Bajo tu hechizo

capitulo 5 - cumplan la promesa

Pasaron 11 años, Chisini finalmente había crecido hasta aparentar unos 15 años - físicamente - pero seguía con la mentalidad de un niño pequeño

El tiempo se terminaba, el emperador Titus tendría que ir dentro de poco tiempo devuelta al palacio para traer el pago por su ayuda, y más le valía no hacerla enojar

Pasó otro año, el tiempo límite se había terminado, Anippe ya había perdido la paciencia y estaba a punto de mandar su ejército por su pago, pero entonces la familia entera se presentó al palacio

Titus llego, seguido de su esposa Vibia, quien traía tomados de las manos a sus hijos, el niño se llamaba Marcus y la niña se llamaba Lucia

Anippe suspiro aliviada, al parecer los romanos cumplían sus promesas a pesar del paso del tiempo, sonrió, le comenzaba a agradar esa cultura

- vaya vaya, al parecer vinieron a cumplir su palabra

- así es joven señora

- bien, entonces, ¿quién es el mayor de los dos?

Titus tembló de nervios, no quería entregar a su primogénito, más tenía miedo de mentirle a Anippe y provocar su ira, pues había escuchado historias de lo que ella era capaz de hacer si la hacían enojar

Marcus y Lucia se miraron, ambos sabían porque habían ido, pero no querían separarse, eran hermanos, uno de ellos tenía que dar un paso para salvar la vida de sus padres y la suya

Marcus dio un paso al frente, firme, soltando la mano de su madre y despidiéndose de su hermana sin palabras, solo con una mirada

- yo soy el hijo mayor

Dijo Marcus al tiempo que daba un paso al frente, firme como su bisabuelo Gaius, después hiso una reverencia ante Anippe, pero al levantar el rostro, noto al chico que estaba a su lado, al verlo su joven corazón comenzó a acelerarse sin entender porque, ese chico era tan hermoso como una estatua de mármol

Chisini vio al niño, le parecía tierno, al parecer seria el quien se quedaría a jugar, tendría un hermano pequeño, eso lo animo un poco

- muy valiente y honesto de tu parte pequeño - sonrió - será un placer tenerte como mi pupilo - le tendió la mano - ven, no temas, nadie aquí te lastimara

Marcus se acercó a ella, temeroso pero forme, no podría mostrar temor ni duda pues sabía que eso podriacostarle la vida y no quería morir

- muy bien hecho

El resto de su familia lo miro con tristeza, no sabía cuándo volverían a llevarlo a casa, podrían pasar décadas o años antes de que lo volvieran a ver, mas habían hecho un trato

- no hay cuidado majestades, su hijo estará más seguro aquí que en su mismo hogar - sonrió - retírense

Titus, su esposa y su hija se dieron la vuelta y partieron de regreso a su hogar, el debía dirigir su imperio, mientras que Vibia se encargaría se educar a su hija de cómo ser una buena esposa

Tras la partida de su familia, Marcus comenzó a sentir la añoranza, no le gustaba la sensación de estar lejos de su hermana, de su dulce madre y su fuerte padre

Anippe volteo a verlo, sintió las penas que cargaba, pensó en animarlo a él, después volteo a ver a su hijo y noto el mismo rostro lleno de tristeza, iba a animarlos a ambos

- Chisini, querido

- ¿qué sucede madre?

- acompaña a Marcus y muéstrale su habitación

- está bien madre

Chisini se levantó de su trono y volteo a ver de forma amigable al pequeño, era muchísimo más joven que el - aunque claro el ya tenía siglos de vida - y parecía un pequeño niño adorable, le sonrió

A Marcus se le acelero el corazón al ver la hermosa sonrisa que el hermoso chico le regalaba a cambio de nada

Ambos salieron del salón de tronos y fueron hacia las habitaciones, y curiosamente, la habitación de Marcus estaba justo al frente de la habitación de Chisini

Eso le sorprendió a Chisini, siempre había tenido toda el ala este del palacio para él solo, pero al parecer ahora iba a compartir su palacio con otro niño como el

- bueno, al parecer seremos vecinos

Marcus solo asintió, estaba completamente embelesado con el chico, pero a veces se sonrojaba y miraba al piso, ¿qué le estaba pasando?, ¿Porque no podía dejar de verlo?, se sentía muy extraño

Chisini noto que el pequeño actuaba raro, pensó en abrazarlo pero entonces recordó que no podía tocarlo o podría lastimarlo, así que se alejó y se fue hacia su cuarto, mantendría sus distancias de el