• UNHOLY •《Kookjin》[FINALIZADA]

Capítulo 2

Creía que no podía sentirse peor que cuando Jungkook estaba alrededor, siendo todos sonrisas o silencios largos. Pero sí que podía ser peor, y eso era cuando Jungkook no estaba alrededor.

En cuanto la empresa nos dejó tomar nuestras vacaciones, el castaño había armado su valija y casi que corrió rumbo al aeropuerto. Nadie se puedo comunicar con él, porque su teléfono estaba como desconectado, y el vacío que lo siguió los días siguientes, parecía asfixiarlo.

—Ya va a llamar. Seguro está bien.

Yoongi le aseguraba, mientras trabaja en algo del siguiente álbum en su computadora. Era ya una rutina, él le decía palabras tranquilizadoras, y Jin solo asentía y aceptaba que así iba a ser.

Pero no estaba tranquilo. Y no creía que el menor iba a llamar pronto.

Por lo que al tercer día desde que Jungkook dejó el departamento, juntó coraje y llamó a Seyeon. Tardó tres tonos hasta que la voz vivaracha de la mujer lo atendió.

—Buenas tardes, Seyeon-ssi. Soy Kim Seokjin.

—Oh, Jinnie. —habló la mujer, en tono informal y dulce. —Qué sorpresa.

—Lo siento por molestarla, es que hace días que Jungkook salió de casa y no se ha contactado con ninguno de nosotros. Y tampoco con la empresa.

—Puedes llamar siempre que quieras, cariño. —le asegura amablemente —Pero lamentablemente no sé nada de Kookie tampoco. No me ha llamado, y la última vez que hablamos fue la semana pasada. Creí que se encontraba en Seúl...

Él suelta un suspiro desganado. Seyeon era su última y única posibilidad de conocer el paradero del menor.

—Bueno, muchas gracias por decirme. Lamento molestar.

—Si me llama, voy a decirle que se ponga en contacto contigo. Es un niño estúpido, ¿cómo se va a ir sin decirle a nadie? ¿vive solo acaso? ¿se manda solo? —despotrica la madre de Jungkook, haciéndolo reír.

—Gracias, con saber que está bien es más que suficiente.

—Eres un sol, Jinnie-ah. Gracias por querer tanto a mi pequeño idiota.

Él se ríe un poco más, y tras unas cuantas formalidades se despide de Seyeon.

— ¿Su madre tampoco sabe dónde está?

Jin niega ante la pregunta de Yoongi, abatido.

—Cuando vuelva a casa, voy a darle un golpe por ser tan irresponsable. Irse sin celular, cómo un prófugo de la ley. Es la cosa más idiota que ha hecho.

—Esto va a dar un poco de miedo, pero en este momento, suenas como la madre de Jungkook.

—Cierra la boca, Kim Seokjin. Y vamos a tomar algo, con o sin Jungkook, deberíamos seguir saliendo. Pero eso sí, trata de no ponerte como una cuba.

Jin salta emocionado de su cama, y corre al baño a prepararse para salir. Se arregla más que otras veces, vistiendo todo de negro, con pantalones ajustados y una remera manga larga, y sobre esta una chaqueta de cuero negro.

— ¿Piensas salir a ligar por ahí?

—Voy a intentar que no te enamores de mí, Min Yoongi. Pero va a ser difícil, soy muy guapo.

—Lo que eres, es un dolor de culo. —dice el otro, tomando un sweater azul, y pasándolo por su cabeza, despeinándose un poco. —Taehyung va a venir con nosotros, así que evita todo tu drama de quinceañera.

—Eres un estúpido.

—Me amas, ahora sal. Y trae tu mugrosa billetera, siento que si vuelvo a pagar por ti, vamos a estar casados oficialmente.