Nuestros Días [HETALIA]

Aquél Viaje Mágico 6/?

Viéndolo de este modo...estaba asustado
nunca había estado en esa situación, siempre leyó libros sobre el tema pero jamás creyó estar por fin en esa ocasión, historias donde haces el amor a quien amas, donde no hay más que dos almas entregándose enteramente uno al otro, si volvía atrás en el tiempo siempre vio su vida sexual con desgane, poco interesada, solo lo hacía para satisfacer una necesidad fisiológica y ya, pero ahora estaba seguro de que haría el amor. Feliciano le miraba con el sonrojo hasta las orejas cubriendo su cuerpo con la toalla que tenía, pero desde el fondo gustaba de estar con él disfrutando del momento, se acerco hasta la orilla de la cama donde yacía el chico que amaba y que ahora se entregaba a él:

- ¿Tienes miedo?

- Solo...estoy nervioso

- si no estás seguro lo entenderé

- No... Yo quiero hacerlo

- De acuerdo

No es que no supiera comenzar, lo hizo con una chica hace años pero ahora daba la casualidad de que era un chico a quien miraba desde la orilla de la cama, estaba algo frío así que por instinto le pidió que se acercara y este obedeció, le abrazó tiernamente para hallar ese calor que necesitaba, Feliciano estaba recargado en su hombro y eso aumentaba la cercanía, podía sentir sus latidos y eran rápidos, estaba sumido en su cabeza metódica buscando el siguiente paso, iba tan sumergido que no se dio cuenta de que Feliciano se sentó en su regazo, una pierna en cada lado y ahora con la toalla solo cubriendo su intimidad, le miraba con esos ojos miel que parecían hipnotizarle, Feliciano movía su cadera hacia adelante y hacia atrás, un juego provocativo y algo torpe, Ludwig se lamió los labios y se acercó para besarle con ánimo.

Ahora una beso francés les tenía ocupados, ambas lenguas se buscaban y Ludwig hacía que Feliciano gimiera, Ludwig parecía cómodo que se fue dejando caer sobre la cama hasta que el italiano quedó sobre él, podía sentir su miembro erecto aún bajo la toalla el cuál rogaba por algo de atención, estaba agarrando ese calor de excitación que buscaba y no dejaría que se le fuera. Continúo aquel beso ahora recorriendo el cuerpo ajeno con sus manos, llegando hasta la cadera y sus glúteos, Feliciano se estremeció por el tacto y los sonidos eróticos de su voz emergían con libertad, su aire se acababa así que debían volver a tierra así que se alejaron de a poco, su respiración estaba fuera de lo normal, se sentía en el séptimo cielo a merced de los brazos de su alemán, estaba dudando ya que no tenían demasiado saliendo, podía arrepentirse después puesto que en ese momento quería llegar a las estrellas de cualquier forma, así que no espero más y se incorporó quedando sentado sobre el cuerpo de Ludwig quien aún llevaba sus pantalones intactos, sus manos de artista recorrían sus muslos y abdomen estimulando su zona sensible, funcionaba ya que en pocos minutos Ludwig se sentía sofocado al hallar atrapado su pene en sus pantalones, estaba duro y dolía no conseguir liberarse, necesitaba tomar el control pronto así que invirtió sus posiciones; ahora el dominaba su cuerpo

-Feliciano...

-¿Lud?

Ludwig se levantó de su posición para retirarse la camisa semi abierta y los pantalones junto con los interiores negros, Feliciano miraba la escena logrando estimularse un poco al ver el cuerpo de Adonis que tenía, en especial aquel pene duro e igual de ansioso que el suyo, estaba desnudo así que apartó la toalla que tenía ahora sin barreras de prenda que impidiesen un encuentro digno. Feliciano se recostó sobre la cama, estando desnudo sentía que sus sentidos estaban al cien, podía oler el aroma de las sábanas, sentir su suavidad y podía percatarse de lo pequeña que era, Ludwig esperaba una señal que indicase que podía comenzar y fueron los brazos abiertos de Feliciano quienes le invitaban a acercarse
No tardó mucho para hallarse atrapado entre sus brazos, sus pieles se sentían por primera vez, Ludwig movió su mano hasta atrapar el miembro de Feliciano el cual al sentirla soltó un gemido glutural, en realidad se sentía bien estar atrapado en esas manos, masturbó con lentamente para conocer reacciones del italiano, eran las que esperaba de su boca no paraban de salir gemidos y un hilo de saliva, su miembro comenzó a gotear en señal de querer venirse así que dejó de tocarlo: