Capítulo 11.

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Grupo: "El Grupo De Jane"

David: ¿Me extrañaron?

Emily: ¿Qué demonios?, ¿David?

David: El mismo que arrojó el auto hacia ti y Carlos, pero por lo que leo, no murieron.

Emily: Poco a poco nos recuperamos.

Carlos: ¡Maldición esto no puede estar pasando!

Cat: Primero Jane, ahora tú.

Nat: Creo que esta vez no saldremos vivos chicos.

Pablo: No digas eso Nat, podremos contra ellos.

Vicky: ¿Quién es David?

Jane: Mi pareja de matanza, salúdenlo nuevos.

David: ¿Nuevos?

Jane: Si, estos tontos me trajeron de vuelta, ahora serán mis nuevas víctimas.

Gabriel: No, por favor no.

Alex: David es el chico que fue acusado por los asesinatos que Jane cometió.

Amber: Creí que David odiaba a Jane.

David: Eso fue antes, ahora trabajamos juntos.

Pablo: ¡Oh por Dios! Esto no puede pasar.

Emily: Debemos buscar a la bruja cuanto antes, no quiero morir a manos de David.

Alex: Ese imbécil no puede contra nosotros.

Cat: ¡Cállate imbécil, David es un fantasma!

Alex: ¿Qué demonios? ¿Dos fantasmas contra nosotros?

Gabriel: Maldita Lizbeth, ella nos metió en esto.

Cat: Chicos.

Pablo: ¿Qué pasa, Cat?

Cat: Creo que encontré a la bruja que puede ayudarnos.

Nat: Guarda silencio Cat, no puedes decirlo por aquí.

Jane: Ya que puedo enterarme, gracias por el dato Cat, será mejor que me dé prisa y maté a esa estúpida bruja.

Cat: ¡Oh no!

David: Cat, durante mi estadía en el infierno, tuve tiempo de practicar mi puntería y créeme, ahora puedo darle a tu frente.

Vicky: ¡Dios!, ¿Ahora qué haremos?

Cat: Intentar sobrevivir, apoyándonos unos a otros, lo conseguiremos.

Fuera del grupo.

Jane y David se miraban mutuamente, ellos aún se encontraban en la tienda de brujería de Gladys, donde observaban todo a su alrededor.

—¿A quién mataremos juntos? —preguntó Jane, acercándose a David.

—No lo sé, primero quiero saber si puedo traer de nuevo a Alison.

—¡Dime que es una maldita broma!

—No lo es, yo quiero que ella regrese.

David caminó hasta la ouija, se colocó en el suelo y colocó su dedo en la plancha de la ouija, cerrando los ojos le indicó a Jane que tomara asiento junto a él.

—Espíritus del más allá, ¿Alison está allí? —preguntó David abriendo los ojos.

La plancha no se movió en lo más mínimo, por lo que Jane se soltó riendo, mientras se ponía de pie y miraba a David.

—Eliges a Alison, en vez de a mí, cuando yo te ayude en tus miserables días en prisión.

—Sólo quiero verla una última vez, despedirme de ella —susurró David angustiado.

—Iré a buscar a esa bruja, si quieres ir conmigo, no vuelvas a mencionar a Alison —Jane lo observó con odio, para luego esfumarse.

David dio un último vistazo hacia la ouija y se esfumó de igual manera que Jane, dejando en completa soledad la tienda de brujería.

***

Cat y Nat se encontraban sentadas en el sofá de la casa de Carlos, quien había salido a comprar una pizza junto a Emily y Pablo.

—¿Segura que encontraste la bruja que nos ayudará? —preguntó Nat confundida.

—Si, lo tengo anotado en mi celular, mañana mismo vamos con ella.

—Me alegra tanto escuchar eso, por un momento creí que moriríamos esta vez —sonrió Nat, prendiendo la televisión.

Cat se puso de pie y caminó hasta la cocina, donde tomó una bolsa de palomitas de la alacena y las colocó en el microondas para prepararlas.

—¡Nat!, ¿Sabes cuantos minutos se les pone a las palomitas? —gritó Cat fuertemente.

—¡No lo sé, ponle cuatro! —gritó Nat, cambiando de canal.

Cat colocó los cuatro minutos que le había dicho Nat y cerró el microondas, caminó hasta el bote de basura, echando la envoltura de la bolsa en ella.

—¡Nat! —gritó Cat, dirigiéndose a la puerta de la cocina.

Antes de llegar a la puerta, Cat quedó sorprendida dando pasos hacia atrás, al ver a Jane y David, de pie frente a ella.

—¿Qué pasa, Cat? —preguntó Nat, poniéndose de pie.

Ella rápido al ver a Jane y David en la puerta de la cocina, se lanzó al suelo asustada y arrastrándose se dirigió a la ventana más cercana.

—¡Nat!, ¡Ayuda! —gritó Cat inútilmente, pues Nat se preparaba para abandonarla.

—Lo siento mucho Cat, pero no quiero morir —dijo Nat y salió por la ventana, corriendo lejos de la casa.

Jane y David comenzaron a reír, pues ellos se habían dado cuenta que Nat abandonó a la indefensa Cat, dejándola sola con ellos.

—¿Qué quieren? —preguntó Cat asustada.

—No te mataremos, tan sólo queremos que nos digas, ¿Donde encontramos a la bruja? —preguntó David confundido.

—Dinos —sonrió Jane emocionada.

Cat tan sólo los observaba con miedo en su cuerpo, en un movimiento que hizo, tomó una botella de agua bendita y se las lanzó a los dos fantasmas, quedando sorprendida al ver que no obtuvieron ningún daño.

—¿Qué demonios? —gritó Cat, intentando correr a la puerta.

David y Jane hicieron un movimiento con sus manos y elevaron a Cat en el aire, quien comenzó a llorar.

—No, por favor, no me maten —dijo ella, para luego caer al suelo de golpe.

Ella se levantó adolorida e intentó nuevamente lanzarles agua bendita a los dos, pero resultó inútil, nada parecía dañarlos.

—Vaya Cat, tengo que admitir que eres muy valiente —sonrió Jane, tomándola del cuello.

—No, no, no —decía Cat con dificultad.

—Terminemos con esto de una vez por todas —añadió David, tomando un cuchillo de un cajón.

—Jane, no, por favor —dijo Cat con dificultad.

David sin pensarlo dos veces, incrusto el cuchillo en el estómago de Cat, quien soltó un fuerte grito de dolor, Jane la soltó y ella cayó al suelo de golpe.

—Mírala, es una pequeña sobreviviente.

David y Jane se miraban sorprendidos al ver a Cat arrastrándose, intentando llegar a la puerta de la cocina.

—Aún no hemos terminado Cat —dijo Jane y caminó hasta ella.

La tomó del cuello y la levantó en el aire, Cat intentaba inútilmente respirar, hasta que David le dio un fuerte golpe en el estómago, lo cual ocasionó que la cabeza se desprendiera del cuerpo.

—Vaya David, me impresionas —sonrió Jane, dándole un beso a David.

Los dos fueron interrumpidos por el sonido que hace el microondas, al terminar el tiempo colocado, ellos se miraron entre sí y sonrieron grandemente.

Jane abrió el microondas y sacó las palomitas, mientras que David, colocaba la cabeza de Cat allí dentro, colocando dos minutos en el cronómetro.

El Grupo De Jane 2 - El RegresoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora