Capítulo 6

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Amarrado.

Así amanece el jugador fantasma el día de hoy
Con un bozal en la boca que no le permite decir una sola palabra, con cuerdas por todo su cuerpo apretando su piel de una forma muy incómoda y dolorosa, efectivamente el dulce niño se encontraba desnudo en medio de todo el filamento y Nash yacía delante de él sonriendo como un maldito maniático, puso algunos videos en la cama, escribiendo con marcador el nombre de cada uno de los miembros de la Kiseki no sedai, luego volvió a ver al objeto de sus deseos que esta amordazado completamente... Le jaló las cuerdas para que este cayera al suelo de rodillas e inmediatamente alzo su cabeza susurrando con amenaza mientras manipulaba las cuerdas tal como un juego retorcido, las rodillas raspaban al estar tanto tiempo en esa posición sumisa— Recuerdas cuando puse algunas cámaras y te tome algunas fotos eróticas. Pues aquí hay algunas, los elegí e hice un regalo especialmente para tus queridos idiotas!

El desgraciado se los enseño — Oh si, para el detestable y asqueroso capitán imbécil, el más humillante y sadomasoquista. Todos tienen su temática especial, puedes imaginar su rostro cuando vean esto!

El jugador fantasma deslizo sus ojos para otro lado, pero Nash le agarro la quijada— No te preocupes, cariño. Nadie va a ver tu delicioso material si mantienes esa boca bonita cerrada.

Kuroko asistió desordenadamente con nauseas.

— Bien me voy a bañar. Puedes venir conmigo, las cuerdas podemos mantenerlas un tiempo

El jugador fantasma parecía atrapado, no tenía donde escapar. Nash lo tenía en sus manos.

No deseaba contarle nada a sus amigos, jamás dejaría que nadie viese algo así.

Era viernes

Cuando el jugador fantasma entro a la casa luego de ir a clases, se encontró con una escena chocante... Una mujer con el cabello celeste largo estaba sentada en el regazo de Nash, este la estaba besando y acariciando bajo su ropa como el pervertido que era.

En el instante que el jugador fantasma arribo, la chica no se dio cuenta de su llegada dado era invisible, pero Nash si lo noto de inmediato y apenas le vio beso a la chica con más ganas, mirando directamente a Kuroko como si intentara darle celos o algo por el estilo. Luego añadió— Hermanito, que bueno que has llegado.

—Yo... Me voy para mi cuarto, no quiero interrumpir— dijo incomodo el jugador fantasma, deslizando su mirada al suelo con timidez.

La chica se puso la blusa que estaba tirada y fue a presentarle— Tu debes ser mi cuñado, yo soy la prometida.

—¡No sabía que tenía una! ¡Oh Nash estuviese comprometido! - dijo el jugador fantasma nervioso por aquella escena, sintió que el mago lo había hecho a propósito, era obvio había preparado todo aquello para que le viese besándose con esa mujer que ahora resultaba su ¿prometida?

Odiaba esa situación.

—¿Cómo es que Nash no te hablado de mí? - dijo como una protesta la superficial.

Si esa chica era la prometida y Nash le era infiel con su persona, resultaba igual a su padre ¡Que horrible! No quería ser partícipe de aquello, pero no era como si pudiese rechazar a Nash porque este le golpearía, tampoco podía decirle a la mujer lo que hacía el mago.

—Gusto conocerla señorita, yo ya me iba— dijo huyendo. Eso era extraño, no sabía que Nash tuviera una novia, aunque sí que le gustaban las chicas bien dotadas y aparentemente solo abusaba de su persona para burlarse o para humillarle. Cuando se enfrentó con el bravucón la primera vez estaba rodeado de mujeres y sus amigos también, al mago no le gusto que le reclamara cosas enfrente de ellas probablemente por eso le dio una paliza o simple por atreverse a decirle lo que pensaba, regañarlo.

En la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora