Since then we've been history (Kellin Quinn) FINALIZADA.

Capítulo 9:

Capitulo 9: 

Desayunamos y como cada lunes volví a trabajar.

– Buenos días – me saludó Matty.

– ¡Hola! – saludé animada.

Matty y yo nos llevábamos como antes. No quería estropear nada, además nos veíamos todos los días. Después de una hora trabajando apareció Kellin, no me sorprendió que viniera lo que me sorprendió fue que entrara con una chica cogida el brazo. Eso hizo que algo dentro de mi se removiera.

– ¿Otra vez trayendo citas? – dije Matty cuando Kellin, dejando a la chica en la mesa vino a pedir.

– Más bien me ha obligado a venir. Hola Neus. – me saludó sonriente.

– Hola – dije seria y volví a mi trabajo.

Veía como Kellin hablaba con esa chica y ella no paraba de intentar ligar con él, le cogía del brazo, le daba de comer, tocaba sus brazos… No podía apartar la mirada de ellos mientras trabajaba.

– ¡Kellin hazme caso y deja de mirarle el culo a la camarera! – Oí de fondo y me giré hacia él.

Vi como Kellin se aguantó una risa y yo me ruboricé. Kellin me guiño un ojo y la chica se quejó de nuevo, golpeándolo.

– Tu dirás que no hay nada entre vosotros pero Kellin no te ha quitado ojo de encima en todo este rato – me dijo Matty.

– Solo quiere acostarse conmigo – respondí.

– Yo no estaría tan seguro. Nunca había visto a Kellin mirar así a una chica.

– ¿Así como? – me interesé.

– Con cara de enamorado – rió.

– Que tonterías…

Eso era totalmente imposible. Kellin me demostraba cada día como solo quería llevarme a la cama y nada más. Teníamos una apuesta, solo jugaba conmigo.

Vi la chica que estaba con Kellin marcharse enfadada. Fui hacia la mesa de este para recoger los platos.

– ¿Qué le ha pasado a tu chica? – le pregunté cuando llegué.

– Se ha puesto celosa.

– Vaya, lo siento – ironicé.

– Es tu culpa por llevar un uniforme con falda tan sexy. Pero tampoco me importa, no quería nada con ella.

– ¿Soy yo o últimamente has dejado de tener citas? – dije curiosa.

– Tienes razón… – dijo pensando. – He perdido el interés en ellas.

– Eso es porque tienes un especial interés por otra – dijo Matty que pasaba por nuestro lado.

 – Si, quizás tienes razón – contestó Kellin guiñándome un ojo.

Tonterías… Me di la vuelta sin contestar y volví a mi trabajo. Kellin se despidió y se fue para ensayar con esos chicos del concierto.

En cuanto Kellin me tuviera me dejaría y volvería a ser el estúpido de siempre. Quizás podría tener a este Kellin si no me acostaba con él… Eso es imposible, se cansaría de mi por no darle lo que quiere como… ¿Qué hago pensando en ese estúpido? En fin… Kellin no puede querer nada conmigo que no sea sexual.

La semana pasó sin mucha interrupción hasta el jueves.

– Neus, espera – me dijo el coordinador de mi escuela. – Tenemos esta carta para ti.