Satanás miraba desde una cierta distancia a aleyda, seguia igual que hacía 3 mil eones de años
- Me pregunto si los Príncipes habran cambiado - pensó mirando directamente el suelo.
- Hermano mayor, deberias prestar atención y no ignorar esto, los mellizos por fin estan juntos después de años de espera - se acercó lucifer con el ceño fruncido.
- Tu sabes que yo no los acepto, necesito que me demuestren que son dignos y no son como los demas humanos; Estupidos y egoístas - contesto de mala gana Satanás.
Siempre que hablaban de los Príncipes, terminaban muy mal, casi siempre acababa en sangre.
Aleyda miraba con temor a los reyes del infierno, tenía en una de sus manos el sello de portales por si las cosas se ponian intensas.
- No sabemos por que hades no a aparecido, ni siquiera cuales son sus intenciones - prosiguió Satanás.
- Es obvio que solo quiere destruir a sus hijos - contesto el peliblanco.
- No creo que solo sea por eso, las veces que han muerto y han revivido son 7...¿Para que matarlos 7 veces en diferentes vidas? - satanás miraba a los demas, tratando de que alguno tuviera respuestas...Pero nadie entendía a hades, ni tampoco sabían cual era su propósito.
- Tenemos que ir al mundo humano, fin de la discusión - Lucifer muy pocas veces iba en contra de las desiciones de satanás, pero ahora se trataba de sus Príncipes y no dejaría que se repitiera la historia.
- Tch, como quieras - acepto satanás.
Los demas Ángeles miraban con asombró al hombre pelirrojo, era increíble el hecho de que aceptará rápidamente y aleyda no podia estar mas feliz, ya casi estaban todos los que deberían ayudar a protejer a sus Príncipes.
Ahora solo quedaba regresar a la tierra.
°°°
- Si las miradas son tristes, los corazones rotos, las esperezans mueren...Por que hay mucha muerte - la melodía era triste y un poco terrorífica, el ambiente era muy escalofriante y humedo, los gritos se escuchaban por todos lados y el olor a carne quemada inundaba el lugar.- Mi señor, ¿Cuando piensa actuar? - preguntó un joven de piel blanca y cabellos negros, sus ojos no se podian apreciar al igual que su rostro, gracias a la capucha que cargaba.
- Muy pronto, ibiki. Necesitó que mis hijos fortalezcan sus lazos de hermanos para que cuando llegue el momento, sean sacrificados y el sello se destruya - contesto el aparentemente joven hombre sobre el trono.
Sus brillantes ojos rojos y los cuernos en su cabeza acompañados del cabello azabache lacio y corto hasta el cuello daban a entender que el era el rey del segundo inframundo: El dios de la calamidad, Hades.
- Entendido, mi señor - el sirviente desapareció entre la niebla que se esparcia en el lugar.
- Mis niños...Mis adorados niños....Hinami - hades susurro lo último con dolor.
°°°
Mientras en la academia zero huía de sus fans, iba muy metido en su papel de corredor del maratón que no se fijó cuando entró en la residencia nocturna, trataba por todos los medios de no ser alcanzado y saltó hacia los arbustos escondiéndose de los chicos y chicas que lo perseguían.
- Ocultandote, kiryuu-kun - la suave voz de takuma lo tomó por sorpresa que casi deja escapar un grito.
- Maldición ichijou, casi haces que me descubran - reclamo el cazador - ¿Que haces aquí? -

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Mi otra mitad
RandomDespues de la partida de los hermanos/prometidos kuran, zero quedo solo. Por las noches al dormir, sueños tenia, podia divisar a una niña de cabellos plateados, piel blanca, que gritaba "Onii-chan". El alarmado estaba pues no recordaba ninguna herma...