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Los días habían pasado y yo había mantenido el contacto con ese chico con nombre desconocido, sí, él no me había dado su nombre

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Los días habían pasado y yo había mantenido el contacto con ese chico con nombre desconocido, sí, él no me había dado su nombre. Había dicho que ya había roto una de sus reglas, quería tratar de tener las dos que le quedaban a salvo.

Cuando no quedábamos, ambos nos andábamos mensajes. Eran triviales, pero para mí, llenos de significado. Mis padres habían peleado menos estos últimos días. Me sentía un poco mejor, las pesadillas oscuras ya no me atormentaban tanto. Podía dormir cinco horas seguido sin despertar gritando y llena de sudor.

La ultima vez que vi a ese chico, casi lo obligué a que tomara el dinero. Al principio no quería, decía que no tenia sentido que lo tomara cuando no había hecho nada. Fue una discusión que, claro, yo gané.

El sonido de mi teléfono me sacó de mis pensamientos. Miré hacia la mesita de noche donde había estado todo éste tiempo. Yo había estado leyendo uno de mis libros favoritos.

El sonido insistente me hizo chasquear mi lengua, era mi hermana.

- Terminarás de descomponer mi teléfono con tus llamadas insistentes - hable mientras me recargarba en el respaldo de la silla.

- "Sí, yo también te amo hermanita" - pude casi ver como ella rodaba sus ojos. - "¿Sabes? No es bonito que tu pequeña hermana te conteste de esta manera" -

- ¿Entonces cual es la manera correcta? - apoyé mi codo en el escritorio.

- "La mejor manera es que grites un '¡te extraño hermana!' Algo así " -

-Sí,  claro, mejor dime para que hablabas, estaba algo ocupada - medio sonreí un poco.

- "¿Sigues leyendo?" -

- Sí,  terminé el otro y ahora sigo con el siguiente, pero es menos el tiempo que invierto para leer - mordí mi labio inferior un poco.

- "Bien, y dime Eliza, ¿como están las cosas en casa? Ayer hable en la noche pero nadie contestó, dejé un mensaje y nadie me devolvió la llamada "-

Sonaba algo molesta pero después suspiró.

- Lo siento, yo estaba en la habitación y no escuché, papá y mamá... ellos salieron a cenar por primera vez desde hace casi tres meses - rocorde como ellos se habían despedido de mí antes de salir a cenar.

- " Eso es bueno, supongo, eso te deja con más tiempo para ti, sin preocupaciones" - mi hermana guardó silencio por unos segundos y después siguió. - "Eliza, tú... ¿hablaste? Quiero decir, ¿te animaste a llamar? "-

Yo también guarde silencio por unos segundos, poniéndome completamente roja. Sentía vergüenza por solo haberme dado cuenta de que había aceptado algo que ella me había ofrecido. Sentía vergüenza de que, a pesar de yo haber dicho todo eso, termine haciéndolo. Claro, nada obsceno.

- Yo... bueno... fue solo por curiosidad-

Pude escuchar un chillido proviniendo del otro lado del aparato.

- "¿Que cosa es curiosidad? Mujer, aceptaste, dime, ¿como fue? Cuéntame detalles "- podía sentir se exitacion y su emoción cruzar la bocina.

Suspire algo cansada.

Empecé a contarle las cosas, ella al principio se mostro realmente sorprendida y me había dicho algo como "Desperdiciaste el dinero" pero después ella hablo más calmada y hasta con voz dulce.

- "Si, eso suena mucho a ti, pero me alegro de que al menos tuviste iniciativa, no importa si fue para algo mas o solo hablar, al menos hiciste algo que tu querías" – mi hermana sonaba orgullosa, claro, después de reprocharme por el dinero.

-Si nuestros padres se enteran de esto, estoy segura de que te desheredaran – sonreí.

- "Ja, Ja, que graciosa, Eliza, y dime, ¿ese chico se porto bien contigo? "

-Ya te lo dije, él me escuchó atento y me aconsejo, era... lindo – admití, recordando lo poco que se podía ver de su rostro.

- "Esta bien, supongo que estoy satisfecha, Eliza, me tengo que ir así que hablamos luego, salúdame a nuestros padres y diles que me devuelvan las llamadas" – se quejó un poco.

-Claro, cuídate mucho –

Me despedí de ella y después colgué. Había sido reconfortante escucharla y que ella me escuchara. Me sentía mucho mejor ahora, me sentía un poco más... ¿Cómo decirlo? Plena.

Mire mi teléfono por unos minutos más, pensando en si llamar o no, tenia ganas de hablar con él y comentarle que había hablado con mi hermana, que ella no se había enojado por gastar su dinero de esa forma, porque claro, ella no se enojó, era claro que solo bromeaba. Inhale y exhale profundo, y marque su número.

1... 2... 3...

- "¿Hola?" –

Escuche su voz algo dudosa, más bien sorprendido.

-Hola, soy yo... ¿Sabes? Me preguntaba si... tenias tiempo para vernos más tarde – hubo un silencio del otro lado por segundo y después contesto.

- "Claro, solo que podría un poco más tarde, como a eso de las nueve, ¿No tienes problemas con tus padres?" –

Me callé, me quede muda sobre eso. Claro que tendría problemas sobre eso, si él me decía que era mas tarde, era que estaría incluso a horas altas de la noche fuera de casa, por primera vez. Nunca había hecho eso, incluso cuando... paso, aquello.

-Creo que intentare decir algo convincente, pero estaré ahí, no te preocupes –

- "Entonces nos vemos donde siempre, nos vemos más tarde" –

Colgó de inmediato. Supuse que él estaba "trabajando" cosa que me incomodo de solo imaginarme que cosa hacía. Tenia que hacer algo, pensar en algo, seria muy tarde para cuando yo llegara, pero ¿Y si mi salía sin decir nada? Tenia una oportunidad, ellos se dormían a las diez, pero sabían que me encerraba en mi habitación para las ocho, y ya no vendrían a molestar, hasta la mañana siguiente, puedo escaparme por la ventana.

Si, eso hare.

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Ésto se esta prendiendo hermosas personitas. Se que el capítulo esta algo flojo, pero ya pronto empezará lo bueno, lo prometo.

Butterfly [Park Jimin] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora