//4

3.7K 358 45
                                    

Tal vez habían transcurrido horas en esta habitación de cuatro paredes, donde el viento seguía entrando, se escuchaba el tic-tac del reloj que estaba colgando en la pared de color blanco de la habitación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Tal vez habían transcurrido horas en esta habitación de cuatro paredes, donde el viento seguía entrando, se escuchaba el tic-tac del reloj que estaba colgando en la pared de color blanco de la habitación. El chico parecía no querer hablar en ese momento, sus ojos estaban puestos en mí, donde parpadeaba solo en algunas ocasiones, como si meditara algo. Después de lo que pareció una eternidad sus labios al fin dijeron algunas palabras.

--¿Está completamente segura de que quieres desperdiciar tu dinero en solo hablar? –

--Si, es mi dinero a fin de cuentas se lo que hago con el –

--Esta bien, como tú lo has dicho, es tu dinero – asintió y se recargo en la silla. – Esta bien, cumpliré lo que me pides, seré tu amigo por hoy, adelante, te escucharé –

Me acomode mejor en la cama, arrastrando mi cuerpo hasta recargar mi espalda en el respaldo de la cama, acomode una de las almohadas en mi regazo, poniendo mis manos unidas ahí, me quite mis zapatos.

--Dijiste que nada de nombres, pero será algo difícil, te pondré uno, ¿Te molesta eso? – lo mire.

--Puedes hacer lo que quieras, adelante – asentí, pensando en algún nombre adecuado para él.

Su piel blanca parecía brillar a pesar de la tela que cubría la mayor parte de su cuerpo y ese pantalón negro de vestir pulcramente planchado. No parecía ser mucho mayor de veinte y pico, tal vez más joven, su voz sonaba tan dulce y suave, como un arrullo nocturno.

--No se me ocurre ninguno, esta bien así, hare un esfuerzo por no pedirte tu nombre – el chico asintió. –No se por dónde comenzar – mencione con una pequeña sonrisa.

--Tranquila, puedes empezar por el principio –

--Claro, veamos, hace algunos meses yo me enamore de alguien, resulto que no era lo que yo pensaba. ¿Sabes? Yo soñé y desee que fuera ese amor que dicen que dura para siempre, yo estaba segura de que era él, algunas personas me decían que no era una buena persona, que él me lastimaría, yo no quise hacer caso a nadie, estaba enamorada. Y al final, ellos tenían razón, esa persona no era buena – mire a la nada, sintiendo ese nudo en la garganta y ese dolor característico en mi pecho. – Mi familia cambio después de eso, mi hermana se había ido tiempo atrás a América, donde ella estudia, mis padres no supieron como manejar la situación, así que todo el tiempo discuten –

--Te sientes sola—hablo él.

Lo mire, no porque me hubiera molestado el que hablara y me interrumpiera, sino porque había acertado. Si, me sentía sola, nadie parecía escucharme de verdad, solo hablaban y decían lo que según yo, sentía.

--Si, me siento demasiado sola, ellos... ellos no son malos ¿Sabes?, pero quisiera que a veces dejaran de pelear y me pusieran un poco mas de atención, que entendieran que el mundo no terminara, porque yo estoy... bien... --

Un sollozo inundo la habitación. ¿De quien era? Se escuchaba desgarrador, un sollozo que fue seguido por unos cuantos más y después de un llanto tan doloroso que me hacia doler el pecho. ¿De quien era ese llanto tan doloroso?

Unas pequeñas gotas cayeron en mis manos, ¿Eran mías? ¿Las lagrimas que estaban cayendo eran mías? ¿El llanto que se escuchaba en esa habitación tan silenciosa eran mías?

Al parecer si, ya que, al mirar a ese chico, sus ojos eran de pena y de preocupación, sus labios estaban apretados y sus manos hechas puño estaban en su regazo.

--Lo siento – me disculpe mientras tallaba mis ojos casi con fuerza para borrar esas lágrimas.

--Tranquila, no pasa nada, puedes sacar todo lo que tienes dentro de ti, no guardes nada, eso te hace mal – sus palabras eran dulces, tanto que hicieron efecto en mí. – A veces las personas necesitamos llorar de ves en cuando para sacar todo lo que sentíamos, no es bueno guardarnos nada, ¿Por qué decir que estas bien cuando en verdad no lo estás? Si tus padres no te escuchan, solo enfréntalos, si es necesario, grita, grita para que te escuchen –

-- Ellos suelen ser demasiado protectores, tanto que asustan a veces, se echan la culpa, pero no es así, la única culpable soy yo, yo por no escucharlos cuando me decían que esa persona no era buena para mí, cuando más de una vez me advirtieron – seguí llorando.

Él me regalo una sonrisa, una preciosa sonrisa torcida.

--Somos humanos, equivocarnos es normal para poder crecer, ¿Pero sabes qué? Nosotros aprendemos de nuestros propios errores, esta en nuestras manos poder levantarnos y superar eso, no te culpes por algo que a cualquiera podría pasarle, si, cometiste un error, pero ¿Quién no lo a cometido en su vida? –

Tenia razón, lo sabía, varias veces mi subconsciente me día que yo no tenia la culpa de nada, que esa persona si que la tenía, pero me sentía tan mal conmigo misma que me echaba la culpa de todo. De los pleitos seguidos que tenían mis padres cuando yo no quería salir de mi habitación.

Llore, llore tanto que sentía que tal vez podría secarme, pero no me importo. Se sentía tan bien poder sacar todo lo que estaba llevando mi corazón, sentía como mis hombros descansaban un poco, como mi atormentado corazón se calmaba un poco.

Mis ojos empezaron a pesar, era algo normal después de llorar tanto, no pude aguantarlo mas y caí dormida. Dormí como no lo había hecho después de lo que había pasado. 

Butterfly [Park Jimin] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora