzaron en sorpresa, pestañeando un par de veces.

-¿Disculpa?

Yoongi soltó el aire contenido, apoyando sus brazos sobre sus muslos, frotando sus ojos un par de veces. Frustrado.

-Creo que escuch- es decir... ¿Nos vio?.- farfulló sin entender cómo es que todo había sucedido.- Probablemente nos vio en la sala de música o algo así.

-¿Como un psicópata?.- preguntó con los ojos entrecerrados, aguantando una sonrisa.- ¿Y cómo se supone que tú sabes eso?

-Me lo dijo ayer.

-Ah sí, supe que puede hablar...

-¿No serás tú un psicópata?.- lo encaró cruzándose de brazos.- Conoces todos los rumores, Namjoon. Y además.- le frenó cuando iba a hablar en su defensa.- No deberíamos hablar de él, ni siquiera lo conocemos.

-¿No estamos haciendo lo que todos hacen?.- preguntó con sinceridad, llamando la atención de su amigo.- El chico sordo que estudia en una Escuela pública ha sido la noticia del año y está en boca de todos. Absolutamente nadie ha dejado de hablar sobre él.- insistió luego de escuchar un suspiro de resignación.

Por favor, no hablar de mi.

Quizá ese era el punto, pensó en el autobús devuelta a casa, mientras veía la ciudad a oscuras, ya habiendo anochecido.

Conocía esa presión en donde eres un alumno nuevo y todos intentan saber más de ti, intentando ser amigos contigo, invitándote a sentarte con ellos en el almuerzo y conversar en los recreos. 

Pero eso no había ocurrido con él.

Nadie se había acercado a Jung Hoseok, porque era un bicho raro y no estaban seguros de cómo comunicarse con él. Ni siquiera él estaba seguro sobre cómo comunicarse con una persona sorda.

Dios, no tenía idea de que un sordo pudiese hablar.

Ese día antes de la cena, la madre de Yoongi vio a su hijo inmerso en su computadora, pasando de página en página, incluso tomando apuntes en el reverso de su cuaderno.