Cuando me senté al lado de Pía para seguir trabajando sabía que tenía preguntas por la forma en que me miraba. Seguí haciendo mis cosas, un poco haciéndome la loca.
A las 5 de la tarde por fin Pía exploto. Jonathan la había llamado a decirle que nos íbamos a almorzar juntos y sabía que algo había pasado, solo que hasta el momento no le había querido decir nada.
Pía había sido una gran compañera, quizás hasta una nueva y buena amiga y era hora de contarle la historia completa. Así que la invite a comer algo para hablar con ella.
Acepto ir conmigo solo si después nos reuníamos con los chicos en Bar's, le recordé que al día siguiente tenía un viaje y que no podía quedarme hasta tarde fuera, pero dijo que nos iríamos temprano, así que le seguí la corriente.
Fuimos a un restaurante en el centro donde vendían pizza, según Pía la mejor de la ciudad. Hace tiempo había querido simplemente sentarme a comer una pizza con cola y no pensar en nada más.
Pedimos una pizza margarita para las dos y dos cocas.
- Ahora si me vas a contar que paso hoy en Floos.
- No me digas que el chisme completo ya no recorrió la empresa – le pregunte con sarna.
- Claro que no – dijo – no somos ese tipo de empresa ¿todavía no nos conoces?
- Lo siento – dije arrepentida.
- Rebeca solo me dijo que habías estado peleando con este tipo que te fue a buscar, pero porque la presione, créeme, la presione, y que te habías ido después con Jonathan, cosa que ya sabía porque el mismo me llamo, pero no se absolutamente nada más.
- Bueno, el tipo que fue a buscarme era mi ex.
- ¿Y no terminaron bien?... – reflexiono un poco – que pregunta tan estúpida, que ex's terminan bien... no terminaron bien – afirmo.
- No.
- ¿Y por qué fue a buscarte?
- Ni idea, quizás quería seguir manipulándome, aunque termine con él, o quería burlarse porque mi vida no es perfecta como lo era estando con él, según su versión y la de mis padres. O no sé, simplemente está loco, como estoy segura que lo está – me reí.
- No entiendo, que fue lo que realmente paso.
Volví a contarle la misma historia a Pía, la que le había contado a Jonathan ese mismo medio día. Como había sido mi vida estos 26 años, la relación con mis padres, los cuatro años que pase con James, mi trabajo y escucho con atención, igual que Jonathan.
Era bueno tener personas con las que contar, que me escucharan y entendieran. Nunca las había tenido y en esta nueva vida, tenía varios.
- Waoooo, lo siento mucho Vero.
- No hay nada que sentir, todo eso me llevo hasta donde estoy en este momento, y no me arrepiento.
- Eso es cierto, pero ufff, no me imagino tener una familia así, mis padres siempre me han apoyado y me han dejado ser como he querido.
- Ojala yo pudiera decir eso mismo, pero mi vida no fue rosas.
- Ya lo veo, pero lo importante es que ahora estas aquí, sacaste a las personas toxicas de tu vida, y tienes nuevas en ella, y sin ánimo de parecer ególatra, somos mucho mejores.
- Eso es cierto – reímos.
La pizza llego y se veía realmente provocativa, así que nos la comimos toda. Estaba verdaderamente deliciosa.
ESTÁS LEYENDO
Volver a empezar
Teen Fiction"Mi día no había salido para nada bien. Mi despertador no había sonado, mi auto se había demorado en prender, el ascensor no llegaba, mi jefe me había buscado a primera hora de la mañana y yo no había estado, el café se había regado en mi blusa bla...