Observó la pantalla de su teléfono brillar y vibrar en un llamada matutina de un día jueves.
Dos veces al mes desde hace un par de años era todo el interés que recibía. Pero no quería esperar más tampoco.
-Hola.- farfulló frotando sus ojos, la mañana comenzando a despertar mientras viajaba en autobús hacia la Escuela.
-Hola, hijo.- escuchó del otro lado. Su voz era casi igual a la de suya, como si se tratara de una versión adulta. No le agradaba.- ¿Qué tal va la Escuela?
-Bien.
Yoongi respiró profundo, el otro lado de la línea en silencio, como si su padre esperara que hablara más sobre él, más sobre su día a día. Pero no podía. Se sentía demasiado enfadado como para hacerlo.
-Eso es bueno, eres inteligente.- habló apresuradamente.- ¿Y tu madre? ¿Cómo va su salud?
Sonrió.
-Ella está bien. Los dos estamos bien.- sentenció.
Otra vez silencio, mientras cada vez estaba más y más cerca de la Escuela. Se sentía repentinamente ansioso por llegar y estar con Namjoon. Y de cierta forma, pensar en Hoseok sonriendo le hizo sentir mejor.
-Escucha...- volvió a sonar la voz de su padre desde su celular.- Mi cumpleaños es este fin de semana, estaba pensando en si querías venir a verme.
El pelinegro cerró sus ojos suavemente y recostó su cabeza contra el vidrio. Habían cientos de cosas que quería encararle, pero se limitó.
-¿A cuántos de mis cumpleaños has venido tú?.- Otra vez ese silencio que estaba comenzando a hartarlo.- El dinero que envías es tu interés por mi. Así que, por favor...- susurró frotando su frente e incorporándose para tocar el timbre para bajar.- No me pidas un esfuerzo mayor al que tú haces por mi.
-Yoongi...- rogó al otro lado de la línea.
Miró la pantalla de su celular, los minutos de llamada avanzando y simplemente negó con la cabeza.
-Debo ir a la Escuela.- soltó cortante y un poco más alto de lo que debería, llamando la atención de un par de pasajeros.- Hasta tu siguiente llamada.- Cortó.
El autobus se detuvo y abrió sus puertas a un par de cuadras de su lugar de estudio. Guardó su teléfono en su bolsillo y se colgó la mochila.
No debería dejar que esta clase de cosas arruinaran su día.
***
-¿Qué tal, Hobi?.- saludó Namjoon, alzando su mano mientras esperaba en la entrada de la Escuela. Hoseok sonrió, despidiéndose de su papá quien se marchó en la camioneta.
-Todo bien.- respondió aferrado a su mochila por sobre sus hombros.- ¿Y tú?
Namjoon le guiñó un ojo, sonriéndole en respuesta. Hoseok rió y miró detrás de él, buscando con su mirada, para luego fruncir el ceño.
-¿Yoongi?
Namjoon negó con la cabeza, también inclinándose para mirar hacia la calle, sin poder visualizarlo. Hoseok copió su acción, viéndose interrumpido por la hora de inicio de clases. La campana sonando sobre sus cabezas hizo que el más alto se acercara para palpar su hombro y hacerle un gesto para que ambos entraran.
El castaño hizo un pequeño puchero y asintió, siguiéndolo.
***
Más tarde ese día, la clase comenzó. No era particularmente la que más le gustaba, porque el profesor solía explicar los ejercicios mirando hacia la pizarra y no podía leer sus labios.
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Read My Lips ~ Yoonseok
FanficYoongi lo observó durante un rato. Entonces encontró un detalle. Había aparato envolviendo su oído derecho, el cual tocaba cada cierto tiempo, modulando un interruptor. Un detalle particular sobre Jung Hoseok. Era sordo. ___________________________ ...