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Hoy me he levantado con ganas de hacer algo de ejercicio y decidí  al gimnasio.

Me hago una coleta, me coloco el top y los pantalones cortos deportivos y mis zapatillas.

Necesitaba despejarme de todo y que menos que hacer ejercicio.

No tarde mucho en bajar hasta el coche y llegar al gimnasio.

Al entrar, Carla la recepcionista se sorprendió al verme.

—¡Pero como tú por aquí! Ya te echaba de menos-ella exclama.

— Me me fue a vivir a otro sitio- digo sonriente.

— Bueno, que te vaya bien hoy y espero verte más a menudo- me sonríe con una de sus grandes sonrisas.

Asiento y entro dentro del gimnasio, hoy es lunes por la mañana y tengo mi día libre ya que no tengo ningún reportaje de fotos hasta dentro de dos días, al ser diario el gimnasio está un tanto vacío.

En los vestuarios dejó mi bolsa y cojo el móvil con los auriculares y me dirijo a comprar una botella de agua.

Al terminar me en dirijo a las cintas de correr, correr es uno de mis hobbies favoritos.

No llevaba ni 3 km cuando alguien se coloca en la cinta de al lado, ignoro a la persona y sigo corriendo.

Cuando llegó a los 4 km me siento algo cansada y mi rodilla está algo resentida hoy, debí estirar antes así que decidí parar poco a poco.

En cuanto me bajo alzó la vista y veo a un chico de ojos oscuros y pelo rojizo que me llama mucho la atención.

Este me mira y me sonríe.

Sigue corriendo y me dirijo  hacia la zona de estiramientos y empiezo a estirar mis piernas poco a poco al ritmo de mi música.

Al rato siento que me quitan un auricular de la oreja y me levanto despacio, notó su respiración en mi nuca, me giro y es el chico de la cinta.

—Holita- dice y le doy una sonrisa —Siento si te he asustado- dice riéndose.

Asiento y le sonrió.

—Soy Eric, encantado - se presenta y me da la mano.

—Encantada Eric, yo soy Kailyn ¿te apuntas a estirar un rato? - propongo.

—Si, claro si por supuesto- le notaba algo divertido, se le veía adorable.

Le dedico una gran sonrisa a la cual me respondió con otra de más amplitud.

Después de estirar decidimos ir a hacer algo de brazo.

Él me iba comentando su progreso, sus ejercicios diarios, a él de verdad le gustaba esto, a mi tan solo me gustaba como hobbie, como forma de pasar el rato...

Eric era muy agradable, llevaba viviendo en Los Ángeles un par de años ya que él era nativo de Irlanda y se vino aquí a vivir con su novio, que trabajaba como entrenador personal aquí en el gym pero hoy tenía trabajo afuera.

I broke it | SW | (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora