¿Qué Puedo Perder?

906 70 3
                                    

Mientras conducía escuchaba que mi celular no dejaba de vibrar, durante el camino lo había puesto en silencio pero eso no detenía el hecho de que vibrara.

Una lágrima salió y no sé como, o porque pero ahí se encontraba recorriendo mi mejilla hasta llegar a la mezclilla de mi pantalón.

-Demonios, Alex. Es toda tuya- Y después de eso ya no volví a pensar en nada de lo que estaba a mi alrededor.

Todo era Alex y Chloe; para ser sincera creo que hasta me puse a planear su boda.

¿Se puede?

Pensar que yo quería a mi primo como a un hermano, que idiota soy, soy una hija de mi madre.... por no decir otra cosa, no quiero seguir viviendo así, no quiero seguir viviendo en la vida que me enamoré de alguien y la estoy peleando, la estoy tratando como a un objeto y así no debe de ser.

Ella es una persona y a ninguna persona se le debe de tratar como un objeto.

Ni siquiera a ella.

Cierro mis ojos y me pongo a pensar en que tal vez la cortada me la merezco, el que me quiten a Chloe me lo merezco.

¿Por qué?

Simple, no la traté como debí hacerlo; en aceptar esa flor, hablarle con delicadeza, no hacerla sentir menos.

Pero no lo hice y ahora sufro las consecuencias.

¿Y si desde un principio ellos estaban destinados?

Y yo era la persona que necesitaba aparecer en sus vidas para que pudieran conocerse.

Piénsenlo.

Ya estaba predicho....

¡Rayos!  ¿En qué rayos estoy pensando?

Y esta es una de tantas razones de las cuales odio enamorarme, sin amor no estaría pensando en nada de esto.

Con mucha pereza entre a mi departamento y a solo unos pasos me encontraría con el espejo de cuerpo completo que tenía, justo en el cual me miré antes de irme.

-Te ves encantadora- Guiñé mi ojo y me giré con dirección a mi habitación.

Un movimiento mal y terminé lastimándome sin querer la cortada.

-¡Aaaahh que la canción!- Miré mi mano mientras caminaba y al ver mi cama me dejé caer en ella.

Se sentía tan bien el descansar.

Me encontraba boca abajo y sin ganas de moverme.

Me quedé dormida sin saber en que momento sucedió.

Al despertar no quería nada, pero no pude evitar notar que había despertado justo como me había quedado dormida, eso era raro pues normalmente me da mucho frío en la noche y esta vez ninguno cabello moví.

No tenía ganas de levantarme, ni siquiera de moverme para cambiar de posición.

Se escuchó que alguien tocaba la puerta y yo solo gruñí.

Tal vez si no me muevo se vayan, normalmente eso pasa. Son como osos.

-¡Beca!- Esa era la voz de Stacie.

Solo me quedé inmóvil. Pero luego con una extraña energía me levanté y me recargué en la puerta.

-¡Sé que estás ahí dentro, está tu auto afuera!- Seguía tocando la puerta.

De repente el respirar se me dificultaba ya que al inhalar aire me daba un fuerte dolor en el pecho, como si hubiera agarrado aire... o yo que sé pero se sentía horrible.

Mientras me aguantaba el dolor Stacie seguía tocando la puerta.

Yo me fui a la cocina por un vaso de agua y al darme la vuelta Stacie se encontraba parada de brazos cruzados.

-¿Cómo entraste?- Me asomé para ver la puerta y todo se veía bien.

-Un mago jamás revela sus secretos. ¿Qué le pasa a tu voz? Se escucha muy rara-

-Es porque lo... está- Cerré mis ojos por el dolor de pecho.

-Te Fuiste anoche, todos te gritábamos como locos pero no hacías caso...- Mientras ella contaba yo la miraba como muerto viviente, mi mano en mi pecho y exhalando por la boca.-¿Estás bien?- Pregunta preocupada.

-¿Qué quieres Stacie?- Dije sin cambiar de posición.

-Saber si estás bien. ¿Cómo está tu mano?-

-Vuelve en otra ocasión- Me acerque a ella y la fui empujando a la puerta principal.

-Estás enamorada de Chloe- Esa no había sido ninguna pregunta, ella lo había gritado y afirmando.

-¿Qué?- Puse cara Extrañada y dejé de pensar en todo tipo de dolor que estaba presenciando.

-Es evidente, Beca- Dijo con tono de obviedad.

-No, espera... ¿de dónde sacas eso?-

-Lo puedo notar, e incluso ella también...-La interrumpí.

-No, wow... deténte justo ahí. A mi no ms gusta nadie y yo no le gusto, no nos gustamos y todos vivimos felices- Hago movimientos con mis manos.

-Solo piénsalo, Beca-

-¿Pensar qué, Stacie? Esto no requiere nada de pensar. Solo somos dos personas que nos conocimos y ya. Ese es el principio y el fin, no se requiere pensar, la lógica ya está ahí-

-Ella se quedó muy preocupada por ti anoche, te llamó pero tú nunca respondiste- Fue bajando el tono de voz, al igual como si estuviera contando una tragedia.

-Pues cuando la mires dile que estoy bien- La fui acercando más a la puerta.

-Eso no depende de mi Beca. Con decirte de que hasta lloró toda la noche pensando en que era lo que había hecho mal- Eso me había sorprendido.

-Tu amiga está más mal que yo así que te sugiero que la vayas a ver a ella y no a mi- Le dije sonriendo.

-Ella está con Aubrey, estará bien. Y más tarde irá Alex- Con eso mi ira había vuelto inesperadamente.

-Entonces estará bien ¿no? Ya tendrá a su príncipe azul a su lado- Mi tono de voz había cambiado.

-Y ahí está de nuevo- Me mira desafiante.

-¿Qué cosa?- Negué con la cabeza.

-La pizca de celos que estaba desde... déjame pensar... ¿la fiesta?- Se puso pensativa.

-¿De que estás hablando?- Me reí por su comentario.

-Beca, estás enamorada de Chloe, admítelo ya de una maldita vez, tus celos no pasan desapercibidos en lo absoluto, cada que la miras o la recuerdas se puede notar un brillo en tus ojos, vamos solo dilo- Se comenzaba a desesperar y se le podía notar.

-¿De dónde sacaste eso, de un libro?- Ladeé un poco la cabeza y con eso fue suficiente para ver explotar a Stacie.

-¡BECA EFFIN MITCHELL!- Grita llevándose sus manos a la cabeza.

-Esa soy yo- Levanté mi mano.

-Espero y pronto te des cuenta de lo horrible que se siente guardar ese sentimiento, terminarás explotando enana- Con eso sale del apartamento.

Me deja pensando en lo que había dicho, y no se equivoca, si ayer me corté con un cuchillo ¿qué será después?

Pero si me permiten dar una idea, creo que alejarme de ese sentimiento será lo mejor, ¿no?

¿Qué podría pasar?

Solo tengo que alejarme de esos sentimientos, eso si, no será fácil. ¿Qué pierdo al intentar?

Nada.

Amor De Verdad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora