Dans deux monde

Capítulo 11

Patch me llevo al Pacobi y me sentó en el asiento de copiloto, luego el subió y manejo hasta mi casa.

Al llegar nos dimos cuenta de que no había nadie, todo estaba tal y como lo había dejado, Patch tenía razón, mama no había llegado, porque si lo hubiera hecho hubiera arreglado al menos un poco el desastre que había hecho de mi casa.

- Nora, ten cuidado o te lastimaras la otra pierna...

- Espera... ¿Cómo sabes que es mi pierna la que me duele?

- Yo... - titubeo.

- Porque según a lo que a mi concierne, no te mencione lo de la pierna, solo lo del dolor...- mi mirada lo hizo hablar.

- Nora, en todo el camino vi que movías tu pierna disimuladamente para que yo no me diera cuenta. – así que se había dado cuenta, claro que no le iba a decir que mi pierna estaba lastimada, no quería preocuparlo además cada instante mientras lo movía o ejercitaba el dolor era soportable y disminuía constantemente, << ¿Para qué preocuparlo si el dolor estaba pasando de a pocos? >>

- O sea que no funcionó lo de ser disimulada. – admití.

- Debes practicar mas ¿No lo crees? – una sonrisa pícara asomaba su rostro.

- En realidad, no te dije porque no quería que una vez más te preocuparas por mí.

- Quiero que te grabes de memoria lo que te voy a decir: "Yo, siempre estaré preocupado por ti"

- Pero no es necesario...

- Siempre...

- Bueno, si es tu decisión... creo que no seré capaz de hacerte cambiar de opinión ¿verdad? – dije dando vuelta para empezar a dirigirme a las escaleras.

- En eso tienes toda la razón... - me extendió una mano para ayudarme a subir las escaleras

- Patch, si no fuera mucho pedir... quiero intentarlo sola... - levanto las manos en símbolo de derrota.

- Como tú quieras.

- Gracias... - me apoye de la baranda y empecé a subir de un pie, había logrado avanzar unos 5 escalones sin zarandear, cuando iba por el sexto escalón me balancee hacia atrás y fue cuando Patch me sostuvo de la espalda.

- Mejor te llevo yo... - me cargo una vez más.

- ¡No Patch, quiero intentar! – grite haciendo que se detenga, pude ver una sonrisa formarse en la comisura de su boca.

- Mmm... déjame ver... no, no dejare que lo hagas. – dijo y continúo subiendo.

- ¿Disfrutas del momento? - pregunte histérica al notar con más claridad su sonrisa.

- Un poco...

- ¿Un poco? – enarque una ceja.

- Vale, vale, si disfruto el momento, y mucho.

- Bájame... - dije forcejeando.

- Nora, ¿acaso quieres que me caiga y luego te lastimes aún más?

- No...

- Entonces deja de moverte y de forcejear.

- A veces eres tan irritante... - dije entre dientes.

- ¿Qué dijiste?

- Nada...

- A bueno, me pareció escuchar algo...

- Entonces escuchaste mal...

- Eso parece – dijo entrando a mi habitación, la puerta estaba juntada, Patch empujo la puerta con su pie, al ingresar me recostó en mi cama.