Since then we've been history (Kellin Quinn) FINALIZADA.

Capítulo 16:

Capitulo 16:

Desperté gracias a un fuerte dolor de cabeza además estaba algo mareada. Intenté levantarme pero me dolía todo. Hice el esfuerzo de nuevo y me senté en la cama.

No había ningún ruido así que supuse que Kellin dormía.

Salí de la cama y me di cuenta que llevaba una camiseta de Kellin y no llevaba pantalones. Hice el esfuerzo de pensar por qué pero no me acordaba. Lo dejé estar y fui hacia la ducha, aprecié que olía a alcohol.

Abrí el grifo y me sumergí bajo el agua intentando recordar algo de la noche anterior pero fue en vano.

Cuando salí Kellin ya estaba levantado y desayunando.

– Buenos días, ¿cómo estás?

– Horrible, ¿me explicas por qué? – me senté a su lado.

– Se llama resaca.

– ¿Resaca? La resaca es cuando bebes.

– Muy hábil. Que me estés hablando tranquilamente implica que no te acuerdas de lo que paso ayer.

– N… ¿Qué paso ayer? – dije asustada.

– Haz el esfuerzo de recordar señorita.

– Espera… pero, ¿cómo me emborraché?

– Fue un poco por culpa de Gabe y los demás – dijo y se fue a su habitación.

Estaba bastante confusa y odiaba no acordarme de nada.

– ¡Explícamelo! – le grite.

– No puedo, tengo ensayo.

– ¡Hazme un resumen!

– Si te lo digo yo – dijo volviendo al comedor, ya vestido – morirás de vergüenza.

– ¿Pero qué…?

– Me voy, hasta dentro de un par de horas – dijo con una sonrisa y se fue por la puerta.

Me tiré en el sofá intentando pensar. Me esforcé bastante pero no recordé nada. Se me ocurrió una idea.

– ¿Matty? – dije con el teléfono a mi oído.

– Dime preciosa.

– Eh… No recuerdo nada de ayer… ¿Me lo explicas?

– Pobrecita – rió. – Bueno no fue nada raro – empezó – bebiste por culpa de Gabe, Kellin te salvó de que un chico guapo ligara contigo, bebiste, fuiste a bailar con Gabe, bebiste y… – se quedó pensando – y luego os fuisteis tu y Kellin, ¿Por qué lo preguntas?

– ¿Solo eso?

– Si.

– Vale, gracias… ¿Cómo es que tú te acuerdas? ¿No estabas borracho?

– Si lo estaba pero con el tiempo te acostumbras – rió.

– Madre mía… bueno, cuelgo, hasta luego.

– Adiós – dijo animado y colgó.

Poco a poco recordé lo que Matty me había contado pero si solo es eso… ¿de qué habla Kellin? Si no paso nada en la fiesta entonces paso… ¿aquí?

Me levanté del sofá, sentándome, y lo miré. Maldita sea… me había acordado. 

Cuando Kellin volvió evité su mirada, avergonzada.

– Veo que te has acordado – rió. – Tranquila no haré ningún comentario.

– Gracias – dije seria pero no podía aguantar el silencio. – ¡Fue tu culpa! – dije de pronto.