Cambios. (Alex Hogh Andersen)

c a p í t u l o 14

Salí corriendo a por Marco antes de que consiguiera un taxi que lo llevara a casa, pero tuve suerte y aún estaba por ahí esperando.

-¡Marco!. -Le grité e hice un movimiento brusco con la mano, era de noche y el había bebido. Corrí hacia donde estaba el, que se había parado. -¿Por qué te vas ya?, Y sin avisarme, si estás cansado me lo hubieras dicho y yo te habría llevado a casa.

Se quedó completamente callado, mirándome, no tenía ninguna expresión facial.

-No te quería... molestar. -Dijo finalmente. Se notaba que había bebido y estaba borracho, pero ni lejos igual de borracho que Alex o Alexander. -Cogere un taxi, tu vuelve dentro que hace frío. -Me dio la espalda y siguió caminando, hubo un momento en el que se tambaleó pero volvió a recobrar el equilibrio y siguió su camino.

-No seas idiota, no me molestas, yo estaba deseando irme. -Corrí y lo alcancé.

El paró, se empezó a reír como un loco y me encaró.

-Pues no lo parecía, se te veía muy agusto bai... En fin, da igual. -Yo me imaginé el final de la frase y suspiré.

-Vamos al coche Marco, te llevo. -Le agarré el brazo y en un movimiento torpe el se zafó de mi agarre.

Escuché bulla, miré y eran Alexander y Alex haciendo los idiotas mientras que salían de la discoteca con los demás, al parecer la fiesta ya se ha acabado para todos.

-¡Chicos!. -Alex alcanzó a vernos e hizo lo mismo que yo, nos hizo un movimiento con las manos indicado que lo esperáramos. -Os ibais sin despediros, ¿A dónde vais?. -Preguntó.

-A llevar a Marco a casa. -Respondí rápidamente y el asintió.

Marco estaba callado, no decía nada, y su cara volvió a ser como la de antes, inexpresiva.

-¿Estás bien tío?. -Alex hipó al preguntarle y le puso la mano en el hombro, la cual Marco se sacudió rápidamente. -¿Que cojones te pasa?. -Alex no entendió la reacción de su amigo y su rostro mostraba total confusión, y mucha más aún con lo bebido que estaba.

-Nada Alex, será mejor que te vayas a dormir. -Marco lo miró directamente a los ojos al decirle eso, luego siguió caminando.

Alex y yo nos quedamos atrás mientras el seguía avanzando, nos miramos y el tenía expresión confusa, yo me encogí de hombros y el salió corriendo tras Marco mientras yo me quedaba donde mismo estaba.

Cuando Alex lo alcanzó ambos se pararon y empezaron a hablar, yo preferí quedarme donde estaba, mirando, y dejandolos hablar a ellos.

De vez en cuando podía escuchar alguna palabra suelta cuando subían la voz, sobretodo Marco, que era el que más gritaba, miré a el resto y ellos estaban igual que yo, pero con la diferencia de que Amelia ya no estaba. Cuando volví a mirar a Alex y Marco vi como Alex le dio un pequeño empujón a Marco y Marco en respuesta le dio otro que gracias a la inestabilidad de Alex casi se cae, corrí hacia ellos.

-Eh chicos, ¿Que pasa?. -Me puse entre ellos y ambos me miraron y se miraron con rabia entre ellos.

-Nada Irina, no es asunto tuyo. -Marco me habló de mala manera, borde y eso me molestó.

-Eh, a ella no le hables así. -Alex me puso destras suya en un movimiento rápido, como queriendo protegerme de Marco. -Ella no tiene culpa de nada. -Marco se empezo a reír y en ese momento llegaron los demás.

-¿Que pasa aquí chicos?. -Preguntó Gee con sólo llegar.

-No pasa nada joder, esto es entre Marco y yo.

-Tranquilo Alex. -El novio se Georgia se molestó ante el tono que usó Alex con Gee. -Sea lo que sea será mejor que lo habléis mañana, sobrios.

-Estoy de acuerdo, vayamos todos a nuestras casa, durmamos y ya se hablará todo, vamos Alex. -Alex asintió, me dio un pequeño beso en la cabeza a modo de despedida y empezó a caminar en el sentido contrario.

-Eres una liante Iri. -Alexander me abrazó y como siempre quería sacar la parte graciosa de las situaciones me dijo eso al oído riendo.

-Todo se arreglará, tranquila. -El tono de seguridad en Gee cuando me lo dijo mientras nos despediamos me tranquilizó.

-Sí tú lo dices. -Ella asintió con una media sonrisa.

Cuando ya estábamos solos Marco se me quedó mirando con las manos en los bolsillos.

-Vamos al coche. -El simplemente asistió y me empezó a seguir. -¿Me vas a decir porque os estabais gritando y os habéis empujado?.

-Ya te dije que no es asunto tuyo, simplemente pasa del tema. -Se encogió de hombros y yo asentí.

-Eres insoportable.

El camino en coche hasta su casa fue completamente silencioso, nadie dijo nada en ningún momento hasta que llegamos y me agradeció casi susurrando.

-No me puedo creer que sea tan cabezota. -Susurré abriendo la puerta de mi casa al llegar.

Me quité los zapatos, me quité la ropa y entré directamente a la ducha, lo necesitaba con urgencia, al salir me puso un pijama y me tiré en la cama, justo cuando eso pasó mi móvil empezó a sonar desde la mesa de noche, donde lo había dejado antes de entrar al baño.

-Joder. -Lo cogí. -¿Si?.

-Irina, soy Alex, sólo quería saber si habías llegado bien. -Tenía la voz pastosa, se estaba muriendo de sueño.

-Sí Alex, he llegado bien, gracias por preocuparte. -Suspiré.

-No hay de que, y oye, no se lo tengas en cuenta a Marco, la forma en la que te ha hablado me refiero, el no es así.

-Ya... Bueno, puede que no, pero aún así, toda la situación ha sido rara Alex. -En ese momento se me vino a la mente el beso que Alex me había dado en el cuello mientras bailábamos y me volvió a pasar lo mismo que entonces, se me pusieron los pelos de punta ante el recuerdo.

¿Lo habría visto alguien?, nadie lo había mencionado pero no estaba segura de si nadie lo había visto, espero que no.

-Ha sido rara su reacción, qué bueno, ni eso, yo ya sabía que estaba celoso, pero como le he dicho no puede reaccionar así ante eso, estábamos bailando, no ha pasado nada, podría ser conmigo o con cualquier otro y en ese caso si que podría haber pasado algo y se tendría que haber tragado sus celos porque no tiene ningún derecho a estarlo. -Terminó de hablar y me dejó claro que o no recordaba el beso o prefería no hacerlo, teniendo en cuenta su estado de embriaguez ambas eran muy posibles.

-Sus celos son boberías, quiero decir, no tiene porqué estarlo, debería hablar conmigo y ya, no ponerse así.

-Lo sé Iri, pero el es así, hasta que hable contigo del tema, así que ten paciencia, yo personalmente creo que no lo habla porque aún no está seguro de nada, siente celos y demás pero no mucho más, no cree que te quiera ni mucho menos, sino una simple atracción.

-Puede ser, Alex será mejor que vayamos a dormir ya, mañana trabajamos. -Le corté.

-Mierda, tienes razón, nos vemos mañana, descansa Iri.

-Igualmente. -Colgué y me quedé mirando al techo de mi habitación, en qué momento había llegado yo a esto.

Lo mejor sería que me olvidara del beso, al igual que había hecho el y siguiera con todo normal, hasta que Marco se decidiera en hablar conmigo.