Nunca he pensado en mí como una persona atractiva. No soy un muchacho al que todas las chicas volteen a ver con interés sea cual sea el motivo de este, o que tomen como primera opción en una fiesta para charlar. Sin embargo estaba consciente de que tampoco pasaba desapercibido ante la gente, sobre todo para recibir halagos sobre mis ojos o sorpresivamente, mi físico y el lunes había sido el día en que esos halagos me golpearon todo el tiempo que estuve fuera de casa.
Había llevado a Ashley por el helado de nuestra primer cita oficial y lo único que deseaba era disfrutar el momento junto a ella, esperando que se sintiera tranquila, como alguien normal que salía con un chico normal llevando a cabo un plan normal. Ella y yo, pasando el rato, haciéndola reír y besando sus pequeños y bonitos labios en algunas ocasiones. Por el contrario, el destino estaba empeñado en arruinar las cosas a como yo las planeaba sin importar cuento me tardara en ello, ya que desde el momento en que llegamos al lejano establecimiento de helados y bajamos del auto, chica, tras chica, sonrió para mí, unas de manera tímida y otras intencionalmente. Intentaba no darle importancia para que Ashley no se molestara como la vez en que estuvimos en la tienda cerca de casa de Ashton, pero si algo estaba claro desde que conocí a la ojiverde, es el que era lista y se percataba de todo lo que sucedía alrededor.
—¿Siempre será así cuando salgamos de casa? —Preguntó la pelirroja con sus cejas juntas en el centro, llevando una cucharada con nieve a su boca cuando la chica número 6 se acercó con la excusa de tomar algunas servilletas de nuestra mesa—
—Lamento que eso pase, pero de verdad espero que no, es bastante molesto —Afirmé colocando mis manos juntas sobre la mesa ya que había terminado mi helado—
—Sí claro —La escuché decir por lo bajo antes de pasar la lengua por su labio inferior y atraparlo con sus dientes—
—¿Qué? —Entrecerré mis ojos con una media sonrisa pero ella no volteó a verme—
—Como si eso te molestara
—¿Por qué crees que me gusta recibir atención?
— No estoy diciendo que te guste, solo que debes estar acostumbrado a ello y... bueno de alguna manera sí, es parte de tu vida —Continuó comiendo sin alzar la vista—
—Pues te sorprenderá saber que no lo estoy —Atraje hacia mí su barquillo llamando su atención y finalmente haciendo que sus ojos encontraran los míos— simplemente parece que a la vida le gusta ponerme en situaciones incómodas cuando estoy contigo
—¿Si recuerdas que lo he visto yo misma, verdad?
—Por eso digo que sucede cuando estoy contigo —Repetí alzando ambas cejas—
—No tienes que fingir —Puso sus ojos en blanco y entonces la chica número 7, una de las empleadas, caminó frente a nosotros después de recoger algunos platos así como cubiertos de otras mesas—
Su rostro se tornó rosado cuando miró en mi dirección y se acercó para preguntar si necesitábamos algo más a lo cual negué y regalándome una sonrisa, se alejó.
"Esto debe ser una broma"
—¿Dónde quedó aquello de la sinceridad? —Cuestionó Ash llevando el recipiente de vuelta a ella—
—¿Y dónde quedó lo de nada de discusiones? —Contraataqué retirando el helado nuevamente de sus manos—
—No estoy iniciando una pelea —Negó intentando recuperar su casi finalizado postre fallando en ello— Luke...
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(#1) Never Be - Luke Hemmings
Novela JuvenilNo hay peor dolor como aquel que no se puede sentir...