Jenna Wright, una mortífaga más. (Harry Potter)

Capítulo 6- Scorpius Malfoy.

Cuando Jenna entró al comedor se ganó varias miradas, en especial de Albus, James y Scorpius. Jenna les hizó una seña a los dos primeros para que notaran que su casa era Slytherin, a lo que Albus sonrió ya que esa era su casa.

Jenna se sentó junto a Albus y pudo ver como Scorpius, que estaba sentado al otro lado de la mesa, la miraba con cierto interes. Luego de la ceremonia de selección, que fue bastante interesante, aparecieron en los platos y copas, comidas y bebidas, la mesa se llenó de ricos dulces, bebidas, comidas, todo lo que te pudieras imaginar.

Al terminar la cena, fueron a la sala común de Slytherin. Era en las mazmorras, bajo el lago. Hacia bastante frío gracias al agua, pero era impresionante. Luego de admirar el lugar por algunas horas, Jenna fue llevada hacia su habitación, una de las últimas. Estaba decorada con varias camas, y cuando ella entró pudo ver a tres chicas sobre el suelo en medio de la habitación.

-Así que esta es la nueva...- una de ellas se levantó, parecía bastante plástica, una rubia de ojos claros, una barbie.

-¿Cómo te llamas?- preguntó otra de las chicas, esta otra tenía el cabello marrón y los ojos grises.

-Jenna...

-¿Apellido?- preguntó la otra, una chica de cabello negro y ojos de igual color.

-Wright- Jenna iba a seguir hablando pero la última chica se acercó.

-Mortífagos.

-¿Si?

-Tu brazo izquierdo- Jenna extendió el brazo izquierdo y las tres plásticas vieron la marca.

-¿Y ustedes cómo se llaman?- preguntó Jenna quitando su brazo.

-Yo Isabella- dijo la primera-, Isabella Jannet.

-Dianne Lorens- dijo la segunda.

-Carrie Edwards- dijo la tercera y se alejó-, y no esta bien visto en mi familia acercarse a mortífagos.

-Y ni pienses que en la mía sí- dijeron las otras dos a coro, luego se alejaron y se sentaron en una de las camas.

Jenna se acercó a la cama que tenía sus pertenencias, se pusó pijama y se acostó a dormir, claro, después de cerrar su baúl y asegurarlo, ya sabía que no podía confiar en nadie.

***

Jenna despertó por un estruendo, el maquillaje de Dianne se había caído. Jenna se levantó y caminó hacia al baño. Al entrar pudo ver a Carrie viéndose en el espejo. La chica la miró con asco y salió.

Jenna se arregló frente al espejo. El uniforme -ahora con el símbolo de Slytherin- le quedaba a la perfección. Al salir pudo notar que las chicas ya no estaban así que se fue al comedor.

Le fue un poco difícil llegar, pero después de pasillos, vueltas y demás, logró llegar cuando el desayuno aún no había acabado.

-Jenn... ¿Por qué tardaste tanto?- le preguntó Albus cuando Jenna se sentó.

-No conozco el castillo...- Jenna tomó unos panqueques y comenzó a comerlos.

-Toma nuestro horario- Albus le entregó un papel-, tu sólo sígueme a todos lados y llegarás.

-Gracias...- susurró Jenna y siguió comiendo.

Pudo sentir bastantes miradas sobre ella, era nueva, pero probablemente la miraban por lo que había dicho Harry, era una veela, y las veelas atraen a los hombres. Albus se levantó y se fue a hablar con unos chicos, Jenna estaba sola, pero sintió tras ella la presencia de alguien

-Jenna...- susurró un chico a su espalda, al voltear pudo ver al rubio.

-Scorpius... ¿Por qué tan...?

-¿Atractivo?- interrumpió el chico.

-Egocéntrico.

-Gracias, preciosa- el rubio se sentó a su lado.

-Aléjate, Malfoy.

-Llámame por mi nombre, cariño.

-Llámame por mi nombre, idiota- Jenna se levantó y salió del comedor, aunque Scorpius la seguía.

-¿A dónde vas?- le gritó Scorpius haciendo que la chica se frenará.

-A pociones- respondió ella.

-Pues vamos- Scorpius la tomó del brazo y caminaron juntos a la clase, después de todo, Scorpius no era tan malo.