Todo Cambió.

Capítulo Tres

3 de abril, 2016

Claritssa.

Estoy en la cafetería de la universidad con Breana y Rayan hablando sobre salir una noche de estas a una discoteca que inauguraron hace poco, pero, de repente me doy cuenta que me están observando, mi cuerpo reacciona inmediatamente y me doy cuenta que es Tyler quien me observa. Decido no mirarlo porque no sé qué pueda pasar y lo mejor es no hacerle entender que yo sé que me está mirando. Continúo hablando con mis amigos, pero ellos se dan cuenta de que no les estoy prestando mucha atención porque mi mente en este momento está en Tyler.

- ¿Estás bien Claritssa? – me pregunta Breana.

- Sí, estoy bien. – pero es mentira, lo único que hago es pensar en Tyler y en las reacciones que mi cuerpo tiene al saber que está cerca.

- ¿Él te está molestando? – me pregunta Rayan que por lo visto se dio cuenta de que Tyler no deja de verme.

- No. – y es la verdad – sólo hablamos el día que tropezamos y sólo fue un hola – y la loca cosa que pasó con la reacción de nuestros cuerpos evite decir.

- Ten cuenta con él Claritssa, andan muchos rumores sobre él y los de su grupo. Créeme que no querrás saber las cosas que dicen que ellos hacen y han hecho. - ¡Vaya! ¿Qué tan malo puede ser este chico? Sacudo mi cabeza y le sigo prestando atención a mis amigos y me olvido de Tyler.

- A veces no es siempre cierto lo que las personas rumoran...

- Créeme que es cierto. – es todo lo que Rayan se limitó a decir.

***

10 de mayo, 2016

Acabo de salir de mi clase de contabilidad I, voy de camino a la biblioteca ya tengo que estudiar de contabilidad I y prefiero hacerlo aquí porque si lo dejo para estudiar en la casa me pongo a hacer otras cosas y se me va el tiempo y al final no estudio nada.

Voy en busca del libro y al principio no lo encontraba, pero gracias al cielo doy con el libro después de pedirle ayuda a uno de los chicos que trabajan en la biblioteca. Voy en busca de un asiento, pero no hay, todas las mesas están llenas. Continúo buscando un asiento y ¿qué creen? Sólo hay uno y es al lado de Tyler. El día no podía ir peor al parecer.

Él se da cuenta de mi presencia y de que lo estoy observando, levanta la mirada y se queda observándome, mira alrededor y se da cuenta de que el único asiento libre que hay es al lado de él. Me da una de sus sonrisas hermosas, quita su mochila de la silla y continúa leyendo en su libro. Al quitar su mochila de la silla fue una indirecta de que me podía sentar y la verdad es que no me quedaba de otra.

- Hola, ¿Está ocupado este asiento? – le pregunto algo tímida. Sabía que no podía estar ocupado ya que él mismo me dio una indirecta de que me podía sentar.

- No, puedes sentarte si gustas. – vuelve a darme esa sonrisa y regresa su vista al libro.

Me siento y trato de olvidar que él está sentado a mi lado, pero no puedo, mi cuerpo me está traicionando. No sé qué es lo que me está pasando con este chico. Ojalá se desocupe otro asiento para irme lejos de él. Debo enfocarme en lo que debo estudiar para el parcial y no en que él está a mi lado.

Pasan 2 horas y no puedo concentrarme. He llegado a un tema algo complejo que me tiene con muchas dudas, sé que no paro de fruncir el ceño. Tyler lleva 30 minutos hablando por el celular y no deja que me pueda concentrar y la verdad ya no aguanto.

- Disculpa, puedes hablar un poco más bajo o vete para el baño a hablar por teléfono, no dejas que me concentre. Recuerda que estas en la biblioteca no en el patio donde puedes hablar por celular libremente – todo lo que hace es reír y eso hace que frunza aún más el ceño.

- Hasta que explotaste, mira – me muestra su celular y me doy cuenta de que no está hablando con nadie, que sólo lo estaba haciendo para molestarme.

- Eres un idiota – es todo lo que le digo antes de pararme del asiento, prefiero sentarme en el patio a estudiar que tener que aguantar a este idiota.

- No te vayas – me toma de la mano haciendo que no pueda terminar de recoger mis cosas para irme.