Capítulo 11

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El peli celeste daba la impresión de ser un pequeño niño perdido en medio de la profunda oscuridad, el tigre no es capaz de evitar tener esos fuertes deseos de protegerlo con todas sus fuerzas y es porque siempre que ha visto al jugador fantasma triste, pretende que volviese a sonreír a como dé lugar... Con esa sonrisa que ilumina universos enteros y hace que la vida tenga sentido.

Le mira decaído en un pozo de lágrimas, tan deprimido tal si su mundo se desmoronara lentamente y no hubiese bote salvavidas que le resguarde de la tempestad y todo es culpa de ese maldito hombre extranjero el cual mancho la inocencia de perversidad ¿Cómo se atrevió a hacerle daño al ángel de cabellos celestes?

El aura de la sombra era similar a aquella vez cuando se encontraron por primera vez en medio de una cancha, Tetsuya destilaba angustia y sintió curiosidad, ganas desesperadas de hablarle sin embargo el desconocido misterioso se marchó sin siquiera mirarlo, pero actualmente no seria de esa manera, esta vez se convertiría en un soporte, en una luz tan fuerte que le salve de la penumbra.

Al principio Kuroko era un fantasma invisible el cual comenzó a tomar forma hasta convertirse en la persona más importante del mundo ¿Cómo un ser tan silencioso puede introducirse debajo de tu piel y de tus pensamientos? Un individuo sin presencia que llega a volverse tan fundamental en la existencia de un hombre y revoluciona el alma misma.

Probablemente se tardó demasiado en regresar a Japón principalmente porque estaba abatido como si le hubieran roto el corazón en tantos pedazos que no pudiese volver a juntarlos...No quería presenciar como su sombra andaba con un tipo desconocido, no era capaz de soportarlo Le creyó al desgraciado cuando le dijo esas cosas por teléfono, realmente pensó que su sombra no quería hablarle y le rechazaba por su amor con alguien más

Había sido tan iluso

Debió tomar el primer avión disponible pero tenía miedo, pensó que había perdido a su sombra para siempre

Lo peor es que vivió semanas en aquella angustia de imaginar su vida sin ese niño de los ojos claros que le daba color a su vida e hizo cambiar su universo.

Pensaba en que seguramente estaba feliz en los brazos de alguien más ¿Cómo no odiar esa horrible imagen mental? ¿Cómo podría saber que aquella voz que escucho respondiéndole el teléfono era un mentiroso, manipulador hombre malvado?

Siempre fue una farsa.

Fue tan miserable cuando Himuro le conto sobre el casamiento, creyendo que Kuroko amaba a Nash Gold Jr, frustrado y preocupado porque su sombra se casaría con ese hombre ruin; sabía que la Kiseki no Sedai estaba igual de enojada con esa situación espantosa y sufriendo al respecto.

Nash preparo un teatro tan bueno que todos se creyeron aquella invención, cayeron directo en su trampa.

Su hermano había sido claro, le había dicho que debía regresar lo más rápido posible porque la generación de los milagros se encontraba devastada mejor dicho completamente destruida por aquella noticia... Entonces supo que no podía perder a la sombra, debían luchar por el! Aunque tuviese que enfrentarse al mago o al mundo entero
Lo convencería de no casarse

Era un error el haber desistido tan pronto, las cosas serían diferente si se hubiese enfrentado al problema en vez de ignorarlo tanto tiempo.

Tomo el primer avión decidido a impedir la supuesta boda o hacer que la sombra cambiara aquel razonamiento, aunque las personas enamoradas son demasiado tercas y muy ciegas probablemente el chico solo pensaría en que estaba celoso igualmente ¡Le diría sobre su sentir, que no se casara!

Dudaba que el mago pudiese hacerlo tan feliz como él.

Que sorpresa resulto

La ironía de darse cuenta de que aquel casamiento era más que ficción, un ardid para que Nash pudiera atormentar y torturar a la Kiseki no Sedai, verlos retorciéndose del dolor; lo consiguio al final, tenia a la sombra donde lo quería en su cama y a los otros sufriendo por ello.

En la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora