- Declaración de guerra pacífica -

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— ¿Qué tal una linterna? ¡Le será útil si se va la luz! — propuso Toddy

— Toddy, la luz dejo de irse hace ya sesenta años atrás desde que se tomaron medios alternativos, es completamente inútil una linterna — contrataque

— ¿Un juego de mesa?

— Ni el abuelo de la abuela de mi tía abuela usa tal cosa, es super anticuado

— ¿Un celular?

— Clásico

— ¿Tú virginidad?

— ¡Toddy!

— ¿Que? A los chicos les encanta las vírgenes

— Yo... ¡Arhg! ¡Solo continuemos pensando!

— Perdona, pero no puedo pensar en tu problema y el mío a la vez

— ¿Problema? ¿Cuál es tu problema que es más serio que el mío?

— ¿Qué debo ponerme? ¡Todo es tan fuera de época! — me mostró un montón de ropa colgada en ganchos, pero en eso me quedé pensativo. Toddy tenía razón, moda le iba con la época no la celebración. Me levanté mostrando una sonrisa segura y mucha determinación

— ¡Iremos al súper centro del sector bosque ocho! — mi prima dejo caer todo para mirarme con impresión, dió un salto ansiosa mientras aplaudía y chillaba;

— ¡Al súper centro! ¡Súper centro! — corea emocionada —. ¡Un momento! — detuvo su canto de victoria para verme dudosa —. ¿Cómo vamos a ir? — me pregunta extrañada

— En tren, por supuesto — aseguré —. Es imposible reservar un boleto de avión a estas alturas y me mareo en los barcos — dije sintiendo un temblor

— ¡Iuck! ¡Pero tendremos que ir de pie! ¡De pie!

— Es eso, o llevar un regalo miserable y ropa de la temporada pasada — por su rostro de indignación y su mueca de horror supuse que no me cuestionaría más, por ello prosegui —. Saldremos mañana temprano, como mucho debemos estar de pie a las ocho para salir a las nueve y evita la hora pico — planifique, a lo que ella asiente

— Nos vemos en la mañana —

Así fue, no pude ni parpadear cuando Toddy ya me arrastraba fuera de la cama. Sujeta mi talón mientras me arrastra por el suelo del pasillo

— Toddy, amo tu entusiasmo — ironise —, pero llevarme como escoba por la casa no es precisamente mi estilo — hablé, ella se detiene soltando mi tobillo

— Con esas puntas abiertas, no dudes que tú cabello es el idóneo para limpiar la casa — puntualizó señalando mi cabeza, yo solté una exclamación

— ¡Tu me arrebataste mi look! ¡¿O lo olvidas?!

— ¡Pero si estás divis divis!

— ¡Ja! — me crucé de brazos frunciendo el entrecejo

— ¿Es que me lo niegas?

— Te ves mejor así

— Lo que sea — me levanté irritado —.Voy al baño, mientras tú arregla tus cosas que ya sabes que tardas años — me fui trotando al baño, creo que hasta me acostumbré al rosa de las cortinas y la pasta de dientes con aromas tropicales, pero odio ese maldito jabón con aromas que o me dan hambre o me dan ganas de arrancarme la nariz. Me lave, me peine, orine, me cepille, lave mis manos y tome casi la mitad del frasco de pastillas. Hola nuevo y mierdero día nuevo, Freddy Fazbear te saluda con un "vete a la mierda" muy cordial

- Biblioteca - [Golden×Freddy] [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora