Jazmín volvió a su casa con el mismo gesto durante todo el trayecto.
Al llegar se dio cuenta que hacía mucho no sonreía tanto. Había algo familiar en ello ¿Qué le estaba pasando?
Entró y dejó todo su equipo de lluvia al lado de la puerta.
Subió a su cuarto y se recostó en su cama para dejar vagar ante sus ojos a sus pensamientos.
Y como si fuese una película reproduciéndose frente a sus ojos, aparecía ella. Flor.
Sus gestos, su sonrisa, su voz. Su forma de moverse, su pestañeo lento. Su perfume floral. La suavidad de sus manos.
Todo eso había quedado grabado en su mente.
Volvía a recordar cada segundo que pasó con ella y cayó en la realidad de que hacía mucho no sentía esa calidez. Empezó a sentir nostalgia.
Desde que llegó a esa pequeña ciudad solo se había hecho tres amigos. Pero no era lo mismo. Con ellos no había sentido esa familiaridad, esas ganas de pertenecer, de quedarse.
Se frotó los ojos para intentar frenar esa película y agradeció que su teléfono empezara a sonar."Hola Miru... Estoy en casa... Dale, te veo en una hora."
Cortó y se levantó inmediatamente. Quizás ver a su amiga le haría despejar su mente.
El día había mejorado por lo que las amigas aprovecharon para salir a navegar.
Miranda abría dos botellas pequeñas de cerveza mientras Jazmín subía con ella a la parte superior de la embarcación, luego de asegurarse de haberla amarrado bien."Tomá Jaz. Están a temperatura ideal. Increíble este día, pensé que el plan iba a ser encerrarnos a ver películas."
Jazmín miraba distraída hacia el agua "Sí. No era un mal plan igual."
Miranda se recostó sobre una colchoneta y empezó a narrarle los pormenores de su relación con Federico, quien también era amigo de Jazmín. Le contaba sobre los planes del fin de semana juntos, de cómo Federico casi quema la cena, de la ropa que se había comprado. Pero en el medio del relato notó que su amiga ya no le prestaba atención, tenía su mirada perdida y decidió comprobarlo cambiándole de tema.
"Y entonces escuché que ahora las costas están llenas de tiburones. Pero no cualquiera, de tiburones que vuelan."
"Ahá. Qué bueno."
Miranda le tiró un pequeño almohadón en la cara.
Jazmín volvió en sí, quejándose "¡Ey! ¿Qué hacés?"
"Te estoy hablando y no me escuchás."
"Sí te estoy escuchando."
"A ver ¿Qué te dije recién?"
Jazmín pensó unos segundos. Cayó en la cuenta de que no había prestado nada de atención al relato. Cuando su amiga estaba por lanzarle un segundo almohadón, extendió la mano para frenarla.
"Es que hablás mucho. Me pierdo."
"Jazmín. Sos la persona más despierta de todo este lugar. Por algo sos mi amiga. Y a pesar de que no nos conocemos mucho y no me contás casi nada de "tu vida pasada", veo que hoy estás distinta. ¿Qué te pasó el finde?"
Intentando disimular "Nada. Estuve en casa. Ayer fui a surfear un rato y después descansé."
Miranda la miraba desconfiada "Mmmm sabés que no te creo. ¿Y por qué tenés esa cara de embobada?"
Ahora Miranda era quien recibía un almohadón en su cara.
"Es la misma de siempre."
"No te creo."
"No me creas."
Se quedaron unos segundos en silencio. Miranda no insistía en conocer a Jazmín en profundidad. Desde el momento en que la conoció, surfeando juntas, supo que Jazmín traía un pasado del cual no quería hablar y lo respetó. Eso hizo ganar la confianza de Jazmín, que poco a poco fue soltándose y dándole algo de información. Miranda era la única amiga mujer que tenía y existía cierta complicidad, distinta a la que tenía con sus otros dos amigos varones.
Sabía que Miranda no preguntaba por curiosidad sino que realmente le importaba, así que inhaló y largó algo de información."Hoy... conocí a alguien."
Miranda se sorprendió y le hizo un gesto con la mano para que siguiera hablando "Conociste a alguien y...?"
Jazmín resopló. Le costaba mucho hablar "conocí a alguien... a alguien que no me puedo sacar de la cabeza."
Miranda aplaudió y chocó sus botellas "¡Al fin Jazmín se abre con la gente! Igual soy tu primer amiga y tengo prioridad. Pero contame ¿Quién es? ¿Cómo se llama? ¿Qué hace? ¿Es lindo? Altura, ojos, pelo. ¡Contame todo!"
El terreno era cada vez más pantanoso, pero Jazmín ya había abierto la boca y debía continuar. Por eso y porque sentía que si no lo hablaba con alguien, su cabeza iba a explotar.
La miró a los ojos y juntó coraje."Es... linda"
Miranda no se sorprendió y la continuó mirando.
"Miru. Yo..."
Miranda le soltó muy relajada "Te gustan las minas."
Ahora era Jazmín la sorprendida "¿Qué?"
"Eso. Que te gustan las mujeres."
"¿Y vos como sabés?"
Miranda se señaló la nariz "Olfato. Yo sé todo. Además vi como me mirabas con ganas varias veces."
Segundo almohadón en la cara de Miranda "Jamás. Sos hermosa pero nunca te miré con esos ojos. No sos mi tipo. Pero ¿por qué me preguntaste si era lindo y no linda, si ya sabías?"
Miranda se tocó el pecho simulando estar dolida "me rompiste el corazón. Yo pensé que algún día me ibas a declarar tu amor. Bueno. No te lo pregunté directo porque te respeto. Vos tenés tus tiempos y no te iba a presionar. ¿Me querés contar todo ahora?"
"Bueno. Todo no. Dejame ser reservada en algunas cosas. Solo te voy a contar que fui a desayunar hoy al bar de la costa, el que está en las afueras."
"Las Violetas. Así se llama."
"Bueno. A ese. Y cuando entré la vi dibujando. Encontré una excusa y me senté con ella. Terminamos desayunando juntas, me contó mucho de su vida. Y después cuando me fui, quedamos en volver a vernos."
Miranda saltaba en su lugar aplaudiendo "¡Qué emoción! Pero pará. ¿Vos le preguntaste si ella...?"
"¿Si le gustan más mujeres? No. No es algo que se pregunta."
"Tenés olfato como yo."
"Tampoco. Yo no sé si le gustan o no. Pero a mí me gustó ella. Me gustó tanto que no pienso en otra cosa desde que la vi."
"¿Cuándo se ven de nuevo?"
"No lo sé. No tiene celular así que quedamos en volver a vernos en ese bar alguna mañana."
"Jazmín. Yo te digo una cosa. Vos a partir de ahora desayunás todos los días en ese lugar."
Jazmín se reía de la postura seria de su amiga "no lo sé. En principio iré mañana y veré."
Miranda la abrazó "Me pone muy contenta. Al fin te empiezo a conocer. Y me gusta más esta Jazmín que la que me decía 'no quiero hablar de eso' o miraba para otro lado."
Jazmín no podía estar más agradecida de la amiga que había hecho. Para eso sí tenía buen olfato.
"Solo te voy a preguntar algo. ¿Te lastimaron mucho antes, que decidís no hablar de tu pasado y empezaste de cero acá? ¿Fue una mujer?"
Jazmín le sonrió apenada. Era mucho "Miru. No quiero hablar de eso."
Y Miranda la entendió. No la iba a presionar. Ya era feliz por ver a su amiga con ese brillo en los ojos.
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Como si fuera la primera vez - Flozmin
FanfictionEs la historia de una olvidadiza Jazmín y de una incesante Flor que hará todo lo posible para que recuerde. Inspirada en la película homónima, aunque con varias (muchas) modificaciones.