(#1) Never Be - Luke Hemmings

Capitulo 1~ {New Home}

LUKE

Recostado en el sillón de la sala de mi casa, me encontraba mirando televisión mientras esperaba a que mamá bajara de su habitación para irnos en dirección a su empleo. Las vacaciones de verano en la universidad habían comenzado y apenas llevaba un día en Sídney llegando de Londres con el cambio de horario generando problemas en mi sistema, sobre todo porque aquí no era verano, sino invierno, pero ella creía que era mejor adaptarme de una buena vez y salir de casa, a quedarme sentado justamente en el sitio donde mi cuerpo descansaba, haciendo lo que hacía ahora, que es... nada.
Sin duda eso me parecía bastante ilógico, puesto que haría la misma actividad perezosa solo que en otro lugar, pero por más que intenté razonar con esa mujer me fue completamente imposible.

A decir verdad, no podía protestar demasiado. Claro que no estaba de acuerdo por el hecho de que me resultaba bastante complicado mantener mis parpados abiertos, pero mientras no me obligaran a trabajar en algún bar o restaurante, las cosas no iban del todo mal para mí.

No me malentiendan, no es que no quisiera ayudar con el dinero, pero el solo hecho de pensar en pasar horas cerca de chicas o hablar en público, me hacía sentir enfermo. No era precisamente del tipo que amaba atender a la gente y eso solía ser un tema de controversia cuando la familia estaba reunida porque la interacción es una de las principales funciones de un doctor y si... esa fue la carrera que elegí al momento de pensar en mi futuro.

Bob Esponja se encontraba en el televisor tomando toda mi atención. Si, bueno, ya era algo mayor para esto, ¡pero oigan!, es Bob Esponja. Un poco de programas infantiles no haría daño después de pasar meses metido en libros y tareas.

Cuando me quedaba en Sídney dentro de los cortos periodos de receso de la universidad, despertaba por las mañanas gracias al delicioso olor a café y panqueques preparados por mi madre antes de que se fuera hacia el trabajo. Salía de la cama, tomaba una ducha y bajaba a darle un beso en la mejilla despidiéndome, para después, adentrarme a la cocina e ingerir el delicioso desayuno listo en un plato sobre la barra, sentándome en un taburete, encendiendo la televisión frente a mí y de esa manera sintonizar el canal de música disfrutando el día.

Mientras las horas pasaban, elegía lo que haría por las tardes, a veces salía con mis amigos, otras me sentaba en la cama a tocar guitarra, y en verano, a los chicos y a mí nos gustaba reunirnos en casa de Mason ubicada en Los Ángeles para jugar un poco de fútbol o tocar algunas canciones. Sin embargo, ese año los padres de Mase habían salido de la ciudad por un problema familiar y él se quedaba con su abuela también en Sídney.

—¿Listo Luke? hora de irnos... —Anunció mamá colocándose su abrigo en la puerta con la mejor actitud que podías encontrar en una persona que amaba las mañanas—
—Okay —Llené mis pulmones de aire analizando la habitación, aferrándome a la idea de que hacíamos esto para que mi madre se sintiera más relajada y así sería más fácil llevar a cabo sus actividades— ya voy —Me puse de pie y cogí la pequeña maleta que se encontraba junto al sofá—

Porque si, viviríamos ahí mientras yo regresaba a Londres, ya que a pesar de mi edad, ella aún desconfiaba un poco de mi o más bien, de los problemas que mis amigos y yo solíamos ocasionar.

—¿Llevas todo lo necesario?, no quisiera tener que volver por algún descuido tuyo —La mujer me miró por el rabillo de sus ojos conociendo perfectamente a su hijo y el don que tenía en olvidar las cosas—
—Si si, lo sé... todo está aquí dentro —Señalé la maleta con mis pertenencias— ahora, ¿podemos irnos ya?, quiero dormir, y una vez allá podré hacerlo
—Luke, si te llevo conmigo, es precisamente para que no te la pases de perezoso
—Oye, no hay nada que hacer en ese lugar, ambos lo sabemos, por lo menos nada divertido y es por eso que ansío volver a L.A. con los chicos
—Lo siento cariño —Mamá frotó mi espalda a manera de comprensión, teniendo en cuenta la tristeza tras mis palabras— pero por ahora, cada quien deberá pasar tiempo con sus familias, así que, nada de quejas y a la clínica