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— ¿Ocurre algo?.— Preguntó el azabache viéndolo fijamente a los ojos miel del pequeño que solo se limitaba a ignorar.— TaeHyung...

— No me pasa nada, sólo quiero ir a mi casa....— Hizo una pequeña pausa.— Verdad, no tengo casa, ni familia, ni amigos

— Hey, tranquilo. Me tienes a mi.— Sonrió y le revolvió un poco su cabello castaño.— Quizás intente darte un hogar.

— ¿Qué?

— Ya lo dije pequeño, no te preocupes. Primero debemos examinarte bien para ver si estas apto para que te den de alta.— El azabache lo miró de reojo a su pequeño acompañante mientras el menor solo lo miraba con un pequeño brillo en sus ojos dando a entender que aceptaba la oferta de el mayor.

Su mayor sueño era salir de ahí para siempre, llevaba casi 10 años encerrado en ese cuarto de cuatro paredes color blanco, cuando era el "recreo" siempre estaba en una esquina de aquel infierno al que se le podía decir hogar. Era muy lindo lo que le ofrecía JungKook, formar parte de un hogar desconocido pero en que sabría que estaría bien, TaeHyung no dijo nada aún no podía confiar demasiado en su "doctor" pero era su única salida de ese lugar que lo atormentaba cada día y hora.

- ¿Qué dices Taehyung? 

Silencio

- Tae, necesito una respuesta para sacarte de aquí y puedas llevar el tratamiento desde casa.

- Acepto

- ¿De verdad?.— Pasó una mano por su cabello desordenado haciéndolo sonreír, TaeHyung podía ser el "Niño Rebelde" pero también podía ser el niño amable que nadie conocía.

Jungkook sólo sonrió al ver las mejillas de TaeHyung tornarse de un color carmín ante tal tacto, se veía tan indefenso y sumiso para decir. Cuando la salida del mencionado llegó pudo ver en la mirada de TaeHyung una pequeño vacío, cerró la puerta y se dirigió a su departamento sin antes pasar por un autoservicio comprando algunas cosas para cuando llegue su nuevo inquilino.

— No, no, no —anduvo despacio por el lugar hasta entrar al pequeño pasillo de jugos—, no y tú si.

Tomó un paquete de cuatro y antes de tomar otro dudó viendo al lado unos jugos multifruta en los stands.

—Refresco para mi, juguito para Tae —dijo tomando cuatro de estos y luego fue caminando hasta la caja para pagar por los refrescos y las cajas de jugo.

Llegó el día en el que tendría a su lindo Kim TaeHyung con él, estar emocionado quedaba corto y pequeño. Corría de un lado a otro preguntándose como lo trataría, lo cuidaría, etc, pero su verdadera preocupación era su reacción al saber que ya no estaría. Por una parte estaría feliz y por otra triste...










¿hola c:?
desaparecí demasiado tiempo y lo sé, pido perdón por eso. Mi mamá descubrió mis historias aquí y pues 😫 me quitó el celular por un largo tiempo;-; pero ya me lo devolvió gracias a mi papá 😃 y pues tal vez actualice más seguido. Sorry por el capitulo kk.

.—디니에

Abandoned Baby Bullied [KV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora