Cambios. (Alex Hogh Andersen)

c a p í t u l o 10

-Irina, Irina... -Alex me llamaba casi susurrando mientras me movía el hombro. -El director nos ha comunicado a todo el equipo que hoy se suspende el rodaje por lo de Anny, para que vayamos a visitarla y demás.

-Genial, podré dormir más, ¿por qué me despiertas?. -Le dedique una mala mirada y hundí mi cabeza en la almohada.

-Yo también tengo sueño aún pero tengo más hambre... Quería pedirte algo de comer. -Su voz sonó dudosa y al no poder ver su cara no podía estar segura.

-Mi casa es tu casa, sirvete lo que quieras y luego vuelve a dormir un rato, yo volveré a ver a Anny, ¿vienes conmigo?. -Le pregunté y esta vez sí lo miré, asintió. -Genial, buenas noches. -Volví a hundir mi cabeza en la almohada y sentí como el se levantó de la cama.

-Buenos días Irina. -Y salió de la habitación.

Sentí como la cama se volvía a hundir despertándome junto a él movimiento y vi que era Alex que se había vuelto a acostar.

-Lo siento. -Susurró. -No quería despertarte.

-Tranquilo, sigamos durmiendo para ir a ver a Anny y la niña descansados.

Me desperté ante una canción que no era la mía, al abrir los ojos empecé a mirar y vi que provenía del móvil de Alex que lo había dejado en la mesa de noche, al ver que el no se despertaba lo cogí.

-¿Sí?. -Soné irritada, lo cual para mí era normal, me habían despertado y l hora de dormir para mí es sagrada.

-¿Irina?. -Marco hablo al otro lado de la línea dudoso.

-Oh, hola Marco. -Aclaré un poco la voz. -¿Despierto a Alex para que hables con el?.

-Ehh... no, no hace falta. -Su voz sonaba confusa. -Era para decirle que Anny ha dado a luz y se cancela el rodaje de hoy por ello, ya se lo dices tú si eso que yo le mandé unos mensajes y no me contestaba...

-Lo sabemos, estuvimos allí de madrugada en el parto, por eso aún estábamos durmiendo, Alex se quedó en casa porque estábamos reventados de estar tantas horas después del trabajo allí, en un rato volveremos al hospital. -Le expliqué todo rápidamente, aún no sé porqué pero algo en mi hizo hacerlo así, sentía que debía hacerlo. -No te avisamos a ti y a los demás porque Anny no quería molestaros.

-Ya eso me dijo cuando me avisó esta mañana, pero bueno, que os veo después. -Su voz sonó algo más ¿aliviada?, negué rápidamente con la cabeza, las palabras de Alex de anoche me estaban pasando factura.

-Claro Marco, hasta después. -Colgué y volví a dejar el móvil donde estaba. Cuando iba camino al baño el móvil empezó a sonar otra vez. -Joder, este niño está más solicitado que el rey... ¿Sí?. -Pregunté al coger el teléfono, y comprobé por segunda vez que tengo una mala manía en coger el teléfono sin mirar quien es y más cuando es desde un teléfono ajeno.

-¿Quién eres?, ¿y Alex?. -Miré el teléfono y ponía Amelia, era el ligue al que Alex había plantado anoche por el parto de Anny. Rápidamente empecé a moverlo.

-Soy Irina, una compañera de trabajo, enseguida te lo paso. -Ella se quedó en silencio y yo tape el altavoz del móvil con la mano.

-Alex, es Amelia, despierta joder. -Al escuchar eso abrió con ojos y cogió rápidamente el móvil.

-Hola Amelia. -Aclaró la voz y siguió hablando. -Sí, Anny está bien y el bebé también, ayer me quedé en casa de la amiga con la que fui al hospital, sí. -Preferí dejarle privacidad en la habitación y me fui al baño.

Al entrar a la cocina ya Alex estaba allí comiéndose una manzana.

-Siento haber cogido tu teléfono sin permiso Alex, es la costumbre porque odio que me despierte en el caso de Marco y en el caso de Amelia porque no quería que te despertaras tu, pero entiendo que hay personas a las que no les gusta que le cojan el teléfono.

-Tranquila Iri, conmigo no hay problema con eso, soy igual que tú, yo hago lo mismo y no ha habido ningún problema, ¿Marco también me ha llamado?. -Preguntó luego.

-Sí. -Cogí la caja de cereales y los puse en un bol. -Reaccionó un poco extraño a que yo atendiera tu móvil pero luego de aclararle lo de anoche volvió a la normalidad y me dijo que era para avisarte de lo de Anny y la suspensión del rodaje. -Me llevé una cucharada de cereales a la boca.

-¿A qué te refieres con que reaccionó extraño?. -Preguntó.

-No sé, sonaba sorprendido y confuso. -Me encogí de hombros y seguí comiendo cereales.

-Bueno, ya luego hablaré con el. -Te importa pasar por casa antes de ir al hospital para darme una ducha y cambiarme de ropa.

-Claro que no, termino de desayunar, me ducho, me visto y salimos, haz lo que quieras mientras, en el salón está la play y demás.

-¿Tienes play?. -Gritó y salió corriendo al salón. -Y tienes juegos buenos, genial... Oye, tenemos que hacer quedadas con los chicos para jugar, lo solemos hacer de vez en cuando. -Gritó desde el salón y yo le respondí con un "Ajá" con la boca llena de cereales.

Al terminar fui a hacer todo lo que tenía que hacer antes de irnos.

-Alex, en lo que te preparas voy a el super a comprar unas cuentas cosas para Anny, sé que odia la comida de hospital y tendrá muchas ganas de porquerías. -Me dije cuando lo dejé en la puerta de la casa y el asintió.

-Traeme algo de chocolate a mi también por favor. -Yo asentí y arranqué el coche camino al supermercado.

Al entrar al pasillo de las golosinas, chocolates y demás empecé a coger cosas como loca y metiéndolas en el cesto, al final salí de allí con dos bolsas llenas.

-Puedes pillar cualquier cosa que te guste de las bolsas, a Anny le gusta todo. -Le dije a Alex en cuanto subió al coche y cogió un chocolatina Twix. -Es mi favorita.

-Y la mía. -Reí. -Amo el chocolate y el caramelo, no hay mejor creación que esa. -Ambos reímos.

Cuando llegamos al hospital y nos bajamos me fijé en que llevaba un conjunto completamente negro y aún llevaba el pelo mojado recogido en una rápida coleta.

-Mañana te tengo que rapar los lados, ya tienes el pelo demasiado grande. -Le dije en el ascensor y el asintió. -¿Cómo están mi ahijada y su madre?. -Hablé por no decir grité entrando en la habitación de Anny y ella empezó a reír.

-Se nota que has dormido eh. -Yo asentí.

-Y te traigo lo mejor del mundo. -Levanté las bolsas y se las di. -Muchísimos chocolates y porquerías.

-Joder Irina, me lo lleva pidiendo desde anoche, yo no le traigo por su salud y llegas tú con eso.

-Joder Mason, sabes que odia la comida de aquí y es adicta al chocolate, ¿Que más te da?. -Le dije rodando los ojos.

-Te amo Irina. -Me dijo Anny con una expresión de felicidad que no le cabía en la cara.

-Lo sé. -Reí. -¿Y mi Ahijada donde está?. - hablé.

-Se la han llevado a hacerle unas pruebas, la tienen que traer en nada, Gee, Marco y Jordan están en la cafetería que fueron a comprarme un café, supongo que ellos también estarán comiendo algo, llegaron desde muy temprano y han estado aquí desde entonces, muchos han estado un rato y se han ido, más que nada porque vosotros tenéis día libre pero algunos tiene que trabajar medio día. -Anny hablaba rápidamente mientras que comía una tableta de chocolate Milka con oreo, su favorita.

-Y aún todos los que quedan por llegar a visitarte, y familia que aún no ha venido también. -habló Mason.

-Ya, normalmente en mi familia prefieren en estos casos ir a visitar a la familia a la casa porque en el hospital se está incómodo y demás, pero como ya me han dicho que pasaré bastante tiempo aquí pues... -Ella se encogió de hombros. -Puedes coger algo de mi bolsa Alex, que te voy mirando mi chocolate como si fuera la última agua en el desierto. -Ella empezó a reír y los demás nos unimos.

-Ya estamos aquí. -Habló Gee al entrar en la habitación con el café en la mano. Jordan y Marco entraron detrás suya. -Oh, hola chicos.

-Hola. -Los empecé a saludar a todos y Alex igual, luego empezamos a hablar entre todos, reíamos y contábamos cosas entre todos, pero Marco estaba más callado de lo normal y no aportaba mucho a la conversación, parecía ausente.