A Wonderful Meeting

Capítulo 9: No te necesito más

A un lado la foto del outfit de Zoella

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Sus labios se movían contra los míos como si de una danza se tratase, era un beso lento y delicado, se sentía tan bien que sin darme cuenta le estaba correspondiendo, hasta que recorde un nombre “Rose”, ese fue el punto de partida para que reaccionara y reclamara mi espacio y así lo hice, me separe de él, tome mis cosas y me dirigí al baño, tratando de no hacer notar lo afectada que estaba.

Una vez en la ducha, mis pensamientos comenzaron a traicionarme, ¿Porque me sentía así estando con Phillip si en resumidas cuentas era prácticamente un extraño?, pero ese era el punto, este extraño se me estaba haciendo tan familiar que me era imposible apartarme o hacerme  a un lado, era la segunda vez que me besaba y la segunda vez que mis fuerzas se evaporaban y terminaba correspondiéndole  pero ¿Qué me está pasando?

“Ese chico te está gustando”- dijo una vocecita en mi cabeza.

Claro que no, es solo una atracción momentánea, Phillip es realmente guapo, seguro es su físico el que me hace delirar cuando estoy con él, si! Debe ser eso.

Salí del baño confiada y suspire agradecida de que Phillip esta vez no se encontrara en mi habitación y mucho menos escondido en el armario, comencé a desenredar mi cabello y  me coloque solo una cinta roja, abrí el primer cajón para buscar alguna crema perfumada y para mi sorpresa me encontré con una pequeña nota:

 

Arréglate, tenemos que ir a mi casa, mi madre se quedó muy preocupada luego que huyeras de la cena.

PD: Algo casual estaría bien (solo lo digo porque las chicas podéis ser muy andrajosa con eso de la ropa)

Phillip

Genial, otro día al lado de Phillip, aunque siento que se lo debo a los señores Rumsfeld, ellos me han tratado muy bien, necesitan una explicación o al menos algo que justifique mi falta de cortesía de ayer.

Decido cambiarme mis shorts y la enorme camiseta por algo más acorde, así que rebusco todo el armario arrojando camisetas, vestidos o pantalones de un lado a otro. Finalmente me decido por un par de jeans acampanados, una camiseta simple sin mangas y unos tacos lizos color piel, retiro la cinta roja de mi cabeza y coloco un lindo sombrero veraniego.

Al salir de mi habitación encuentro una escena comiquísima, mi madre ha hecho colocarse uno de sus delantales a Phillip y le está haciendo preparar los huevos revueltos.

- Ohh que rico huele- murmuro entre risas, Phillip solo se voltea y me gruñe algo inentendible para luego seguir con su labor.

Luego de desayunar, Phillip y yo emprendimos nuestro viaje, fue algo incómodo por así decirlo, puesto que ninguno se atrevía a hablar por temor a que cualquier tópico de la conversación se desviara al beso matutino y fue así como nuestro viaje se hizo más pesado y tedioso en comparación con las otras veces.

Al llegar, Phillip estacionó su auto y baje a toda prisa tratando de que mis pies no me traicionaran y callera como muchas veces me ha pasado, estaba dispuesta a emprender mi camino hacia la puerta pero algo me llamo la atención, era un auto pero uno que no había visto anteriormente, era un convertible de color fucsia – debe ser de Danielle- pensé, siento una presencia detrás de mí y cuando volteo es Phillip mirando el convertible pero no de la misma manera que yo , su mirada era de asombro y susto a la vez , parecía como si lo hubieran asustado o recuerdos le inundaran la mente.