No Todo Se Trata De Las Cartas Kaiba (Yu-gi-oh)

6. "No pudes dar vuelta a la página antes de acabar el capitulo"

Había pasado ya una semana desde su ultimo encuentro, él seguía teniendo problemas con los números de la compañía, ella comenzaba a tener una vida feliz en la ciudad, adoraba trabajar en la tienda de juegos, todos eran amables con ella, cuando tenía la tarde libre se la pasaba con Yugi y sus amigos y claro, tambien invitaba al pequeño Mokuba, aunque sentía que cierto peliblanco buscaba pasar mas tiempo solo con ella. Por otro lado, Kaiba comenzaba a sentirse frustrado, las ganancias de su empresa disminuyeron otro 5 por ciento los últimos días, cansado de esa monotonía decidió ir a despejar su mente para sentirse mejor, llamó a su chofer personal y le pidió que preparará el auto, antes de alistar su portafolios y salir pudo ver en una esquina apoyado contra su escritorio, el paraguas que le dio aquella chica, sin saber el motivo, se quedo observandolo por varios minutos su mente comenzó a recordar esos momentos, ella alejandose hasta perderse en las gotas de lluvia, logró despertar de su trance.

- lo mejor hubiera sido tirarte - agarro el pequeño objeto y se levantó de su silla, camino hasta un pequeño bote de basura y antes de arrojarlo, recordó su mirada, se detuvo, porque se enojaba al ver esta "baratija"? Quizas porque odió el haberlo recibido. Sin pensarlo caminó hasta su auto y lanzó el paraguas al fondo del asiento. 

Un auto negro y lujoso paseaba por las calles mientras uno de sus pasajeros buscaba perderse en sus pensamientos a medida que observaba el paisaje, hizo esto durante todo el recorrido, hasta que un semáforo los detuvo, Seto algo distraido logró ver a lo lejor como una chica caminaba tranquilamente por la calle y entraba a la tienda de juegos Moto, la misma dueña de aquella sombrilla, entonces vio la oportunidad perfecta para deshacerse del "regalo no deseado" .

Le pidio al conductor que estacionara y bajó del vehículo, con esa seriedad que tanto lo caracterizaba, camino hacia la tienda y entró. Al ver todo el lugar descubrio que nadie se encontraba, algo extrañado dio un paso adelante justo cuando alguien salía de la puerta trasera.

- bienvenido a la tienda de juegos puedo ayudarlo en ...Kaiba?

- ...

  Ambos estaban sorprendidos, uno más que el otro, era la cosa que menos esperaban.

- que haces aqui?- le preguntó Anya.
 
- ...veo que olvidaste esto - le contesto Seto mostrandole su paraguas.
 
-...-eso la sorprendió, pensaba que a un niño rico como él no le importaría desecharlo, talves no era tan idiota como ella creía- ah gracias - dijo con una ligera sonrisa.

- trabajas aqui?
 
- si, actualmente estoy viviendo aqui.
 
- ya veo, en fin, adios - se despidió de forma desinteresada, pero apenas dio un par de pasos comenzo a marearse.

  Anya preocupada reaccionó rapidamente y se acerco a él.

- estas bien? - le habló preocupada.

- si, no pasa nada- trato de soltarse de su agarre pero no lo logró.

  - ven, entra para que puedas relajarte - lo guió al interior de la casa y le hizo tomar asiento en un sillón, mientras se dirigía a la cocina.

Seto odió tener esa reacción, para empeorar las cosas ahora sufría de un terrible dolor de cabeza, este era el producto de no haber comido bien ni dormido lo suficiente las ultimas semanas.

Ella regreso con una taza caliente y se la ofreció.

  - toma un poco de esto.

  - que es?

  - un té de hierbas medicinales, te ayudará.

  - no lo quiero.

  - solo tómatelo y no lloriquees.

  Sin poder protestar, bebió toda la taza, sorprendentemente esperaba un sabor horrible.

  - estuviste acaso bajo mucha presión? -le cuestionó la chica y se sentó a su lado.

  - algo así, hay unos malditos papeles que no logro resolver, sin embargo, ese no es asunto tuyo.

  - puedo ver los papeles - pidio ignorando la actitud del castaño.

  Tuvo muchas dudas al respecto, pero vio lo interesada que ella se mostraba, talves eso lo convencio de mostrarselos, o quizas el hecho de sentir la cabeza taladrada. Saco de su maletín un folder lleno de papeles, los separo y se los dio.

Ella comenzaba a leerlos, como si se tratara de una ecuación matemática.

  - aqui tienes, lo mejor es que derives tu marca a productos electrodomésticos para conectarte mejor con la clientela y diversificar el modo de vista de tus proveedores.

  Mentiría si dijera que su cara no se llenó de asombro cuando ella solucionó en 2 minutos el problema que lo preocupo por 2 semanas.

  - como es que tú...

  - cuando era niña, mi padre me enseño a ayudarlo con finanzas y números, a base de eso es facil desarrollar una intuición para el desarrollo de compañias y empresas.

  - de acuerdo. Yo...- debía agradecerle? Eso era patológicamente imposible para él, sin pensarlo dos veces continuó - yo...ya debo irme, adios muchacha.

  - espera, por si no te queda claro, tengo nombre, es Anya. A-N-Y-A genio.

  - si como sea- salio de la casa y dejo un sentimiento dentro de aquella chica, la ira.

  - quien demonios es ese sujeto! Que arrogancia tan testaruda tiene! Ni siquiera puede ser capaz de llamarme por mi nombre! Argh!!

  Antes de seguir insultandolo, se dio cuenta que no serviría de nada, lo mejor era ignorar a ese sujeto.

...

Tres días despues de "solucionar el problema de las ventas, los productos de Kaiba corp. se vendían como pan caliente, las ventas iban tan bien que unas empresas tenían pensado patrocinar y porque no? Aliarse a Kaiba Corp.

Llegarían en una semana, este era un gran paso para la compañia, sin embargo había un problema, Seto Kaiba por primera vez en su maldita vida no sabía que rayos hacer para convencer a su nueva "clientela" de invertir en la corporación, estaba acabado.

Continuara...