Todo Cambió.

Capítulo Quince

15 de septiembre, 2016.

Claritssa.

Voy saliendo de mi clase de Matemática Financiera cuando siento mi celular vibrar en mi bolsillo, lo saco y me doy cuenta de que tengo llamadas perdidas de Alec, no sé cuándo es que va a entender que no quiero volver a saber de él nunca en mi vida. Justo cuando voy a guardar el celular vibra de nuevo anunciándome un mensaje.

Alec: Claritssa, cariño, tenemos que hablar, por favor atiende a mis llamadas, necesitamos hablar, estoy muy arrepentido y quisiera explicarte algunas cosas, por favor. Te amo.

Será idiota, no sé en qué mente cabe que voy a querer hablar con él después de semejante traición, sé que estarán pensando que soy la menos indicada para juzgarlo ya que yo me había besado con Tyler, pero me arrepentí y no volvió a pasar.

Pero Alec y Nicole tal parece que tenían tiempo revolcándose a mis espaldas y me da tanta rabia, nunca pensé que fueran capaces de hacerme algo así, me lo podía esperar de cualquier persona menos de ellos.

- ¿Por qué tan enojada preciosa? – preguntan cerca de mis odios, lo cual hace que se me erice la piel porque sé perfectamente quién es que está detrás de mí.

- ¡Hola! – le dije dándole un abrazo.

- ¿Me dirás por qué estas enojada? – me vuelve a preguntar acomodando un mechón de cabello detrás de mí odio.

- No es nada Tyler, de verdad – no me creía del todo, pero no volvió a preguntar lo cual le agradecí.

Empezamos a caminar, no sabía a dónde íbamos, iba tan sumergida en mis pensamientos que no me estaba dando cuenta de que Tyler me estaba hablando, hasta que se paró delante de mí con cara de preocupación.

- Claritssa, preciosa, ¿estás bien? – pregunta preocupado.

- Sí, estoy bien. Sólo me quedé pensando en algunas cosas.

- Okay, te estaba preguntando que, si quieres salir esta noche conmigo, no sé, al cine o a cenar. ¿Qué dices?

- ¡Claro! – le dije entusiasmada, tenía que salir un rato y despejar mi mente, dejar de pensar en Alec y en Nicole.

- Pasaré por ti a las 8, ¿Está bien a esa hora?

- Claro.

***

Faltaban 5 minutos para las 8. Me vi por última vez en el espejo, decidí ir algo sencilla, pero bonita, una falta azul y una blusilla de color un poco más claro que el azul de la falda y unas zapatillas.

Escuché que tocaban la puerta y supe que ya Tyler había llegado, estaba algo nerviosa, era la primera vez que salía con él a cenar.

Abrí la puerta y me quedé sin aliento en cuanto lo vi. Y al parecer yo no fui la única que se quedó sin habla, él me veía fijamente y sus ojos se habían oscurecido.

- Estas hermosa – él fue el primero en hablar, yo no encontraba el habla todavía.

- Tú tampoco andas mal – fue lo único que pudo salir de mi garganta.

- ¿Nos vamos? – me preguntó, yo sólo asentí con la cabeza, me tendió su mano y la acepté.